Feliz Navidad

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Era una noche brillante, las estrellas iluminaban el manto nocturno acompañando ala luna, y en una mansión en los territorios de Lukadonia había una familia, la familia del noblesse.

Una pequeña niña de rizos negros caminaba alado de su madre, un hombre alto de cabellos lacios y negros, vestía un traje de saco negro, y siguiendo al par de nobles un pequeño gato negro de ojos heterocromáticos. El par caminó por el pasillo de la gran mansión hasta llegar a un salón. En el cual había un gran y bonito pino de navidad con obsequios a su alrededor, la niña con una gran sonrisa corrió hacia los brazos de un hombre de cabellos rizados y rubios, el cual la recibió cargándola, - hola princesa - dijo el rubio con una sonrisa brillante, - hola papá - dijo la niña feliz.

Unos minutos después de que ambos pelinegros llegaran las puertas de madera se abrieron de par en par, dejando ver a un trío de humanos modificados, - hola jefe - saludo Tao seguido de Takeo y un tímido M-21, - es un placer volver a verlos - dijo con una pequeña sonrisa el noble. La pequeña mestiza baja apresurada de los brazos de su padre para salir corriendo a los brazos de su "hermano mayor Tao", el cual la recibió con su típica risa, - hola Raisa- saludaron sonrientes el trío, claro que unos más que otros.

Los chicos y la niña se sentaron en la sala bajo el gran pino de navidad mientras eran acompañados por Tao, el gatito de color negro con una parte de su pelaje blanco simulando un mechón como el de Tao humano. Pasaron un par de horas pasaron entre pláticas y juegos de parte del trío de humanos y la mestiza, cuando la puerta fue tocada de forma educada y lo suficiente fuerte para ser escuchada, - deben ser los líderes de clan y la lord - dijo Frankenstein levantándose y caminando con tranquilidad ala entrada.

Al abrir la puerta se encontró con Raskreia y los líderes de clan, - venimos por la invitación que mando Raizel, decía algo sobre navidad - dijo con suma seriedad la noble, a decir verdad a los humanos modificados y Frankenstein les causaba risa como se tomaban con toda la  seriedad del mundo cosas que para ellos como humanos se hacen cada año, - si, así es, pasen -ínsito el rubio.

Todos pasaron calmada, - es un gusto volver a verte Frankenstein - saludo en la entrada Seira con una pequeña sonrisa. Todos pasaron al salón en donde estaban los humanos modificados y la pequeña Raisa la cual al verla dejo de sonreír y se levantó del suelo con elegancia, limpio con sus pequeñas manos la falda de su hermoso vestido blanco con falda negra, miro con la frente en alto y rostro inexpresivo ala gobernante de Lukadonia, - bienvenidos, aprecio su asistencia- saludo la niña, la lord miro al actual noblesse con algo de soberbia.

El antiguo líder del clan Landegre sintió que veía a Frankenstein cuando fue por primera vez a ver al lord anterior, de no ser por el color de cabello y el ojo derecho de la niña podría pasar por solo la hija de Frankenstein. Raisa había heredado la personalidad de su padre, siendo algo altanera, pero sin ser mal educada, inteligente como su padre y curiosa como su madre, posee heterocromía delatando que es una mestiza, su ojo derecho es rojo sangre como los de cualquier noble de sangre pura y su ojo izquierdo es de un azul tan puro y claro como el cielo como los de su padre, su cabello era negro y rizado, tenía en su boca unos colmillos que sobresalían ligeramente como los nobles.

Raskreia sabía desde el momento en que vio a esa niña por primera vez, es decir en esa cena, sabía que sería algo problemática igual que aquel hombre que la llevo en el vientre, - es un placer ser invitados por ti, Raizel- dijo la lord mientras tomaba asiento en la mesa, al otro extremo, viendo directamente a los ojos a aquel noble que ayudaba a su primogénita a comer de forma materna, Frankenstein fue el que le enseño sobre cuidar ala pequeña, al principio el rubio lo hacía todo, pero él quería ayudarle, así que ahora él es quien cuida más ala pequeña Raisa, la cual tenía 70 años apenas, lo cual es muy poco para un noble.

Frankenstein le sirvió a los líderes de clan y la lord lo que se acostumbra comer en navidad, pavo horneado y puré de papas, si bien no celebraban lo que para los humanos representaba la navidad, Raizel quería usarla como una pequeña parte que se quedó en él después de convivir un tiempo con los humanos y quería mostrársela a sus amigos de Lukadonia. La cena transcurrió tranquila con uno que otro comentario del RK. A mitad de la cena la puerta fue tocada con fuerza, esta vez fue el mismo noblesse que se levantó para abrir la puerta, - hola Raizel, me llego tu invitación y traje regalos- saludo el viejo amigo de pelinegro, el cual solo se limitó a asentir y dejarlo pasar.

Muzaka al haber tenido una hija humana conocía la festividad, así que matándose un poco la cabeza al pensar en que poder regalarle a la familia de su amigo decidió regalarle a su querido amigo una esfera de nieve que muestra ala dama de la libertad, ya que a pesar de haber vivido en corea un tiempo, Raizel volvió a encerrarse e su mansión y él había vuelto a explorar. En el caso de Raisa fue un poco más fácil, ya había tenido una hija, así que tenía una idea de que podía gustarle, consiguió una muñeca de trapo de cabellos negros lacios y largos con un vestido blanco con detalles rojos, la muñeca es suave y bonita. Y para Frankenstein, una roca, para él, era solo una roca que una noche cayo del cielo, era negra y olía raro, nunca había olido algo parecido, y eso lo decía alguien que ha estado en todo el mundo, así que conociendo al científico, estaba seguro de que le interesaría. Dejo los regalos debajo del pino y se sentó con los demás invitados.

La hora de abrir los regalos llego y la niña se acercó al pino, agachándose de forma elegante para tomar la caja que decía su nombre, - ese es de mi parte- dijo el hombre lobo, la niña lo miro y luego la caja, la abrió con tranquilidad, para luego sacar con cuidado ala muñeca de textura suave y apariencia linda, - muchas gracias lord Muzaka - dijo la hibrida mientras abrasaba a su nueva amiga.

 Luego tomo una pequeña caja, miro a su alrededor y esperando que alguien dijera que él había puesto el presente, hasta que vio a su madre elevar su mano con una sonrisa en la cara, una gran sonrisa infantil apareció en el rostro de la pelinegra, abrió el presente, para sacar un pendiente parecido al de su madre, pero más pequeño y con un diamante azul en donde iba el diamante de sangre en el pendiente de su madre, cuando lo coloco en su oreja derecha sintió como el inmenso poder que soportaba su pequeño cuerpo y que solía pesarle se volvía menor y más ligero, se levantó y corrió a los brazos de su madre diciendo gracias y con una gran sonrisa que hacía que se apreciara más sus afilados colmillos.

Frankenstein al ver la roca miro fulminante a muzaka, pero cuando el hombre lobo le explico por qué se lo daba le agradeció y le dijo a Tao que lo pusiera en cuarentena ala roca, solo por precaución a que soltara algún químico raro.

La cena terminó y todos empezaron a irse, se despidieron de la familia, los humanos modificados se fueron a sus habitaciones, ya que desde ese momento se quedarían a vivir en ese lugar. Raizel se acercó a Frankenstein y rodeo su cuello con una bufanda negra con una F de color blanco cocida de forma discreta en una esquina para después darle un beso en los labios y abrasarlo por los hombros, - feliz navidad Franken- dijo el noblesse, el rubio regreso el beso de forma descarada y lujuriosa abrazando de la cintura al noblesse, - feliz navidad maestro- dijo seductor y algo grave al separarse del beso.


Feliz navidad, algo atrasada, pero de eso a nada, les quiero decir que esta parte será mencionada más adelante en la historia, y hay bastante spoiler de la historia, espero lo hayan disfrutado. Y digan en los comentarios que opinan de la pequeña Raisa.

Y como dato extra Raisa y Raizel significan rosas.

Y como dato extra Raisa y Raizel significan rosas

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