No era poco usual que Ramón se escondiera en su búnker una vez llegado el ocaso, pero esa noche era algo especial. La princesa Poppy lo había invitado a participar en la fiesta más escandalosa nunca antes vista, sin embargo, el amargado troll se rehusó a participar. Ramón permanecía sentado sobre su sofá viendo los recortes que Poppy le había hecho... cuando de repente... escucha a alguien tocando su puerta con desesperación. Ramón abre una pequeña compuerta que tenía escondida bajo el tapete de la entrada de su casa, pero cuando ve al Rey Peppy mostrando una profunda desesperación en su rostro, un escalofrío recorrió su espalda... pués sabía que algo muy malo había ocurrido. Esta historia torserá un poco la trama de la película... RECOMIENDO DISCRECIÓN.
8 parts