¿Qué es el amor?

Capitulo 8. La persona que llegó a cambiar mi vida (Parte 1)

D- No me puedes decir que no ha pasado nada sí éstas llorando de esa manera- me dijo tocandome mis mejillas con sus dos manos.
W- Pero de verdad no ha pasado nada Dan - le dije sonriendo
D- Está bien si no me quieres decir, le iré a sacar la verdad a ese estúpido entonces- se dio media vuelta
W- No espera! - le dije abrazándolo por atrás - te contaré todo.

Daniel se voltio hacía mí y yo le empecé a contar todo, le dije que Sebastían me había besado aún teniendo a esa chica a su lado, que me había ilusionado y luego de la nada me boto, y que había hecho mi corazón añicos, cada vez que yo hablaba mi voz se tornaba cortada y cada vez más silenciosa hasta el punto de hacer sonar mi llanto.
D- Ya basta! Está bien, no sigas - me abrazo - no puedo seguir viendote así, me parte el alma ver a la niña de mis ojos llorando por un tipo así de estúpido -
D- Prometo que de mí parte daré todo para conquistar te, para hacerte olvidar a ese mal amor, solo quiero una oportunidad es todo - dijo acariciandome mi cabello, para luego pasar a mis mejillas, la forma en la que Daniel me tocaba y acariaba tan tiernamente me hacía sentir de alguna forma protegida, como si nada importará más que él y yo.
D- Princesa, vamos a casa - dijo tomándome de la mano.
W- Sí, vamos - le dije apretando su mano lo más fuerte que pude, no quería que esa mano me soltará jamás.
D- Vamos - comenzó a reír.

Daniel y Yo llegamos a mi casa, el me dejo en la entrada y yo me despide de él, poco después Daniel se fue y yo entre, en cuestión de segundos quede totalmente dormida, ya que no había sido para nada un día fácil.
*Al día siguiente*

Llegue a la escuela normal, por alguna razón me sentía tranquila, no vi a Sebastían hasta que entre al salón.
S- ¡Wendy! - me jalo del brazo
W- ¿Qué quieres Sebastían? Sueltame - le dije tratando de quitar su mano
S- No lo haré, tu y yo tenemos mucho de que hablar -
W- ¿Disculpa? Yo no tengo nada de que hablar contigo-
S- Oh sí, claro que tenemos -
W- ¡Sueltame de una vez! Por dios, ¿Qué tan sínico puedes ser? Tienes novia, aprende a respetarla -
S- De eso es de lo que yo.... -
Maestro: Buenos días, ¿Pasa algo jóvenes? - nos dijo mirándonos serio.
W- No maestro no pasa nada. - dije soltándome de Sebastían
Maestro: Bien entonces tomen asiento- dijo dirigiéndose a su escritorio.

Las clases se pasaron muy rápido hasta llegar a la hora del descanso.
*En el recesó*
???: ¡Wendy! - gritaron atrás de mí e inmediatamente giré para ver quien era.
W- ¡Ren! - lo abracé
R- Jajaja, el mismo- me cargo y me dio vueltas
W- Jajaja ¿Necesitas algo de mí? -
R- Antes de eso, espera, ¿Por qué tienes tus ojos tan hinchados? ¿Quién te hizo llorar? - me dijo molesto.
W- Ah, tengo que ir a comprar mi almuerzo - me di media vuelta pero el me tomo del brazo
R- No puedes escapar de mí, así que quieras o no me contarás-
W- *suspiro* Vamos a la azotea-

Ren y Yo nos dirigimos hacía la azotea y yo comencé a contarle todo sobre Sebastían.
R- Ese maldito, lo voy a matar-
W- ¡Ren, por dios, calmate! - le dije tomándole el brazo.
R- Wendy, ¿Cómo carajos quieres qué me calme? Me voy por unos días y ese bastardo hace lo que se le da la gana, ¿Quién se cree qué es?
W- Basta, quiero olvidar todo lo que tenga que ver con él, por favor-
R- Lo haré, me calmaré, pero será soló por está vez, sí el vuelve a lastimarte iré y arreglare sus problemas-
W- Gracias- suspire

El descanso término y yo y Ren nos dirigimos hacía nuestros respectivos salones, en todo ese rato de clases Sebastían quiso hablar conmigo, pero yo sólo lo ignoraba y así seguí hasta que las clases acabaron.
*En la salida*
D- ¡Wendy! -
W- Daniel, hola - lo abracé por la parte de su cuello y el me abrazo por la parte de mi cintura.
D- Te tengo un regalo- dijo sacando una caja de su bolsillo - toma.
W- ¿Qué es? - dije emocionada
D- Abrelo princesa-

Abrí la caja y era una pulsera con la inicial "D".
W- Oh está hermosa - dije realmente fascinada.
D- Ven, dame tu mano te la pongo- Daniel me puso la pulsera. - Mira ahora cada uno tenemos nuestras iniciales- me dijo alzando su mano y enseñándome una pulsera con al inicial "W".
W- De verdad que fue una sorpresa, me gusto mucho- Daniel me cargo y empezó a darme vueltas y solo reíamos hasta que...