Hunter Cortaud
Ya estaba en mi casa y mucho más tranquilo que antes.
Estaba en la cocina esperando a que la comida que estaba preparando Nana, ahora que los padres de mi luna saben la verdad tenía ganas de pedirle que fuera mi esposa aunque no se si estaré apresurado las cosas.
—¡Ahhhh! —escuche como el corazón de Nana comenzó a latir muy rápido, seguramente la asusté —lo siento Nana, no quería asustarte —dije, ella dejo lo que estaba haciendo y vino junto a mi.
—Dime mi niño que es lo que te tiene tan agobiado —dijo con su voz dulce que siempre ha tenido, Nana es como otra abuela que nos consentía de niños aunque cuando mi madre le decía que no nos diera algo, por mucho que rogamos no nos daba nada.
—Nana, los padres de Arya ya saben que ella es mi luna, pero no se si sea muy precipitado pedirle matrimonio —y me pase la mano en mi cabello, algunas veces me arrancaba algunos mechones por el estrés que sentía.
—Tranquilo mi niño, ambos son mates, son almas gemelas destinadas por la diosa luna para estar juntas, solo sigue lo que te dice tu corazón —Nana era la mejor de todas, aunque en este momento mi corazón estaba un poco confuso.
—Nana, mi corazón desea casarse con ella, pero también darle su espacio —¡en realidad no se que hacer!
—Hijo todo se dará como la diosa luna lo desee —dijo mi padre entrando a la cocina —. Nana eso huele delicioso —dijo olfateando el aire.
—Padre ¿tu dudaste al pedirle matrimonio a mi madre? —dije, la mayoría de veces me daba curiosidad de saber algunas cosas sobre el pasado de ellos, tal vez pueda ayudarme a saber que hacer en este momento.
—Claro que sí, ¿te conté la vez que tu madre escapó de este lugar? —negué —. Bueno eso fue lo peor que he sentido hasta que paso lo de tu hermano, pero eso es otro tema, ese mismo día supe que no podria estar sin ella y que si se me daba la oportunidad de encontrarla iba a pedirle matrimonio... —se quedo pensando como si recordara ese momento.
—¿Que mas paso? —estaba intrigado con lo que me estaba contando mi padre.
—Paso que descubrí que era mitad demonio, y supe que tendría que enamorarla para que no quisiera irse de mi lado, hijo mío apenas tienes diecisiete años y ella igual, tienen mucho tiempo para casarse, pero primero enamorala, conocela aún más —me quede pensando en sus palabras, pero si yo conozco hasta el más oscuro secreto de Arya, siempre hemos sido amigos.
—Conozco a Arya como la palma de mi mano y ella me conoce de igual forma a mí —dije pensando, creo que ahora quede aun mas confundido que antes.
—Entonces dime cuando quieres ir a comprar el anillo —dijo mi padre con una sonrisa.
—¿Anillo para que? —pregunto mi madre mientras entraba a la cocina tambien olfateando el aire —¿Bianca cuanto falta para la comida? —volvio a preguntar mi madre.
—En solo un segundo Argent —ella asintio y nos volvió a ver esperando una respuesta.
—Amor que nuestro hijo quiere comprar un anillo para Arya —ella abrio los ojos y grito de felicidad mientras me abrazó con más fuerza de la que debería.
—Madre me vas a quebrar la columna y todos los huesos de mi cuerpo —me solto de inmediato y me sonrió apenada.
—Me alegra mucho cariño, aunque estas muy joven para casarte —dijo mientras acariciaba mi mejilla como cuando era niño.
—La quiero conmigo y deseo casarme lo más antes posible —dije y Nana comenzó a decir que fuéramos al comedor para servir la comida.
Estábamos todos ahí cuando a todos nos llegó el aroma de Hayden en la frontera de la manada, salimos corriendo ya que no habíamos sabido de él desde hace bastante.
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Hybrid: Los Gemelos Cortaud [#3: TRILOGÍA ABBADON]
RandomUno de mis hijos aceptara la oscuridad, y solo desea el poder, por eso los hijos de dos de mis descendientes y uno de la oscuridad tendrán que derrotarlo, yo la Diosa Luna bendigo a estos niños, para que cumplan la profecía. Publicado el 24/10/2020 ...