El amor puede provocar grandes tragedias, El dolor de una perdida marcara el rumbo de nuestro Héroe para conseguir su tan ansiado objetivo, ¿Qué sucederá?, pues lee esta historia.
Los personajes de Danmachi no me pertenecen, todos los créditos a su...
Hola soy yo de nuevo, que rápido pasa el tiempo, bien a lo que iba, perdonen por los Gifs, no tengo nada que decir sinceramente, así que mejor vamos con la historia.
Ha pasado tres días desde que complete mi primera misión, nunca antes imagine matar a un dios, pero este fue el camino que escogí y lo recorreré por completo.
Me he mantenido oculto en la ciudad de Esparta descansando un poco antes de volver a partir, desde ese día pasaron cosas curiosas, las ciudad se volvió mas alborotada y con muchos disturbios, la tranquila y hermosa ciudad cambio radicalmente para ser un lugar de robos y asesinatos, la falta de soldados y la perdida de la persona a cargo de la ciudad desequilibro bastante la situación, además de eso, circulo una leyenda sobre mi dándome un apodo muy extravagante. "Fantasma de Esparta", no sonaba tan mal, tal vez lo use para ocultar mi identidad, no quiero declarar a los cuatro vientos mi nombre y que alguien de Orario se entere de mi.
Necesito seguir fortaleciéndome todo lo mas que pueda hasta volver, los cambios que sufriré durante mi viaje son necesarios para crecer como persona. Y hablando de cambios, debería conseguir ropa nueva de combate, la mía prácticamente esta hecho añicos, necesito algo nuevo.
Comencé a caminar un poco en circulos intentando pensando en alguna idea.
-¡Ya se!, la armería donde guardan todo el equipamiento esta cerca del palacio, debería ir hacia allá y tomar algo prestado.
Sali de la casa en la que me había estado quedando estos tres días, vi que los propietarios simplemente huyeron de la ciudad cuando esta entro en caos y aproveche para quedarme en la residencia usando todo lo que habían dejado.
Camine tranquilo por las vacías calles, la mayoría de la gente decidió abandonar la ciudad por seguridad porque lo no había nadie, la poca gente con la que me topaba, solo me veían y retrocedían de inmediato y huían despavoridos a lo cual solo daba un leve suspiro.
Luego de unos minutos llegue al lugar, lo único que me impedía seguir era una puerta de metal, junto a un cartel que negaba el acceso para personas no autorizadas. En el suelo había una nota con lo que parecía un mapa, aparentemente donde se encuentra la llave de la puerta, en el mapa se podía ver que el camino estaba lleno de trampas que había que atravesar. Sin embargo.
[Pam]
La puerta cayo al suelo luego de que una patada la despegara del marco haciendo un gran ruido.
-¿Hacer todo ese recorrido para obtener una llave? ¿En serio alguien habría seguido el mapa pudiendo derribar la puerta? ¿Acaso esto es un juego o algo por el estilo?
Olvidándome de esos pensamientos ingrese y empecé a rebuscar entre las cosas que había, entre varios segundos buscando entre todas las cosas que había decidí tomar unas hombreras y brazaletes dorados junto con un recubrimiento del mismo color para mis botas aladas para evitar que se estropeen y que me dejen sin medio de transporte. También lleve un nuevo cambio de ropa, tome una polera de color negro y unas pantalones grises, además de una gabardina blanca sin mangas junto a lo que parecía una capa de color negro que se envolvía en mi cuello y para finalizar unos guantes negros.
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