Capítulo 1. Some like to imagine the dark caress of someone else.

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DILLON

· Mierda. De verdad, no sé qué esperaba. Que por los azares del destino la Sra. Blume me obsequiara una A+ o, por lo menos, una B- en la última prueba seria de Historia Universal del semestre.

· ¡Carajo! – Ken soltó en un susurro que esperaba solo hubiera oído yo, la Sra. Blume tenía una cero tolerancia para las groserías en clase.

Por la apariencia de mi amigo era tan claro que también había reprobado. Observé mi D- rodeada de un círculo rojo que me recordaba a la marca que dejaba una yerra sobre las pobres vacas. Era la peor calificación que había tenido en mi vida, sobretodo en este curso. Solía defenderme con un a B- eterna, sin embargo, ahora las cosas habían cambiado. Debido a la continua falta de interés de parte de los distintos equipos deportivos en su clase, la maestra había hecho la prueba incluso más difícil utilizando desde el gobierno de la Dinastía Tang sobre el Imperio chino hasta diversos eventos de la Primera Guerra Mundial. Era una combinación hecha en el infierno, tan compleja que al ver la prueba por primera vez terminé mareado. Nunca había sido bueno para recordar fechas históricas y solía confundir dinastías y batallas con mucha facilidad, aunque la Sra. Blume solía decirme que no era tonto sino realmente perezoso. Todos éramos unos perezosos sobre todo desde que el entrenador Calhoun nos había dado un pase libre por todo el mes para que pudiéramos faltar a clase e inclusive llegar tarde por motivos de los distintos deportes en los que nos desempeñábamos. Para Kenneth era el futbol y para mí el béisbol, ahora lo que nos hacía destacar terminaría por hundirnos en una materia esencial para aplicar a becas en universidades el próximo año, ¡era un maldito curso básico!

· ...como saben, se acerca el gran proyecto de biografías de gobernantes, - se paseaba de un lado al otro chocando sus tacones con el piso como si de un gigante se tratara. – y ya que algunos... o debería decir, la gran mayoría de nuestros radiantes deportistas tanto chicos como chicas decidieron que no les importaba la Historia Universal, la directora y el entrenador Calhoun quieren premiarlos. – Blume se veía histérica. Entendía su punto, su única satisfacción sería enseñarnos una lección mediante una gran F para todos los que justamente fallaron en su materia, y ahora los poderosos le quitaban ese premio que se había ganado a pulso. – Tendrán tutores para que no vuelvan a arruinar sus futuros con mi simple materia, fabuloso, ¿no?

· Sra. Blume. – Lotte la llamó levantando la mano como una maldita princesa, sin darse cuenta o dándose cuenta del efecto que tenía el simple movimiento de su cabello dorado al estirarse sobre todos los chicos y algunas chicas en el salón de clase. - ¿No es eso terriblemente injusto? Supongo que el resto tendremos que hacer el proyecto solos y sin ayuda.

· Exactamente, Srta. Reynard, tiene mucha razón. – Blume seguía caminando y apuntó a Lottie sin mirarla por más de dos segundos. – Sin embargo, el mundo funciona así, sin justicia, al menos eso es lo que aplica para nosotros los mortales. – exhaló dramáticamente. – En fin, como ya mencioné, todo aquel que haya obtenido una calificación inferior a C tendrá un tutor asignado por su servidora para que los asesoren en el proyecto y aprueben el semestre. – se veía verdaderamente cansada, no me sorprendería que simplemente arrojara el papel que sostenía en su mano y huyera del lugar gritando por su libertad. Siempre la conocimos como una de las maestras más interesadas en que los alumnos de verdad aprendieran pero ni su dedicación podía contra nuestra desvergonzada falta de interés.

Era realmente triste y preocupante para todos nosotros. Nunca obtuve una calificación así desde que entré en LHS, sin embargo, había decidido enfocarme en el béisbol y ganar un par de juegos para quitar mi mente de temas peligrosos como lo hermosa que se veía Lotte, o que no podía quitarme a Elle de encima cada vez que decidía cometer el error de visitar a Ken en su casa. Si todavía mantuviera mi relación con Lotte, le pediría que me ayudara y habríamos estudiado juntos para esta prueba, incluso podía haber contratado a Crys como profesora particular. Supongo que todavía me quedaba algo de inconveniente orgullo, ni siquiera podía culparla de nada, ya todo estaba en el pasado. Lotte había seguido adelante y yo también, ¡hasta estaba teniendo sexo de nuevo! Aunque no podía evitar sentir como si dos bestias vivieran dentro de mí y no dejaran de querer destruir a la otra, una quería amar a Lottie y todo el dolor que representaba, mientras que la otra solo deseaba salir a divertirse con todas las chicas lindas que pudiera encontrar. La verdad era que era un maldito cobarde como para pedirle ayuda; por otro lado, la situación con Crys todavía era tensa e incómoda, el haber sido engañados a la par no nos volvía mejores amigos de forma instantánea. Después de todo, Ken seguía siendo mi mejor amigo y ella todavía lo resentía (con todo el derecho del mundo), lo evitaba y ni le dirigía la palabra (como quizá yo también debería).

ENSNARING the JumpoffDonde viven las historias. Descúbrelo ahora