¿Qué pasaría si Hinata Shoyo hubiese ido a la Universidad?
Con Kageyama adelantándose en el escenario mundial de los grandes equipos.
¿Qué pasaría si Oikawa no se recupera de su lesión de rodilla?
Con Iwaizumi convirtiéndose en fotógrafo y viajando...
∞ N/A Haikyuu no me pertenece. Todo es de su gran autor, Haruichi Furadate
∞ Resumen: El volleyball siempre formara parte de sus vidas con tazas rellenas de café, y videos de viejos campeonatos. Compañeros de preparatoria, finales de relaciones y con amores que jamás pudieron ser.
(Re) Afirmar (nos)
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Cuando Hinata regresa a Japón tiene un contrato firmado con los MSBY Black Jackals, poco más de 300 dolores en su cuenta bancaria y un nuevo edificio de apartamentos que pertenece al presidente del equipo.
Trae su Shonen Jump bajo el brazo, una mochila de viajero de montaña y su celular muerto, sale del ascensor bronceado, excitado y con el jet lago soplándole en la nuca. Hinata ahora cargar su vida entera sobre su espalda, usando millas de viajero y con el logo de Kenma tatuado en henna en la espalda.
Dejar Brasil sin saber si algún día regresaría ha sido extraño y un poco doloroso, como una aventura que solo estará dentro de sus recuerdos junto a la sonrisa de Pedro despidiéndole en el aeropuerto y con pequeños llaveros de sus amigos de entrenamiento de voleibol de playa.
Hinata sale del ascensor nervioso y vibrante, el primero en verlo por supuesto seria Atsumo, y es como si el tiempo se detuviera solo por un momento, el rostro entero de Atsumo se cierra de su sonrisa cínica y sus ojos chispeantes a algo más calculador, casi voraz, como si se estuviese conteniendo de atacarlo directamente en el pasillo donde cualquiera podría verlos e imponer una sanción.
Ambos se conocieron en las interhight, los zorros combatiendo contra los cuervos, había existido mucha burla y presión durante ese primer partido, Atsumo había derribado a Hinata una y otra vez junto a Osamu, riéndose incluso cuando pudieron copiar sin esfuerzo aparente el monstruoso ataque rápido que había provocado tanto problemas para Kageyama y él.
Hinata reconoce a un rival fuerte cuando lo ve, e incluso lo admira y pide sus secretos, porque es de sabios querer aprender mejor de la experiencia que simplemente imaginar cómo es que se puede llegar a ella.
Atsumo había sentido en ese momento, con solo 16 años un hambre voraz, con su estómago rugiendo y su boca salivando, pequeños bocados que solo le habían provocado más y más entre cada punto conectado del balón y la fuerza de Hinata orgulloso manteniéndolo con toques elevados.
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Atsumo había sido abierto entonces, incluyéndose pronto en el grupo de amigos cercanos a Bokuto y Akashi, no eran tan cercanos como quizás Shoyo lo era con Kenma pero Hinata sabía a la perfección el tipo de pensamiento que el armador tenía con respecto a las relaciones interpersonales, y como es que la sexualidad y la identidad eran algo prioritario no solo para él sino para su hermano también. Saber que ambos irían tras Oikawa después de su encuentro en Roppongi no fue ninguna sorpresa
