El Silencio Del Amor || Kim SeungMin

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Hoy al fin habia llegado el cumpleaños SooRin razón por la que el novio de la chica se había levantado más temprano de lo usual, eran apenas las cinco y cuarenta cuando el chico ya estaba lavando su rostro y cepillando sus dientes, al terminar de hacer su aseo de todas las mañanas y ordenar su cama bajó hasta la cocina, encontrandose con su progenitora quien estaba apenas empezando hacer el desayuno y con aún su pijama puesta.

– ¡Cariño, buenos días! -Le sonrió-. ¿Por qué te has levantado tan temprano?

– Buenos días, mamá -Dejó un pequeño beso en la mejilla de ella-. Hoy es el cumpleaños de SooRin, ¿Lo olvidaste? -Rió cortamente-.

– ¡Oh, es cierto, cariño! -Rió también-. Lo siento lo había olvidado.

– Iré a su casa temprano, lo bueno es que hoy justo es sábado y no tendremos clases asique habrá más tiempo para preparar su cumpleaños.

– Me alegra que estés tan entusiasmado, cariño -Fue hasta él y le abrazó-.

– Supongo que es porque estoy enamorado de ella.. -Correspondió su abrazo y habló pensativo, mientras tenía una pequeña sonrisa-. Y además ella siente lo mismo que yo, asique eso me hace de estar de buen humor siempre, supongo.

– Estoy muy orgullosa de ti, Seungminnie -Mordió su labio inferior-. Aún con tu pequeño defecto sigues siendo hasta más feliz que las personas que están completamente sanas -No pudo evitar dejar salir algunas lágrimas-.

– ¡Oww, mamá, no llore! -Rió con sentimiento y le abrazó mejor-.

– Te amo, hijo -Dijo luego de calmase y mirarle de nuevo-.

– Y yo a ti mamá.

La historia de Seungmin por obvias razones la sabe su madre, quien ha estado con él desde su nacimiento ella sola, lo crío sola, lo mantuvo sola, lo cuido sola, lo vio crecer sola pues el padre Seung, bueno de él no hay mucho que decir. Ha tenido que ayudar a su hijo a ser la persona que hoy en día era, una persona luchadora y hermosamente amable, muy adorable y gentil, pues si no lo hubiera hecho seguro su hijo tuviera depresión o algo por el estilo, pues al chico le hacían un tipo de Bullying por no poder escuchar.

Después de haber tenido aquella charla la señora Kim siguió haciendo el desayuno con esta vez la ayuda de su hijo, para después poder desayunar felizmente y luego ella irse a su trabajo mientras su hijo iba a casa de novia.

(...)

– ¡Seungminnie! -Soltó la chica al ver llegar a su novio a su hogar, corriendo a sus brazos-.

– ¡Bonita! -Le abrazó fuerte empezando a dar algunas vueltas con ella en sus brazos-. Feliz cumpleaños.

– Gracias, Pocholito -Dejó un pequeño beso en la mejilla del chico para después este bajarla-.

Félix ya había llegado aquél hogar igual de temprano, pero este había llegado un poco antes puesto que vivía bastante cerca, se encontraba desayunando junto al hermano de la chica y por cierto se le había quitado el apetito al ver aquella escena de ambos chicos.

– ¡Hola, Seungmin! -Saludó la madre de la chica quien iba bajando las escaleras-.

– Buenos días, señora Park -Hizo una reverencia junto a una bonita sonrisa-.

– Cariño, ya tenemos que irnos, ya casí son las ocho -Iba llegado hasta su esposa tratando de arreglarse su corbata de buena manera-. ¡Oh, hola, joven!