Momo trabaja en una Sex Shop, su trabajo no le desagradaba del todo, aveces incluso podía terminar encontrando un par de conquistas nocturnas para poder follar con ellas, sin algún tipo de compromiso. Y Tzuyu es una joven universitaria que estaba muy urgida como para entrar a esa tienda de juguetes sexuales. -¿C-cuanto sería...? -Preguntó la Taiwanesa con nerviosismo. Sus mejillas estaban rojas debido a que se sentía muy avergonzada por estar en este lugar, y más por las cosas que había comprado y ahora la hermosa chica que tenía frente a ella le estaba cobrando. Momo miraba detenidamente todo lo que la chica había comprado, nada del otro mundo, un par de lubricantes de sabores, unas velas de feromonas y el acto principal... Un dildo de 25 centímetros, a Momo le fue inevitable llevar su mirada hacía el cuerpo de Tzuyu y recorrerlo de pies a cabeza... ¿Realmente esos 25 centímetros entrarían en ella...? -Serían 200,000 wones. -Dijo la japonesa mientras metía todo en una bolsa. Tzuyu abrió los ojos de par en par ¿Como Diablos todo eso le había costado tanto dinero? Suspiró y sacó su tarjeta para poder pagar. Momo tomó su tarjeta y la pasó por la terminal, le dio el aparato a la castaña para que pusiera su contraseña, cuando el silencio las invadió a ambas, Tzuyu comenzó a incomodarse aún más, quería irse ya... Terminó de colocar los dígitos y espero a que el cobro fuese exitoso. Momo sacó la tarjeta y se la entrego nuevamente, Tzuyu con algo de torpesa la guardo en su bolsa y volvió a mirar a la pelinegra frente a ella, quien ahora le extendía la bolsa con los objetos que había comprado. -Oye... -Habló momo antes de dejar que la chica se fuera. -¿S-si...? -Tzuyu detuvo sus pasos antes de salir y se dio la vuelta para ver nuevamente a la mujer detrás del mostrador. -¿Quieres que estrenemos esos juguetes juntas...? _____ Este libro contendrá lenguaje vulgar y en su mayoría escenas explícitas.