Capítulo 8

4 1 1
                                    

Suga's POV

En cuanto terminamos de cenar noté el mensaje que Jungkook había enviado al grupo. Para mi suerte, ya había planeado decirle la verdad y habíamos quedado en salir a caminar juntos solamente los dos luego de la cena. También tuve la suerte de que ella tenía la costumbre de dejar su celular en la entrada y jamás vio el mensaje.

— ¿Vamos? -le pregunté con una sonrisa y me siguió.

Antes de salir de la casa nos abrigamos bien ya que hacía tanto frío que de pura suerte no nevaba.

— ¿A qué se debe este paseo? -preguntó un poco confundida mientras tomaba asiento en un banco del parque. Yo simplemente me agaché frente a ella y sostuve sus manos en las mías.

— No he sido del todo honesto contigo y me está matando.

— Solo dime.

— Lo primero es que pasamos tanto tiempo juntos y me di cuenta de que te quiero en mi vida. Me gustas, de verdad. Eres lo primero en lo que pienso al despertar todas las mañanas.

— Yoongi, tú sabes mi situación con...

— Agust -asentí- Eso es lo otro que debo confesar.

— No hagas pausas así o voy a comenzar a creer que lo mataste.

— De cierta forma lo hice -suspiré mirándole a los ojos- la razón por la que la canción que escribimos juntos quedó tan bien es porque mis respuestas también son las de Agust. Era yo todo este tiempo.

Su cara estaba pálida, parecía que había visto un fantasma y sé que no se debía al clima actual.

— Quiero que sepas lo mucho que me apena no haberte dicho todo desde el primer momento que te vi en persona en el estudio. Tenía miedo -enlace nuestros dedos- y realmente espero que no me odies y me puedas perdonar con el tiempo.

Daya no reaccionaba. No decía nada, no soltaba mis manos, nada. Había confesado mis sentimientos por ella y finalmente había juntado el coraje para ser honesto. Yo sabía que no era bueno al expresarme y que no era cariñoso todo el tiempo pero lo estaba intentando porque de verdad me importaba.

— Sé que tus intenciones no fueron malas. No estoy enojada, solo sorprendida. Siento que no tengo tiempo a reaccionar ni sé cómo hacerlo aún.

— Entiendo.

— ¿Los chicos saben? -me preguntó y asentí.

— V se enteró porque entró a mi habitación en medio de nuestro videochat.

— Oh, era él... -murmuró.

— Sí. Es quien más enojado está conmigo y no puedo culparle. Namjoon escuchó todo y me aconsejó que fuese honesto. Es lo que intento hacer ahora. Y aparentemente Jungkook se enteró pero no estoy seguro cómo. En cuanto a Jin, Jimin y Hobi, no saben nada de nada.

— No voy a enojarme si saben solo me da curiosidad. Aún intento entenderlo en mi mente -me explicaba mientras acariciaba su rostro- tienes las manos heladas, Yoongi.

— Perdón.

— ¿Me puedes llevar a casa? Creo que sería bueno que nos sentemos a charlar sobre todo esto mientras bebemos café o algo.

Asentí con mi cabeza y me levanté, sujetando su mano nuevamente, dirigiéndonos hacia el auto. Le ayudé a entrar al auto y con el cinturón de seguridad. Entré del otro lado y comencé el auto.

— Oh, el mensaje de Jungkook en el grupo... -murmuró- le voy a responder.

— ¿Estás segura?

— Sí.

🌷Daya: Gracias, JK y perdonen chicos por irme de la fiesta sin avisar o saludar. Estoy con Yoongi camino a mi departamento. Tenemos mucho de qué hablar y algunos de ustedes lo saben. Feliz navidad 😘

— Pensé que ibas a estar muy enfadada conmigo y apenas me dirigirías la palabra -admití.

— Podría haberlo hecho -mencionó- pero no quiero estar mal contigo. Sé que tus intenciones eran buenas y no tengo ganas ni tiempo para dramas. A la larga me hace mal y no quiero eso. Me quiero evitar el dolor. Prefiero hablarlo tranquila, escucharte y que se me pase esto. No sé qué es esto que siento, no puedo llamarlo de otra forma. No es enojo. No sé qué es.

Sentía que su reacción era mucho más inesperada y serena de la que me merecía. Creo que estaba preparado para que no me entendiese y hasta me tratase mal pero no hizo ninguna de las dos. No sabía en qué términos nos encontrábamos ni hacia dónde íbamos pero saber que ella estaba dispuesta a hablar las cosas y arreglarlas hacía que quisiera quedarme cuando normalmente suelo huir. No sé si era posible pero creo que cada vez me sentía más atraído a ella ¿era normal?

En cuanto llegamos a su departamento nos sentamos en el sofá a beber café y hablar de todo. Aclaré todas sus dudas y hablamos hasta alrededor de las tres de la mañana. Podía notar que ella tenía sueño ya que estaba bostezando y sus ojos estaban algo llorosos.

Había una tormenta de nieve así que estaba básicamente atrapado hasta que finalizara.

— Deberías quedarte hasta que pase la tormenta.

— Voy a dormir en el sofá.

— Yoongi, no. Te va a hacer mal al hombro. Puedes dormir en mi cama.

— ¿Contigo? -no iba a desaprovechar mi oportunidad.

— No lo había pensado así pero si quieres... voy a cambiar mi ropa.

Me recosté en su cama solo vistiendo mis bóxers y una remera mangas cortas que llevaba debajo de mi camisa negra. Pronto la vi entrar al cuarto usando una remera de The Cure que le quedaba bastante grande, parecía un vestido corto.

— Eres preciosa -le susurré y sonrió.

Se recostó de costado, mirando hacia mí y acarició mi mejilla mientras yo la abrazaba por la cintura, manteniéndola en mis brazos. Nos miramos a los ojos por unos segundos antes de rozar nuestros labios en un dulce y cálido beso.

— Supongo que no soy tu bias

— hmm? -dijo algo mareada.

— Dijiste que a tu bias lo querías como a un hermano y recién me besaste.

— Tu me besaste, Yoongi -dijo sonrojándose.

— Pero no lo impediste.

— Quizá si vuelves a intentarlo lo haga.

Acaricié sus mejillas y la besé una vez más. No pude evitar sonreír al notar que no lo iba a impedir. Lo quería tanto como yo. Nos alejamos unos segundos para tomar aire.

— Deberíamos intentar dormir, Yoongi. Ya son las cinco de la mañana.

— Buenas noches, princesa -susurré en su oído.

En cuestión de minutos ambos nos quedamos dormidos, abrazados.

AGUSTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora