Qué más da [Katsudeku]

• N o c h e

"No suelo caer en tentaciones, pero me estás empujando."

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8

El camino al departamento del cenizo fue breve. Al llegar, bajo de su carro y se dirigió a la parte trasera abriendo su cajuela.

Dejo ver a un peliverde un tanto alterado pero de cierta forma no estaba intentando huir.

— Pues ya estamos aquí — Hablo el cenizo

El pecoso guardó silencio.

— Si tu deseo es salir de aquí puedes hacerlo, pero si no es el caso — Hizo una pausa acercándose al pecoso — Sigueme

Una sonrisa confiada se hizo presente en el  cenizo. A lo que el pecoso rodo sus ojos.

Izuku lo pensó por un momento y mientras divagaba el cenizo ya estaba caminando hacia su edificio.

"Debería irme para que esa confianza que se ve en él se esfume" — pensó el peliverde

— Debo admitir que me gusta su forma de ser — Se dijo así mismo

Salio de esa incómoda cajuela cerrando la para después adentrarse a aquel edificio.

Cuando entro no vio al cenizo pero el ya sabía el piso y número del mismo.

En el interior del elevador presionó el botón del piso que ya conocía, espero un rato a que ascendiera, cuando salió del elevador tampoco vio al cenizo.

Al voltear alcanzó a ver que la puerta del departamento estaba abierta, no dudo en entrar.

Paso el pasillo de la entrada y lo primero que vio fue a un Katsuki sentado frente a él, sin camisa y con una venda roja.

— ¿Que sucede? — Dijo el pecoso — ¿Acaso esto se está volviendo en alguna especie de 50 sombras de Grey? — Río  después de decir eso

— Nunca sabes que cosas pueden gustarte Deku, pero no te preocupes no voy a lastimarte — Hablo el cenizo

— Entonces.... — ¿Que debería hacer? — Pronuncio el pecoso