¿No te puedes juntar con humanos?(1)

Capítulo 15: Dos historias

El día siguiente Alex se despierta con los gritos de sus padres en la planta baja, como él no quiere que Zack se sienta peor pone música para silenciarlos. Ellos pelean y gritan por lo que parece una eternidad, incluso se escuchan platos romperse.

Zack se despierta y por unos segundos, por unos gloriosos segundos aún no recuerda lo que sucedió ayer. Luego la realidad lo golpea como un camión y la tristeza regresa en seguida, su hermano no pierde tiempo y lo abraza para consolarlo. Cuando Zack ya está más tranquilo ellos bajan a enfrentar a sus padres. Marta los mira con tristeza porque lamenta lo que está por suceder, mientras que John mira a Alex con decepción y a Zack con asco. Zack se prepara para lo que viene, no dejará que las palabras de su padre lo quiebren.

—Los regañaría por procrear con humanos, pero es mi culpa por permitirlos ir a ese colegio suyo. —dice el padre con un tono de superioridad —No se preocupen con su madre pensamos en una solución: los enviaremos a una institución responsable que los corregirá.

Zack solo voltea a ver a su madre en busca de apoyo, ella esquiva su mirada tiene tanta vergüenza que no lo puede ver a la cara. El padre continúa hablando.

—A partir de hoy las cosas cambiarán, no volverán a ver o hablar con ese ni ningún otro humano, si descubro que me desobedecen no solo les quitare sus poderes y los desheredare sino también juro que matare a ese sucio engendro que intento destruir a mi familia. —Dice John sin ninguna emoción en los ojos lo que significa que es enserio.

Los chicos solo tragan y asienten con temor, nunca le habían temido tanto a su padre. Ellos saben que él es un hombre serio y no muy cariñoso, pero siempre encontró otras formas de mostrarles su amor, aunque no estuviese presente. Sin embargo, ahora no lo reconocen parece un extraño quien los está amenazando. Habían escuchado historias de lo poderoso que es su padre y sobre las cosas que ha hecho con su poder de control mental, y si hay más de un rumor de asesinato, a pesar de eso verlo de primera mano es diferente y más aterrador de lo que se imaginaron.

—Algo más denme sus celulares, ya no los necesitaran. —dice con una sonrisa malvada y estirando la mano.

Zack comienza a buscar el suyo y se lo entrega lentamente, al parecer demasiado lento para la paciencia de John porque lo arrebata de su mano. Alex lo entrega rápidamente con un poco de temor.

Los chicos suben rápidamente y se encierran en el cuarto de Alex. Su madre les va a dejar el desayuno, ellos lo toman, pero les ofende muchísimo. Se pasan el resto del día encerrados ahí viendo televisión porque es lo único que no les quitaron, se sienten prisioneros en su propia casa y con un temor de que en cualquier momento su padre explotara de nuevo. Intentan jugar cartas y otros juegos que encuentran, ninguno funciona por más que lo intenten no pueden dejar de pensar en la amenaza de su padre. La solo idea de que Joey muera le rompe el corazón a Zack, él tiene que hacer algo para proteger al rubio de su padre. 

Zack se la paso muy distraído, parecía que no estaba presente. Alex intento darle su espacio y no presionarlo. El pobre solo podía pensar en su rubio, en lo mucho que lo extrañaba, en cuanto lo necesita en este momento y en como él debe de estar preocupado. Cada vez que escuchaban los pasos de su padre a ellos se les erizaban los pelos de la nuca, afortunadamente nunca entró a la habitación. En la noche Zack volvió a dormir con su hermano porque de verdad lo necesita en este momento.

El lunes por la mañana los chicos se despiertan tarde porque al no tener sus teléfonos no tienen alarmas. Por su suerte no necesitaron madrugar porque su padre tenía otros planes, no irán al colegio de hecho no volvieron a ir jamás. John irá a hablar con el director para arreglar el traslado y para "seguridad de los chicos" hizo un hechizo de confinamiento alrededor de la casa. No solo los chicos se encierran ellos solos en la habitación sino ahora están realmente atrapados en su propia casa, la cual cada vez parece más una cárcel.