Tomé algunas cosas para ir en su búsqueda, cubrí mi cabeza con una gorra, y mis intenciones bajo mi sonrisa.Fui hasta su casa intentando encontrarme con él, pero más allá de la puerta no pude pasar.—¡Hola Tachihara! ¿Cómo has estado? —Me contestó la señora Kouyou, Le noté un tanto nerviosa.
—Hola, muy bien ¿Y usted?
—¡Bien gracias! ¿Qué te trae por acá? —. Sospeché que algo pasaba
—Quería ver a Chuuya pero creo que es un mal momento —.
—La verdad, si. Está con un amigo y me ha pedido que por favor no lo veas...— suspiró profundamente y luego me miro intentando sonar más animada—por cierto, ¿Qué le pasó a tus cejas? Digo, no me lo tomes a mal querido pero.... Pareces una britany
Me costó entender al principio pero tenía razón e intenté seguirle el tema de conversación
—¡Ja, ja, ja! Bueno... Es una historia graciosa en realidad
Lo dije mientras razcaba mi cabeza por encima del gorro
— En resumen, jugaba con fuego y me quemé hasta las cejas ¡Ja, ja! —. Mentí, no intenté decir la verdad, ¿Pará qué? De nada serviría ya, seguro ahora estaban chuuya y Dazai siendo plácidamente felices y yo solo llegaría a estorbar, motivo por el cual sin más dí la media vuelta y me fui.
†★†
Llegando la noche, en medio de el martirio que era estar sin él, oí un poco de música, para mi desgracia, la misma que escuchábamos entre las tantas llamadas que hicimos. Tomé mi celular y escribí:
«Yo te aseguro que sus brazos, jamás tendrán suficiente calor para siquiera entibiar tu cuerpo. Que tus ojos perderán esa chispa de magia al observar su sonrisa, que su piel te parecerá áspera, puntiaguda, y las piezas de tu alma no encajarán con la suya. Que cuando menos lo esperes, vas a soltarle, porque en el abismo donde vas a encontrarte, solo querrás mis manos para poder sujetarte. Y te aseguro una última cosa, sostendré mi palabra hasta que pueda cumplirla, por eso, te aseguro qué cuando llegue ese día que decidas liberarte de esa jaula rota donde ahora te encuentras cantando esperando un "tainted sorrow", estaré frente a tu puerta para brindarte mis alas».
Medité un par de segundos y lo envié sin importarme la respuesta, sabría que aquello me rompería aún más, sin embargo, ya estaba en este viaje y más allá de sufrir, nada más pasará.
Me dejó visto. —"Una respuesta me hubiera dolido menos"—. Pensé en ser perseverante pero la respuesta de su parte era obvia.
Y pese a que él estaba con alguien, yo no haría sufrir a otra chica o chico por algo de lo que no es culpable.
Una tarde que me disponía a dejar el hospital para ir a casa, me encontré de casualidad a Akutagawa, quien me comentó algo que dio vueltas y vueltas en mi cabeza.
—¡Hola amigo Charizard!, ¡que sorpresa encontrarte acá!
—Aquí trabajo— dije señalando la entrada del lugar y al mismo tiempo la bata que traía puesta—no es una clínica pero me va bien, no me quejo... ¿Y qué haces por acá?
—Nada, solo andaba caminando, por cierto quiero decirte algo
—Mientras no sea una mala noticia, últimamente me he sentido como gato de callejón sobre la lluvia...
—No, mira ¿Sabes? Vi al chico que estaba internado acá
—¿Qué chico?... ¿Chuuya? ¿Cuándo lo viste? —. Lo zarandeé un poco.
—¡Cálmate, tigre!... Ayer, andaba con su madre. Se veía muy mal, desganado, delgado, pálido y sin fuerzas
—Disculpa, estoy algo nervioso. ¡Cuéntame, por favor! —Dije tomando su hombro
—Le pregunté que hacía ahí y me contestó que está tratándose ahí, que iba por otro ciclo de medicamentos y chequeo médico... Que se ha sentido bastante agobiado, y le pregunté por ti...
—¿Y que te dijo?
—Nada, solo agachó la cabeza...y-...— Lo interrumpí antes que siguiera.
—¡Pues obvio!... ¡Ya está con alguien más y no conmigo! por eso debe haber bajado la mirada,¿No te parece? —. Alcé mis brazos en señal de ironía.
—¡No lo creo! Déjame terminar de contarte... Él estaba muy triste pero no por su salud, sino porque dentro de todo... te extraña, y en sus ojos lo reflejaba... Creo que si bien se alejó o habrá pedido que lo hagas, es porque no quería que lo vieras así, en ese estado, con su cuerpo marchitándose por aquel proceso que está pasando... No existe nadie más
—¿Te lo dijo?
—No, pero lo percibí
Quedé pensativo un momento, me despedí de mi amigo y le agradecí por haberme dicho lo sucedido. Rumbo a mi hogar, llamé a la señora Kouyou para confirmar algunas cosas.
El teléfono sonaba pero no respondía...Seguro no se había cambiado aún a Movistar.
volví a llamar y ahí contestó.
—Hola hijo... Disculpa estoy algo ocupada, ¿Sucede algo? —
—¡Hola, señora Kouyou! No le quitaré mucho tiempo, solo una pregunta respecto a Chuuya y le pido por favor me la pueda responder, yo a él lo quiero, ¡Necesito saberlo!
—Bueno, solo porque sé nota cuánto te interesas por él y por mí
—Usted me contó que había un chico del pasado de él en su búsqueda, dígame y por favor con la verdad,ellos... ¿Están juntos?
La pelirroja se quedó en silencio unos segundos y luego de eso me respondió
—Creo que no me corresponde responder eso, no obstante, te di mi palabra de darte la verdad a lo que preguntaras... No, no están.
Mira, ésto no lo debe saber él pero lo he oído llorando, también leyendo una y otra vez los libros que le obsequiaste... Ahora debo colgate, gracias hijo y ten cuidado en tu trabajo con lo del virus.
—¡Muchas gracias señora! Claro, me cuido y tomo las medidas de seguridad pertinente... Un abrazo y nuevamente gracias
No pasaron ni dos minutos y volví a llamar pero esta vez a mi jefa, pidiéndole que me diera libre el día de mañana, que me comprometía así sea a doblar turnos por el favor, no se hizo problemas y aceptó. Luego una última llamada, debía confirmar el servicio de mensajería para eso de las 10 am, y pedir de favor añadir unas palabras que escribí, en una nota junto al desayuno.
Llegué a mi casa enérgico, ansioso, derrochaba tanta energía que me temblaba el cuerpo, sentía que vibraba. Oí música, confiaba en que no habría problema con lo planeado, y me dormí rápidamente, aguardando ver a través de mi ventana el amanecer.
Pero todo lo que ví fué lo contrario a eso...
El cielo era...¿Rojo?
Podía escuchar una risa energética de fondo...una risa conocida pero en menor intensidad.—¡No puede ser!—Pensé— ...¡E-Es la risa de Chuuya!
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★MONSTER AMONG MEN★ (TACHICHUU)
NouvellesAunque le teman a la muerte, las personas no dejan de acercársele. Sea en ciudades o en la literatura, la muerte no deja de consumir personas. Es un evento de la vida que no se puede revertir. -Dazai Osamu