Albus Dumbledore contemplaba los daños que sus errores habían causado; él podría haberlo impedido todo, si hubiese actuado a tiempo. Sin embargo, todavía había una posibilidad de remediar su error, o mejor dicho había una persona que podía ayudarlo en esta situación. Lamentablemente, esa persona, que tenía todo de su lado para detener al causante de este desastre, estaba enamorada de él. La continuación de Harry Grindelwald