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-"De verdad quieres hacer esto?" Akagi te pregunto mientras arreglaba un poco tu vestimenta

-"Quiero experimentar como son los humanos por mi cuenta" comentaste

Una vez ya estaba lista te levantaste de tu lugar haciendo una pequeña reverencia a manera de agradecimiento a Akagi por confeccionar algo para tu visita a la aldea.

No todos sabían con respecto a tu pequeño viaje, Osamu, Atsumu y Ginjima no podrian saber, no te permitirían irte, Omimi si se entera te seguiría para cuidarte, y si lo hiciera Suna te vigilaría desde la lejanía.

El camino no era demasiado largo, pero tampoco corto, el templo que se encuentra entre tanto bosque está bien oculto en el mismo, para que no cualquiera pueda entrar y perturbar su paz.

Luego de unos minutos de caminata, aproximadamente unos 15, ya empezabas a escuchar algunas voces a la lejanía, sobre todo de niños riendo y jugando.

Antes de llegar a la entrada dos pequeños chocaron contra ti, sujetaste a uno evitando que este caiga.

-"Estas bien?" le preguntaste ayudándolo a levantarse

-"Woah..." el otro se te quedó mirando asombrado

-"Niña del bosque! Es la niña del bosque que habló onee-san!" dijo otro que estaba allí

Cuatro niños de al menos 5 y 6 años te rodearon mirándote con asombro.

Mantuviste tu postura serena y les diste una pequeña sonrisa.

-"Debe ser una deidad! Es muy bonita!"

-"Quizás venga a asegurarse que todo este en orden!"

-"Se va a quedar aquí?"

Veías como charlaban entre ellos sobre ti, incluso estando tu parada en frente de ellos, soltaste una pequeña risilla.

-"No soy una deidad, no me quedaré por mucho, gracias por sus cumplidos, y me gustaría ver un poco de la aldea, antes del anochecer me marcharé"

Pareciera que no escucharon la mitad de las cosas que les dijiste, porque te siguieron mirando con asombro como si estuviesen parados frente a una deidad.

Uno de ellos tomó tu mano y te empezó a jalar a una de las casas.

-"Puedes ayudar a mi mamá? Está esperando a mi hermanita! Y está muy enferma! Necesitamos que la ayuden!"

Lo miraste ladeando un poco la cabeza mientras lo seguías.

La aldea se veía muy alegre y llena de vida, la protección de un Kitsune se aplica al lugar, no a cada una de las personas que viven en ese lugar, no por vagancia, no por crueldad, sino porque no se puede detener lo que es natural en una persona solo por capricho.

Cuando llegaron al pequeño hogar y el niño te llevó con la mujer que estaba recostada, con una mueca de dolor increíble, mientras sujetaba su vientre.

-"Mamá, mamá, traje a alguien que te puede ayudar" dijo el niño colocando sus manos en el rostro de su madre, parecía ser ciega

La miraste por un momento y no tardaste mucho más de un minuto en darte cuenta que era lo que estaba mal con ella. Tenía una muy mala infección en la región abdominal, eso podía ser muy peligroso si seguía en ese estado con su embarazo.

-"Cuantos meses tiene?"

-"Eh?"

-"Tu madre, hace cuantos meses está con el bebé?"

-"7 meses y 3 semanas..." respondió la mujer con cansancio

-"7 meses y 3 semanas..." repetiste y miraste al niño "Necesito que te vayas si? Voy a ayudar a tu mami y a tu hermanita"

Come back - Lectora x Gemelos Miya (Kitsune AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora