Inicio del Camino.

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Nieto y abuela salieron de la boveda y cuando el porton de metal se cerro, varios sellos magicos aparecieron para despues desaparecer.- ¿Que fue eso, Gradding?- pregunto Dorea mirando el porton de metal.- Es una defensa magica, una barrera de magia que solo responde a las firmas magicas del señor o señora de casa junto a su heredero.- dijo el goblin mientras el duo asentia.

El vagon volvia a recorrer las vias hasta llegar a un pasadizo que daba al pasadizo central del banco, nieto y abuela salieron del banco despues de despedirse del goblin quien volvio a su despacho para sonreir, el pulso que sintio solo significaba algo y eso era un cambio, un cambio inevitable; mientras el nieto miraba la lista mientras su abuela lo miraba sobre su hombro.- Bien, iremos por los libros a Flourish y Blotts, por un buho al Emporio de Lechuzas, por el caldero y los guantes a.....- el pelinegro miraba su alrededor solo para que su abuela lo tomara del hombro.- El kit para pociones mas algunas cosillas mas con el Sr. Mulpepper y el Sr. Pippin, e iremos de viaje para conseguir un caldero.- dijo Dorea sabiendo a quien podria pedirle el caldero ya que cierta persona estaba en deuda con ella y con Charlus, Hadrian solo asintio.- ¿El telescopio podemos conseguirlo de esa tienda?- pregunto Hadrian ya que recordo cierta tienda en Londres donde vio un telescopio que, a palabras del dependiente, era facil de manipular.

Dorea afirmo ya que era posible que Nimue junto con cierta amiga suya lo pudieran encantar para que este funcionara sin ningun problema.- La balanza la conseguimos junto con el caldero y los guantes.- dijo ella mientras el pelinegro miraba la lista.- Las tunicas y el....¿utilizan el gorro?- dijo el pelinegro solo para que su abuela asintiera.- Las tunicas con Madame Malkin y el sombrero solo lo utilizan en ocasiones especiales, no diariamente.- dijo ella mientras el niño arrugaba la nariz.- En cuanto a la varita....- pregunto el niño mientras miraba a su abuela.- Vamos con el Sr. Ollivander.- dijo ella haciendo que los dos comenzaran su compra. Estaba esperando a que una de las varias dependientas que atendia la tienda de Madame Malkin cuando alguien lo empujo hacia delante chocando con una niña de su edad que iba acompañada de una señora de la edad de su padre, la niña se volteo para gritarle al niño que se atrevio a empujarla cuando vio como una mata de pelo negro miraba a un niño pelirrubio quien siguio corriendo por la tienda empujando a todo el mundo.

Hadrian se volteo para disculparse con la niña solo para que esta se volteara rapidamente.- Eto.....disculpame, fue sin querer queriendo.- dijo el niño mientras la niña asentia, la señora miraba a ambos niños, el pelinegro se le hacia conocido pero no sabia de donde y cuando vio a la niña que la acompañaba solo miro al frente, un sonrojo aparecio en las mejillas de la niña quien por unos breves segundos miro al pelinegro y el como esos verdes ojos brillaban logro enmudecerla y le parecio lindos.- ¿En que puedo ayudarlos?- Hadrian miro al frente solo para ya no encontrar a la niña ya que una dependienta se la llevaba a otra seccion de la tienda.

El pelinegro seguia mirando en la direccion en la cual la niña se iba.- Hadrian.....- dijo Dorea solo para suspirar antes de indicarle que necesitaban 3 tunicas para el colegio Hogwarts y un respectivo recambio, osea se compraba 6 tunicas, las 6 hechas de piel de dragon e hilo de acromantula, Hadrian solo se disculpo con su abuelita por estar desatento aunque se preguntaba quien era esa niña y porque la buscaba, en fin, los dos salieron despues de 2 horas ya que su abuela le compro dos trajes hechos con el mismo material.- Bueno, solo nos falta la varita.- dijo el pelinegro ganandose la negativa de su abuela.- Falta lo mas importante, falta el baul.- dijo ella mientras lo guiaba a una tienda cercana. Despues de que su abuela "negociara" (amenazara) al tendedero, este le dio al pelinegro un baul de siete cerraduras con diversos hechizos de expansion para que el pelinegro tuviera un estudio y cierta sorpresilla que se llevaria una vez salgan de viaje por su caldero.

-Vamos a por la varita.- dijo el niño solo para que su abuela sonriera.- Que esperamos.- dijo ella llevandolo a la tienda de Ollivanders, cuando entraron al local suenan las campanillas en la entrada, el pequeño junto con su abuela entraron para encontrar que el mostrador estaba desierto salvo por un cuadernillo abierto y una pluma remojandose en la tinta.- ¿Hola?- pregunto el niño mientras su abuela miraba los muros solo para suspirar ya que cada vez que venia la tienda estaba atiborrada de varitas, los estantes acaparados con cajs y cajas de varitas llegaban hasta el techo y si se asomaba a la trastienda seria lo mismo, se escucho como ruedas girando y se alcanzo a ver como una escalera con ruedas en la base choco con el filo de una estanteria contigua a la entrada de la trastienda.- Cuidado con tu cadera Garrick.- dijo Dorea mirando como un señor de pelos blancos y un traje con volantes bajaba la escalera.- No lo olvidare señora Potter.- dijo Garrick Ollivander, el dueño de la tienda.- ¿Y quien es el jovencito?- pregunto el señor mirando al pelinegro quien solo estiro su mano.- Soy Hadrian Potter.- dijo el niño, Grrick miro a Dorea quien solo asintio, el señor con pelo blanco le estrechoi la mano mientras que con la otra solo apreto el puño.- Entonces, Hadrian, ya llego la hora.- dijo Garrick mientras le revolvia el pelo despeinandolo.- Ire a buscar su varita.- dijo el peliblanco mientras buscaba por una de las varias estanterias.- ¿Podra ser esta?- se pregunto mientras tomaba una caja amarillenta, se la dio al nuiño quien la tomo esperando que pasara algo.- Agitala.- dijo Dorea solo para que el niño la agitara y los cajones de papeles de la estanteria contigua salieran volando.

-No, no es esa.- dijo Garrick yendo a por otra caja mientras Hadrian dejaba la varita como si esta estuviera caliente.- ¿Sera esta?- se pregunto el peliblanco solo para alcanzarle la otra varita y el pelinegro la agito y un tarro de vidrio se rompio salpicando el contenido por todo el lugar.- Lo siento.- dijo el pelinegro solo para que Garrick le sonriera.- Pasa a menudo, asi que no te preocupes.- dijo el dueño de la tienda pasando a otra estanteria.- ¿Sera posible...- se pregunto mientras cogio una de las cajas verdeoscuro con cierto temor, Garrick le entrego la varita pero no paso nada.- No, tampoco es esa.- dijo Garrick mientras se llevaba la caja y la ponia en su mismo sitio.- ¿Sera....esa varita?- Garrick se adentro a la trastienda mientras el duo escuchaba como cajas se caian y muebles se movian dentro de la trastienda.- ¿Garrick?- pregunto preocupada Dorea solo para soltar aliento que no sabia que estaba aguantando al ver a su amigo salir de la trastienda con una caja negra y un candado magico cerrando un cerrojo antiguo.- Esta es una....- soplo el polvo que habia acumulado la caja entre sus desvanes.- Esta varita, es tan antigua como la tienda.- dijo Garrick mientras apuntaba su varita al candado.- Mi padre me conto que fue encomendada a mi tatarabuelo despues de uand elas peores guerras magicas.- dijo el anciano mientras abria la caja negra y con sumo cuidado tomo la caja tendiendosela al niño pelinegro quien tomo con delicadeza la seda negra que cubria la varita, una varita negra con una linea blanca en el medio y una cabeza de dragon en miniatura en el pomo de esta.- Es una varita....unica en su clase.- dijo Garrick mirando como el pelinegro la tomo y un viento salido de la nada agito su cabello mientras la punta de la varita soltaba volutas de humo rojo.- Increible.- dijo el mientras miraba absorto al niño quien bajo la varita.- La leyenda era cierta.- dijo mirando a Dorea.- "De mis descendientes uno digno surgira y el cambio al mundo magico traera".- dijo Garrick tomando la mano del niño para que este lo mirara a los ojos.- Estas destinado para grandes cosas, Hadrian.- dijo Garrick antes de que Dorea lo mirara.- Hadrian, ¿porque no dejas la varita y vas a comprar esa porta-varitas que vimos en Malkins?- sugirio Dorea haciendo que Hadrian depositara la varita en la caja y saliera a comprar esa porta-varitas de piel de serpiente la cual podria atarla a su brazo izquierdo ya que este era diestro.

-¿De quien es la varita?- pregunto Dorea a Garrick quien le devolvio la mirada desde detras del mostrador.- Morgan Le-fay.- dijo el solo para que Dorea mirara la varita con reticiencia.- Se perdio la varita, ¿como sabes que es de ella?- pregunto la dama mientras Garrick salia del mostrador para cerrar su negocio brevemente.- Mi tatarabuelo la encontro sangrando cuando Merlin fue tras Destiny.- dijo Ollivander mientras Dorea asentia.- En ese momento ella sabia que estaba cerca de su muerte y entonces ella le confio la varita esperando a que uno de su sangre la tomara como suya.- dijo Garrick mirando la varita que por 5 generaciones estaba bajo la familia Ollivander.- Es momento de que Hadrian la tome y cambie para siempre el mundo magico.- sentencio Garrick solo para abrirle la puerta a Hadrian quien regreso con su porta-varitas en su brazo izquierdo y guardo su varita en ella. Dorea y Hadrian salieron de la tienda mientras Garrick los miraba alejarse.- Un gran camino tiene que recorrer y en este me temo que la guia de Dorea solo sera el inicio, lo demas depende de ti, Hadrian.- dijo el antes de mirar todo el desastre.-Siempre me sorprenden los Potter.- dijo para ordenar sus papeles tal y como estaban antes del desastre.

Al volver a casa Hadrian se encerro en su cuarto para ir leyendo los libros que este año se usarian en el colegio, mientras que su disque familia seguia sin prestar atencion al niño que pronto iria al colegio e iniciar el camino a un cambio en el mundo magico tal como se conoce. En otro plano, especificamente en una edificacion que flotaba sobre el mismo centro que unia los universos o reinos un orbe en el centro de un podio algo misterioso brillo despertando a una pareja, ambos eran marido y mujer los cuales se levantaron y miraron como el Orbe de Nabu mostraba varias realidades que se unian en un solo centro, el cual mostraba a un pelinegro con una espada que ambos reconocieron y detras de el a un dragon blanco el cual brillaba, el pelinegro con su espada en mano y el dragon hacian frente a una ola de oscuridad en la cual refulgian dos ojos, ojos rojos y una sonrisa siniestra.- Vamos Inza, al parecer el elegido esta comenzando su camino.- dijo el hombre antes de ponere un amuleto en el cuello y cogiendo un casco brillante.



Alterando el DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora