3500 Km - Sin Fronteras

parte 6

Comienza otro día lleno de entusiasmo, siempre me despierto tarde pero nunca faltan sus mensajes, dándome los buenos días o respondiendo mensajes que ya le había dejado yo, muy poco podíamos estar al mismo tiempo y cuando por fin lo estábamos siempre la notaba un poco diferente, ocasionalmente preguntaba si algo pasaba y su respuesta siempre fue: "nada, todo bien". Aunque ella lo negara yo sabía que algo pasaba, si es cierto que tenía sus problemas y yo estaba al tanto de eso, pero no podía evitar sentir que algo no estaba bien y que ella poco a poco cambiaba, no era igual que siempre y a pesar de que ella no cambiaba su forma de hablarme yo lo sentía muy dentro de mi.

Deje que el tiempo pasara y solo esperaba que fuera algo momentáneo pues ya había pasado algo así, hemos pasado muchas cosas y no creo que está fuera algo que superaría a todo lo demás.

El gran día llegó, ella muy contenta me escribe y me hace saber que ya por fin había comprado su teléfono y que su frustración estaba en no tener dinero y trabajar a diario para poder comprar uno, se sentía un poco agobiada y quería que el tiempo pasara rápido. Yo por mi parte estaba muy feliz, por fin podríamos hablar sin restricciones y estar en contacto a cualquier hora del día, volver a las llamadas que duraban horas y horas, volver a tener esa posibilidad de hacer cualquier cosa en una noche, al fin y al cabo ella y yo podíamos hacer cualquier cosa y volverla divertida. Hablamos un poco y me mostraba las maravillas que su nuevo teléfono tenía y yo estaba muy contento al verla así, a los pocos minutos le pedí que me esperara pues me iba a ocupar, sus palabras solo fueron: "Dale sin cuidado"

2 horas después trato de saludarla pero veo que los mensajes no llegan, pensé que algo había pasado con su internet y no le tome mucha importancia, al día siguiente veo que siguen igual y que al tratar de enviar más aún sigue igual, fui a otra red social pues pensé que había problemas en la otra y que sorpresa me lleve... Me tenía bloqueado de cada red social en la que estábamos conectados, así sin más, sin previo aviso. No entendía nada, ¿Que hice mal? Fue mi primer pensamiento, ¿Que motivos tenía para hacerlo? ¿Acaso ya no la hacía feliz? ¿Acaso todo lo que sentía a ella no valió nada?.

Fueron estos y mucho más pensamientos que llegaban a mi mente y trataban de herir mi corazón, no entendía nada y sin dudarlo siempre me decía a mi mismo que no reaccionara de forma apresurada y que esperara a que ella volviera, tal vez solo era cuestión de unos días y todo esté bien luego. Me decidí a no buscarla para darle su espacio aunque siempre paso por mi mente tratar de contactarla, pues no soportaba no saber cómo estaba...