Parte 8

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Gaara 8

Después de acordar que Tenten conseguirá los planos del museo, vaya a saber cómo, todas las chicas se retiran, dejándome a solas con Matsuri. Puedo notarla pensativa y preocupada, así que no dudo en preguntar si hay algún problema.

—¿Te encuentras bien?

Ella solo asiente con la cabeza, no me convence del todo, pero decido que no voy a insistir.

—Te acompaño a casa —le digo, ella vuelve a asentir, así que comenzamos a caminar hacia su hogar, no deseo separarme de ella, así que planeo llevarla hasta la puerta, sin embargo, me siento un poco nervioso, he estado pensando algunas cosas, cosas relacionadas con nuestra relación.

Si todo el tema de Sasori sale bien y logramos derrotarlo, entonces nosotros podremos tener una vida común en esta época, ¿podremos estar siempre juntos? De sólo pensar en ello, me siento un poco emocionado.

Cuando llegamos a su casa, en lugar de despedirme de ella, me acerco y toco la puerta, Matsuri me mira sorprendida, pero yo continúo serio al ver que su padre es quien nos abre.

—¿Matsuri? —pregunta un poco confundido, supongo que no es normal que su hija venga con un chico y éste toque a la puerta, en lugar de que ella sólo entre.

Yo hago una reverencia, ¿así que él es el padre de Matsuri? Esta es la primera vez que lo veo, ya que, en nuestra anterior vida, él fue asesinado antes de poder conocerlo, o siquiera conocer a Matsuri, igual que su madre.

—Mi nombre es Ikigami Gaara —me presento, ahora que lo pienso, el apellido que he usado durante dieciséis años se siente un poco extraño.

El señor me invita a pasar a su casa, nos sentamos en la sala y la madre de Matsuri nos sirve un poco de té, ninguno de los dos me aparta la mirada, incluso abren un poco sus ojos cuando ven mi uniforme.

—Entonces... debo suponer que estas saliendo con mi hija —dice el padre de Matsuri, pero no alcanzo siquiera a responder, es ella quién contesta por mí.

—Sí.

Sonrío levemente, me agrada que ella reconozca nuestra extraña relación ante su familia. Su padre vuelve a mirarme, parece muy serio, aunque no me siento amenazado.

—¿Y a qué se debe tu visita hoy? —pregunta, yo le sostengo la mirada.

—Vine a pedirle una disculpa —respondo—. Un amigo mío murió el martes —comienzo a explicar, ya que ambos padres parecen algo confusos con mis palabras—. Yo me encontraba con Matsuri cuando esto ocurrió y ella me acompañó a casa de mi amiga.

—Hinata también es mi amiga —interrumpe Matsuri, intentando no cargarme la culpa de todo, puedo notar que se preocupa por mi imagen ante sus padres, así que asiento con la cabeza.

—Era muy tarde por la noche, y sé que debí traer a Matsuri a casa —continúo explicando, bajando la mirada—. Lamento mucho los inconvenientes y si los hice preocuparse.

La madre de Matsuri ríe ligeramente, mientras su padre arquea una ceja.

—Que muchachito tan correcto, Matsuri —le dice a su hija, la cual sonríe.

En ese momento, el padre de Matsuri decide también sonreír, parece que no lo hice mal después de todo.

—Está bien, muchacho —dice mucho menos serio, haciéndome sentir aliviado—. Solo promete que cuidarás bien de Matsu.

Asiento con la cabeza.

—Tiene mi palabra.

Matsuri sonríe, haciéndome sentir más animado y confiado, creo que podré llevarme bien con su familia, cuando todo esto acabe, me gustaría conocerlos mucho más.

Relojes de Arena (Gaara)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora