En el antigüo Egipto el faraón Katsuki recibe una ofrenda maldita. Un chico que era castigado por Anubis por razones que jamás se conocen,aquel muchacho que ahora debía llevar orejas de chacal tenía una misión: Debía inicialmente aniquilar al primer Faraón que se presentara ante sus ojos, lo cual en su caso,sería un suicidio.