Peonía De Invierno

Capítulo 1

Un pequeño niño aún con su pijama puesta corría por los pasillos de la gran casa, con una dulce sonrisa adornado sus regordetas mejillas, su azabache pelo estaba completamente revuelto con emoción se dirije a la habitación de su madre, como todas las mañanas iba a despertarlo llenando de besos sus mejillas.

Aún no salía el sol por las ventanas se miraba el cielo oscuro, faltaba unas cuantas horas para el amanecer aún así el pequeño niño de una belleza de un Ángel, llega dando unos cuantos saltitos a la habitación, con dificultad sus manitas abren la puerta soltado risitas infantiles acorde a su edad corre hacía la cama donde entre las sabanas se encontraba escondido su madre.

El pequeño niño apoya su pecho en la esquina de la cama y se impulsa con las puntas de sus dedos, sujetando con fuerza las sábanas hasta subir todo su cuerpo moviéndose con rapidez hacia el centro de la cama soltando un buenos días mamá el pequeño con sus manitas descubre el rostro de su madre dando cientos de besitos. La persona que estaba aún dormido con una sonrisa abre sus ojos claros tomando entre sus brazos a su pequeño hijo y llenándolo de muchos besos.

— Mamá ya!! n.no más cosquillas -la infantil voz del niño pedía mientras reia por las cosquillas en su pancita_

—Quien fue un niño malo y despertó a su madre de su dulce sueño_

El niño rie moviendo sus manitas en un intento de protegerse, tanto madre e hijo llevaban el mismo modelo de pijama de figuras de legos, los negros mechones de pelo cubrían el angelical rostro del pequeño.

— Yo no soy malo -se queja riendo- Solo amo despertarte mamá!!_

Un joven de castaño pelo, entre sus veinticuatro años de una piel tan nivea como la nieve poseedor de unos claros ojos como la miel, de facciones delicadas angelicales  poseedor de unos delgados labios de un color durazno.
En su rostro deslumbró una hermosa sonrisa al tomar entre sus brazos a su hijo, su mayor tesoro y la razón del porqué seguía esforzándose en esa sociedad llena de desigualdad.

— Mi BaoBao nunca me podré  enojarme contigo mi campeón -deposita varios besos en la mejilla de su pequeño escuchando su risita_

— Mamá tu eres mi sol y yo s..siempre seré tu luna_

— Mi niño hermoso siempre seras la luz de mi vida -para Yibo era una verdad innegable cada vez que miraba a su hijo miraba más de aquella persona que un lloraba por el_

Wang Yibo junto a su pequeño hijo aún en brazos se levanta de la comada cama, para dar inicio a su rutina diaria se dijiren al cuarto del baño donde tomaron un baño con agua caliente, le cepillo los dientes a su hijo para hacerlo después el. Tras salir y vestirlo con el uniforme de la escuela y llenarlo de besos ambos salen listos rumbo a la cocina para preparar un rico desayuno.

El pequeño Wang FanXing era un hermoso niño de cuatro años, sumamente inteligente a su corta edad podía hablar a la perfección y tenía un alto aprendizaje los profesores le habían dicho a Yibo que su pequeño era un genio prodigio, al ser tan inteligente el pequeño FanXing corrió rumbo a la sala y prendió la televisión para mirar sus caricatura favorita mientras esperaba el desayuno.

Las voces algo chistosas de unos animales inundó la acogedora casa, desde la cocina Yibo se mantenían vigilando a su hijo mientras preparaba unos ricos Hot Cakes y picada fruta, en un sartén tenía unos huevos para hacer un homelett y unas salchichas en forma de pulpo, preparo el desayuno para el y su hijo como también su almuerzo favorito.