Miedos

04

Primera Parte

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Los cuatro amigos se encontraban pedaleando en sus bicis por las vacías calles del pueblo, Niall junta a Harry iban a la cabeza del grupo y atrás dde ellos Louis y por último Liam quien traía en el canasto de su bici la chaqueta de cuero que aún escurra un poco de agua. Por el camino pasaron por el centro donde se encontraba la joyería de los Malik, lugar donde incluso la mujer del alcalde pasaba a que le pulan sus más caros brazaletes o collares, o a gastar el dinero del pueblo en más joyas.
Zayn, quien se encontraba aún un poco perturbado por el reciente encuentro con su ex amigo, se encontraba adentrandose a la tienda. La campanilla del lugar sonó y su hermana levantó la vista de su revista de chismes cuando lo vio entrar, ella traía puesto una falda larga de color crema y una bonita de mangas cortas camiseta de color púrpura.

-Llegas Tarde - Le dijo con reproche mientras volvía a pasar las páginas de su revista. - Papá quiere que hagas unas cosas adentro.

Zayn solo se limitó a estar callado y siguio su camino a dentro de la tienda. La joyería de su familia era una de las mas visitadas en todo el pueblo, viudas iban a empeñar sus joyas después de la rara muerte de su marido, la mujer del alcalde siempre acudía continuamente para adquirir nuevas joyas y siempre estaban las madres del pueblo que iban solo a mirar.

Lo malo, era que a pesar de todo esto, su familia seguía recibiendo los continuos actos de racismo y violencia hacia ellos. Hombres blancos pasaban junto a la tienda con miradas de asco, madres que llevaban a sus bebes en elegantes cochecitos trataban con altanería a sus padres. En una ocasión, Allyson Petch, una de las mujeres mas bellas del pueblo y con la que se presumía mas dinero gracias al tan alto cargo de su marido en la alcaldía, había arrojado el dinero en el rostro de su hermana después de comprar un caro collar de perlas. El sintió odio, molestia. Indignación. Desde su lugar no pudo mas que ver como, muy avergonzada su hermana tuvo que agacharse a recoger el dinero. El cual después revisándolo. Resulto que eran billetes falsos.

Su padre esa noche los azoto a ambos tan fuerte con su cinturón a él y su hermana, fue tanta la fuerza de los golpes, que no pudo dormir boca arriba por casi una semana. Si trataban de acusar a Allyson Petch, la mujer blanca, hermosa y mujer de uno de la mano derecha del alcalde. Tal vez terminarían sobre el capot de un auto de policía, con las manos hacia atrás sujetas por un oficial, y con un cuchillo o bala enterrado en su espalda. Manchando de rojo escarlata el auto. 

-Ya era hora que llegaras ¿Dónde estabas? - Su padre lo saco de sus pensamientos. Su mirada cariñosa pero estricta a la vez lo observaban fijamente. Esperando una respuesta de inmediata.

-Yo... Me encontré con un amigo por el camino. Quise conversar con el un momento- Su padre lo observaba con escoba en mano, barría su pequeña sala donde se encargaban de pulir y darle mantenimiento a las joyas. - Que no se vuelva a repetir, por favor- Zayn asintió con la cabeza. 

- Necesito que limpies el sótano- dijo su padre tajantemente. -Después llevaras unos encargos.

La sangre de el joven se congelo. Bajar al sótano era lo mas aterrador que le parecía. Odiaba ese húmedo, oscuro y apestoso olor a guardado del lugar

-Puedo... terminar de limpiar aquí y tu vas al sótano. - Su voz salió mas temblorosa de lo normal. - ¿No crees? 

-Eres un hombre por Allha, si te digo que vayas a limpiar el condenado sótano iras ¡¿Escuchaste?!

Zayn en verdad no queria ir.

-¡¿OISTE?! - Levanto su voz. 

-S... si- Respondió por puro instinto y obediencia. Sus pies sin que el se diera cuenta, se movieron lenta y dolorosamente hasta la puerta que llevaba a la  puerta que bajaba al sótano.