XIV

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POV DIANA

Llegamos a casa de Akko, después de lo que se podría llamar una noche muy productiva, había confiado en ella, le había dicho todo, mi matrimonio arreglado y los problemas que me llevaron a tomar esa decisión, lo más importante para mi fue asegurarle que quería estar con ella, que no quería a Andrew aunque era él padre de los gemelos que son lo único bueno que salió de toda esta farsa.

No recordaba muy bien la casa, la última vez que vine estaba más interesada en hablar con Akko que en ésta, además, que cuando me fui de aquí salí tan rápido que no me había fijado en lo hermosa que era, tenía un ambiente muy familiar.

"Bienvenida a la casa Kagari de nuevo" Dijo con una sonrisa.

"Es una casa muy linda, no la recordaba muy bien".

"¿Quieres tomar algo?".

"Sí, eso estaría bien" Me puse muy nerviosa, estábamos solas y no sé si estaba lista para dar el siguiente paso en nuestra relación.

"¿Estás bien?".

"Si, es solo un poco nerviosa".

"¿Nerviosa? ¿Por qué?".

"Bueno... Ya sabes... No me hagas decirlo".

"¿Decir que?".

"Akko, estamos solas y no sé si aún esté lista".

"Diana, ya te dije que voy esperar hasta que estés lista, no hay presión".

"¿En serio?".

"Si, ven que te prepararé un té".

Entramos a la cocina, ella preparó té para ambas, nos sentamos y hablamos de todo un poco, me contó de Bob su profesor del colegio que había intentado besarla y que cuando se vino a disculpar con ella terminó en la cama de su madre, le pregunté por su padre biológico y solo respondió "De ese imbécil no vale la pena hablar" Para luego cambiar de tema.

Luego nos acostamos en el sofá para ver la televisión o si encontrábamos alguna película, al cabo de un rato Akko rompió el silencio.

"Tengo algo de sueño, vamos a la cama".

"Vale".

"Solo a dormir Diana" Me guiñó un ojo.

Entramos y recordé cuando desperté entre sus brazos, me sentía tan segura en su pecho, dormir con ella se sentía bien, pero tuve pánico ese día y salí corriendo aquella mañana, sentí miedo de lo que Akko estaba despertando en mí, era algo que había decidido hacer de un lado, esos sentimientos que me daban tanto miedo.

Ahora sé que luché contra la corriente mucho tiempo, no puedo seguir siendo la Diana que todos esperan que sea, la que hace feliz a los demás, debo ser yo misma, ser feliz antes de que sea demasiado tarde.

"Toma una camisa y un short para dormir" Akko me sacó de mis pensamientos, tenía entre sus manos algo de ropa para que me cambiara para dormir, apenas habíamos encendido una lámpara en su cuarto por lo que estábamos medio a oscuras, pero esos ojos que quise desde el primer momento que los vi me miraban con tanta confianza, era como saltar de un avión y saber que ella era mi paracaídas.

Me sentí lista en ese momento, tomé la ropa, la puse en algo que había a mi lado, puse mis manos en su cadera y la traje hacia mí, ella me miró sorprendida pero tenía esa sonrisa en su rostro que me decía que todo iba a estar bien.

Empecé a besarla, al principio el beso era tierno sentí sus dedos en mi cuello así que pasé mi lengua por sus labio quería el acceso y ella me lo concedió, nuestro beso era cada vez más lleno de deseo, la falta de aire nos hizo separarnos y aproveché para tomar la parte inferior de su camisa y quitarla "¿Estás segura? No hay presión" Respondí a su pregunta con un beso.

The Cure |Diakko| [AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora