Capítulo 14: la manada

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Bueno, sabía que era demasiado bueno para ser verdad. El CDC estaba preparado para explotar. Apenas lo logramos. Jackie no lo logró en absoluto. Al menos en toda la lucha, nadie cuestionará los suministros adicionales.

Salté al camión con Daryl. Merle y Sirius van en bicicleta por delante. Los demás se amontonan donde pueden.

No llegamos lejos. Primero fuimos a una casa de retiro llena de sangre y cuerpos. Rick dijo que estaban aquí el otro día. Dijo que había un grupo aquí, protegiendo a los ancianos que quedaron atrás. Alguien entró y los borró a todos.

Entonces se decidió que nos arriesgaríamos a ir a algún campamento del Ejército más lejos. El que Shane quería que fuéramos en primer lugar. El RV se averió, pero Merle pudo ponerlo en marcha.  

Pasamos unos minutos recolectando suministros de los autos cercanos mientras él esperaba una manguera por la que Shane y el perro T corrieron. Dos de los coches tenían comida. Otro tenía un rifle de caza y media caja de munición. Varios tenían ropa que hurgamos.  

También pude encoger un par de camiones grandes. No reconocí el logo, pero Sirius estuvo de acuerdo en que deberíamos llevarlos. Los puse en el paquete de dinosaurios de Thorins para que, si los encontramos, podamos hacerlos pasar por juguetes.

A Thorin todavía no le gusta Sirius. Todavía oculta su rostro y ruega que lo levanten cuando Sirius se acerque. Le guardo la mochila con la correa con el otro extremo atado a mi cinturón. Mantenerlo cerca parece ayudar a algunos. También ayuda que Sirius se mantenga distante, haciendo todo lo posible para no asustar al chico.

Merle no está feliz de haber perdonado a Sirius. No ha dicho tanto, pero puedo decir que no le gusta. A Sirius tampoco le agrada mucho. Afortunadamente, ninguno ha provocado una escena porque no estoy seguro de cómo los calmaría.

Volvemos a la carretera lo suficientemente rápido. De nuevo viajo con Daryl, quien no comenta ni hace preguntas. Thorin se acomoda tranquilamente en el asiento entre nosotros, jugando con los juguetes de su auto.  

Parece que Daryl le agrada bastante. Varias veces le tiende un juguete para que Daryl lo inspeccione. Daryl lo tomará, lo revisará críticamente y luego se lo devolverá mientras le dice que es bueno. A Thorin le gusta cuando hace eso y se convierte en un juego entre ellos. Daryl incluso le sonríe a Thorin, lo que hace que el chico le devuelva la sonrisa feliz.

La próxima vez que paramos no es la RV. El camino está bloqueado por millas, atascado con autos. No ayuda que la RV haya entrado tanto en el lío antes de que finalmente nos detuviéramos.

Algunos argumentan que deben mover vehículos y seguir recto. Otros quieren volver. De cualquier manera, el RV está bloqueado por el momento.  

Salgo de la camioneta, llevándome una bolsa de repuesto. Thorin lo sigue, manteniendo la correa entre nosotros floja mientras se mantiene cerca. Empezamos a buscar basura. Otros se unen rápidamente a nosotros para buscar los suministros que podamos.

Dale murmura algo. Se transmiten palabras de advertencia. Merle me agarra del brazo y me coloca debajo de una gran camioneta gris que está a mitad de camino cuesta abajo. La hierba pica pero estamos bien escondidos. Merle mantiene su arma afuera, viendo como los gemidos se hacen más fuertes.

El sonido es enorme. Debe haber un centenar pasando por delante de nosotros. Thorin tiembla contra mi pecho mientras lo mantengo abrazado entre Merle y yo. No dejaré que se lastime.

Dura varios minutos. Cada segundo se prolonga por una eternidad mientras el miedo nos sufre a todos. Eventualmente se van, la manada finalmente lo suficientemente lejos como para que podamos salir de nuestro escondite.

Carol está llorando, llamando a Sophia. Otros la hacen callar, temerosos de que la manada la escuche y se vuelva atrás. Lori y Amy la llevan a la casa rodante donde al menos sus gritos serán ahogados.

Parece que Sophia se escapó al bosque con caminantes siguiéndola. Rick la persiguió, atrapándola rápidamente pero incapaz de volverse. Todo lo que podemos hacer es esperar.

T perro está herido. Su brazo se abrió en la puerta de un coche. Corro de regreso a mi mochila, Thorin en mi cadera. Saco un botiquín de primeros auxilios, lo cambio de tamaño rápidamente y se lo paso a Merle que me había seguido.

Me lanza una mirada de sorpresa. Me preocupa por un momento que haya visto mi magia. Pero solo toma el equipo y corre de regreso a la casa rodante donde Daryl está ayudando a T dog a sentarse en el sofá.

Sirius aparece sugiriendo: "Encuentra antibióticos y analgésicos si los tienes. Debería haber algunos en tu paquete de cuando llegamos a esas farmacias".

Thorin sostiene mi mochila abierta mientras busco más profundamente una de mis maletas. Luego, un hechizo de invocación saca una mochila encogida. Lo reviso y saco rápidamente dos botellas de analgésicos. Los antibióticos tardan un poco más en encontrarlos, pero saco cinco botellas.

Thorin me ayuda a poner mis cosas en mi mochila. Luego llevamos las botellas al RV, todas con los nombres de varias personas. Amy casi llora cuando los ve.

Ella estaba en la escuela para ser enfermera. O se iba, no estoy seguro. Pero su madre era enfermera y trabajaba como secretaria del hospital donde trabajaba su madre. Ella confía en que puede ayudarlo, pero antes no teníamos suministros.

Miento diciéndole que la medicina vino de los autos. Les digo que tomé el botiquín de primeros auxilios del CDC aunque miento y les digo que estaba en mi habitación. Nadie lo cuestiona, aunque Merle me envía algunas miradas que no puedo descifrar. 

Rick sale tropezando solo de la línea de árboles. Carol se lamenta y exige que devuelvan a su hija. Rick mira a su alrededor sorprendido, admitiendo que la dejó en el suelo, la dejó y no pudo encontrarla de nuevo.

Merle lo maldice en voz alta por su estupidez. Lori y Shane se hinchan indignados pero él no les hace caso. Daryl se apresura a unirse a Merle, que ya está a la mitad de la colina. Rick pierde el tiempo defendiendo sus acciones ante Carol.

Sirius se acerca. Thorin esconde su rostro en mi cuello pero no se queja. Nunca se queja.

Sirius parece dolido, luego resuelto. Su voz firme cuando me dice: "La traeré de vuelta. Entonces tal vez me odies un poco menos".

Agarro su brazo, tirando de él hacia atrás un paso. Respondo en voz baja para que los demás no escuchen: "Nunca te odié. Te perdono".

Él sonríe, una sonrisa asombrosamente brillante. Un beso apresurado se presiona en mi frente mientras él sale corriendo. Aunque no estoy preocupado. Tiene su varita y varias armas. Estará bien.

Rick parece darse cuenta de que otros han ido a buscar a la niña. Sale corriendo, con la esperanza de redimirse encontrándola primero. Llevo a Thorin de regreso a la camioneta Dixons. Él puede jugar con sus juguetes mientras yo cambio el tamaño de algunas bolsas de suministros. Con todo lo que está sucediendo, dudo que alguien se dé cuenta.

Falling Into BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora