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— ¿Entonces aceptas?-Anne no había conseguido trabajo, pero ¿Niñera?, jamás había cuidado niños, no tenía hermanos menores, ¿Cómo se suponía que debía de hacerlo?

— Está bien-por lo menos debía de intentarlo, no perdía nada, además solo sería por una noche.

— Bueno, te espero en el trabajo-Anne cortó la llamada. Tendría que buscar información acerca del cuidado de niños.

[...]

— Princesa, esta noche saldré, pero vendrá una nueva niñera-Padre e hija iban en el auto.

— Yo no quiero otra niñera-Hannah se cruzó de brazos. Odiaba ser cuidada por otras personas que no fueran su padre, ni siquiera le gustaba quedarse en casa de la abuela.

— Vamos mi niña, solo serán unas horas.

— No.-Christopher rió.

— Bueno, creo que tendré que dar vuelta y ya no iremos por dulces-Christopher sabía cuál era la forma de convencerla. Debía de dar en el punto para que la pequeña siempre terminaría accediendo.

— ¡No!-gritó Hannah. De nuevo Christopher rió.-Está bien, pero vamos por dulces-Y así fue como ambos terminaban en una dulcería.

[...]

La noche había caído más rápido de lo que Anne quería que pasara, pero ahora ya era momento de irse a su nuevo trabajo. Había estado leyendo por internet algunas formas de poder entretener a un niño, jamás había tenido hermanos y mucho menos cuidado algún pequeño, así que ahora solo esperaba cumplir con las expectativas que tuvieran los padres de la pequeña, que era lo único que sabía acerca de a quien cuidaría esa noche.

Cuando llegó a la casa se dió cuenta de que se trataba de gente con dinero, al menos debería asegurarse de hacer bien su trabajo. Tal vez en alguna de esas la volvían a contratar, lo que significaba ganar un buen dinero.

Suspiró unas tres veces y se convenció de qué todo saldría bien. El timbre sonó y supo que ya no había vuelta atrás.

Cuando la puerta fue abierta una señora mayor le sonrió, lo que hizo que los nervios de Anne desaparecieran.

— Seguramente tu eres la nueva niñera, ¿Cierto?-preguntó la mujer. Anne asintió—Bueno pasa, en un momento baja el señor Vélez-Anne se quedó esperando cerca de las escaleras.

Observó como en la pared habían unas fotografías. En ellas aparecía una pequeña niña y justo al lado de ella había un chico, tal vez unos tres años más grande que ella. Pudo deducir que era su hermano mayor de la pequeña.

—Hola-Anne dió un pequeño salto por el susto. El chico que estaba en las fotografías venía bajando las escaleras, al verlo lo clasificó como un tipo muy engreído y mujeriego, ahora entendía porque necesitaban una niñera, los padres trabajaban y el hermano mayor salía a conquistar chicas.

— Hola-saludó Anne.

— Soy Christopher Vélez, tú debes ser Anne ¿No?, Sharon me habló de ti-Anne se quedó helada, ¿Ese chico era el padre?, aunque hoy en día es común los padres jóvenes, no creía que se toparía con uno.

— ¿Tú eres el padre?-Anne no sabía ni siquiera porqué lo había dicho. Christopher sonrió de lado y asintió—Lo siento, yo no quería sonar tan así-se disculpó inmediatamente.

— No te preocupes, y sí, soy su padre. Hannah está arriba en el baño, cuando salga deberá cenar y después ir a la cama, que no se duerma después de las diez-Anne solo asintió. Christopher se despidió y salió de la casa.

— Bueno, que comience la acción-dijo Anne para después subir por las escaleras.

𝙱𝚞𝚜𝚌𝚊𝚗𝚍𝚘 𝚊 𝙼𝚊𝚖𝚊 #Bam1 [𝐂𝐡𝐫𝐢𝐬𝐭𝐨𝐩𝐡𝐞𝐫 𝐲 𝐭𝐮]✓ AD Donde viven las historias. Descúbrelo ahora