Capítulo 2: Memorias de la Guerra Santa

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Narra King

Diane y yo estábamos conversando sobre una de las ramas del Árbol Sagrado del Bosque del Rey Hada

Diane: me pregunto que estarán haciendo los que se quedaron en Liones - dijo ella mirando al horizonte

King: dicen que desde que Meliodas fue derrotado, la raza demoniaca anda con libertad en Britannia - dije también viendo el horizonte - es muy probable que también hallan atacado Liones o vallan a hacerlo

Diane: Meliodas... era una buena persona - dijo cabizbaja - la manera en que lo mataron... fue horrible

King: al final... yo nunca... - decía con seriedad mientras buscaba las palabras correctas - era muy complicado para mí y no quise entenderlo - y recordé todas las veces en que ____ me trataba de hacer comprender eso que ahora entiendo - me hubiera gustado que sobreviviera - y ahora lo que recordaba eran las lágrimas de mi amiga después de la muerte de Meliodas

Diane: a mi también - dijo secando sus lagrimas

King: hablando de Meliodas y Liones - dije para tratar de cambiar un poco la conversación - ____ no ha vuelto desde hace casi una semana - y solté un suspiro - espero que se encuentre bien

Diane: lo último que supimos de ella fue que se dirigía a Liones ¿verdad? - me dijo con curiosidad

King: así es - dije con melancolía

Diane: oye, King - dijo llamando mi atención - ¿cómo es posible que el Bosque del Rey Hada no pueda ser atacado por los demonios?

King: este enorme bosque está rodeado por una barrera invisible - le explique a ella - es como un filtro que decide quien entra y quien no

Diane: Matrona agradece de corazón que la dejaras entrar con Zalpa y su familia - dijo agradecida

King: pero hay algo que me preocupa - dije confundiéndola - no se si la Raza Demoniaca este cerca, pero no sería extraño que el Rey Hada y el Rey de los Gigantes estuvieran por aqui

Diane: ¿te refieras a Gloxinia y Drole? - y yo asentí mientras la veía a los ojos

King: aunque desde el día en que Meliodas fue asesinado, no han hecho ningún movimiento - dije pensativo - no creo que sea bueno, es extraño

Diane: ahora tenemos que estar bastante alerta - dijo con seriedad - en nuestra situación no tendríamos la capacidad para vencerlos

[...]

Narra la Escritora

Sol y Della estaban jugando alegremente con Oslo a las atrapadas corriendo entre los arboles

Sol: ya basta, Oslo - dijo el pequeño niño ya que el sabueso lo había atrapado y lo comenzó a lamer

Della: no puedo creer que nos atrapara a los dos - dijo viendo como su hermano se iba a sentar con ella al tronco de un árbol

Sol: si - dijo soltando un suspiro - solo falta ella - dijo viendo como el perro estaba viendo a su alrededor, como si buscara algo

Della: vamos Oslo, tú puedes - dijo la niña animando a su amigo; y Oslo comenzó a olfatear el piso y fue guiado a quien estaba escondida atrás de la raíz de un árbol

____: me encontraste - dijo sonriente - pero no me atraparas - y ella comenzó a volar hacia lo alto del árbol - creo que lo perdí - dijo sobre la rama de un árbol mientras veía hacia abajo - despejado - y ella se dio la media vuelta para encontrar a Oslo saliendo de uno de sus portales y lanzándose encima de ella - Oslo - dijo divertida mientras el perro le lamia la cara - está bien, está bien - dijo levantándose y limpiándose la cara - tu ganas - y el sabueso ladro mientras agitaba su cola con alegría, después creo un portal para poder volver al suelo y ella lo siguió

La hija de Meliodas (TN x King) Temporada 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora