La historia de Iván & Julia

Parte 2: El primer golpe

Los primeros días, Iván no tenía nada en contra de Julia. Pero este era un chico con un temperamento cual bomba de tiempo, y no hacía falta de mucho para que alguien lo explotara. Y poco a poco, Julia fue la causa de sus primeros arrebatos.

El primer golpe había sido suave, Julia lo acusó de haber robado las preguntas del examen de matemáticas, dejándolo sin puente. Por el cual el también venía esperando hace mucho tiempo, y no tenía el humor para perdonarla por habérselo arruinado.

— ¡Pero que yo no he sido, joder! — exclamó Iván a sus amigos cuando estaban todos en la habitación de las chicas — Me da igual lo que diga la zorra esa, me da igual. ¿Vais a creerle a ella antes que a mi?

Silencio. Vikki, Roque y Marcos lo miraron sin pronunciar una sola palabra. Incluso Carolina, su novia, tenía muchas dudas y le costó creerle.

Iván suspiró cuando se dió cuenta de ello. — Esto es acojonante.

Marcos se levantó del escritorio de las chicas y juntó sus manos. — Vamos a ver, tuvo que ser uno de nosotros cinco. Porque el ladrón usó nuestra llave para entrar en el cuarto de Mateo y solo nosotros sabemos que esa llave estaba en la mesilla de noche de Carolina.

Iván bufó dando vueltas de un lado al otro, sin poder dar crédito a lo que oía. Ni siquiera sus propios amigos ni su novia le creían.

Pero Victoria interrumpió en la discusión. — ¿Cómo que estaba?

— Marcos y yo intentamos ir a la habitación de Mateo para abrir la caja fuerte de Alfonso, pero la llave había desparecido — explicó Carolina — Mira, ya no está

Desde la desaparición de Alfonso, un ex profesor de historia del internado que llevaba investigando durante mucho tiempo la desaparición de cinco huérfanos, y tras el asesinato de uno de sus mejores amigos Cayetano, Carolina decidió ponerse a investigar lo sucedido con la ayuda de sus amigos. Al principio sólo eran ella y Marcos pero pronto se unieron el resto. Mateo había tomado el lugar de la habitación de Alfonso desde entonces, y los chicos seguían buscando respuestas. Especialmente si eso los ayudaba a saber qué estaba pasando en El Internado, por qué habían tantas desapariciones y quien asesinó a Cayetano.

Victoria se levantó de la cama para ir hasta la mesilla de noche de Carolina. Pero cuando abrió el cajón y se dió cuenta de que las llaves aún estaban ahí, preguntó — ¿Y esto qué es?

Iván miró las llaves en las manos de Vikki con una sonrisa. Pero el resto de sus amigos fruncían el ceño.

Carolina se inclinó hacia delante — Juro que esa llave no estaba. Alguien la ha vuelto a meter

Todos miraron a Iván

— ¿Quién, yo? — se burló él sin humor — ¿Y por qué no la nueva? — ahora estaba casi gritando, tanto que Carolina suspiró rendida y se echó hacia atrás — O el botafumeiro — Iván señaló a Marcos — ¿Eh?

El castaño bufó con una risa de medio lado.

Carolina negó con la cabeza. — Marcos no fue

— ¿Ah, no? — Ivan tensó la mandíbula — ¿Y por qué estás tan segura?

Carolina intercambio mirada entre Marcos e Iván, incómoda por hablar al principio, pero explicó la situación diciendo — Porque pasé toda la tarde con él

Los ojos de Iván se oscurecieron. — ¿Haciendo qué, si se puede saber? — tiró a su novia.

Pero Marcos lo interrumpió. — Estudiando — le dijo en voz alta — Y ayudándome a averiguar de dónde narices ha salido una foto de una niña que es igual a mi hermana. — dijo, pero los ojos inquietos de Iván no se iban de Carolina, hasta que Marcos siguió hablando — ¿Y tú? ¿Dónde estabas tú?