Capitulo 3.

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Me estiro sobre la cama y miro la espalda de Stefan relajada, me levanto y voy a la cocina por una bolsa de sangre, pero un diario aparece en la barra, me acerco a él y es un diario de Stefan, creí que los había quemado todos, empecé a leer.

<<Valerie fue como un soplo de aire fresco. Me había estado asfixiando y ni siquiera me había dado cuenta>> era la letra de Stefan, mi ceño se frunció. Seguí leyendo, de pronto el diario desapareció de mis manos, sabía que era un truco de los herejes para hacerme enfadar.

-Buenos días- dijo Stefan llegando a mi lado- Caroline tiene mi celular, dejaste el tuyo arriba así que lo estaba buscando, llame del tuyo y contesto la rubia, está bien.

- ¿Quién es Valerie Tulle? - pregunte mirándolo a los ojos, el frunció el ceño- Escribiste sobre ella en 1863, estaba aquí hace tres minutos- el me miro y a velocidad vampírica salió de la casa, suspire. ¿Celosa? Si.

Fui hacia la casa de Agatha, la cual me abrió sonriéndome, corrí hacia Bea y la cargué, empezamos a jugar.

- ¿Por qué no vino Stefan? - me pregunto- ¿Ya te pidió ser su novia?

-Algo así, no se a donde fue- dije simplemente.

-Ya era hora, se estuvo castigando todo ese tiempo que andabas de asesina, aunque bueno, me diste tiempo para enamorarme de esta niña- dijo sonriendo hacia Bea- Aunque es como verme a mí misma hace un poco más de 500 años.

- ¿Cómo vas como vampira de la nueva época? - pregunte sonriendo.

-Bueno, no soy como Katherine- se encogió de hombros- bolsa de sangre, mantengo un perfil bajo, amo Netflix, estar acostada y bueno, no ser perseguida.

-Supongo que eso es bueno- dije asintiéndole.

-Lo es- dijo, tiempo después volví a dejar a mi hija con ella y salí de la casa. En cuanto entre a la casa Lockwood, tuve una visión.

-Se está abriendo- dijo Stefan cayendo al piso. Cerraba los ojos. Una estaca se clavaba junto al lado de la pared a velocidad vampírica metía a Stefan a un lugar más seguro, flechas pasaban a mi lado, volteaba con mi arco y lanzaba otras cuantas flechas, yo iba armada, mis flechas, mi arco y mis dos dagas chinas me acompañaban en una lucha contra alguien que no conocía.

-Juro que la voy a matar- decía molesta.

La visión termino dejándome algo mareada y confundida. Así que decidí marcarle a Bonnie.

- ¿Tú también lo estás viendo, cierto? - me pregunto en cuanto me contesto.

-No entiendo nada de lo que está pasando Bonnie- dije saliendo de la casa hacia la casa Salvatore, estaba dispuesta a sacar a Caroline de ahí.

-Sí, estoy igual- dijo seria- tenemos que saque que es.

-Quien es- dije suspirando- Bueno, realmente hare algo muy loco ahora, así que, si todo sale bien, te marco.

Toqué la puerta Salvatore, me encontré con Enzo que me sonrió curioso.

-Hola, cariño- dijo sonriéndome- en verdad no te esperaba.

-Como sea- di un paso dentro de la casa, la cara de Enzo se vio preocupada, había dos herejes mujeres mirándome- Vengo por Caroline Forbes- dije sonriendo, ellas intentaron acercarse a mí, pero rompí sus cuellos y es que me amaba porque ya no necesitaba chasquear dedos ni nada, solo con mirarlas cayeron- ¿Cuáles son sus nombres?

-Nora y Mary Louise- dijo Enzo mirándome sorprendido, baje hacia el sótano y escuche a dos mujeres hablar, era Caroline y otra mujer.

-Bueno, en realidad, yo no fui una chica más de Stefan, yo fui su primer amor- dijo la otra mujer, supe que era Valerie- Fui su primera vez, apuesto que alguna vez tú fuiste la primera vez de alguien.

-Entiendo, entonces me hechizaste no para que Mary Louise ni Nora pudieran tocarme, lo hiciste para que Stefan no me tocara- dijo Caroline riendo.

- ¿Qué te da tanta risa? - pregunto Valerie molesta.

-Que te equivocaste de mujer, yo no soy nada más que la mejor amiga de Stefan- dijo Caroline riéndose- Ahora probablemente Stefan y Maia ya estén de novios o al menos espero eso.

-La doppelgänger Petrova... la abominación- dijo susurrando la chica.

-Bueno, si hablamos de abominaciones- dijo Caroline haciéndome reír bajito, Valerie siguió hablando de cómo le había roto el corazón.

-El espero por mí, pero luego cayó en cuenta que lo habían abandonado de nuevo- dijo Valerie.

- ¿Cómo pudiste hacerle eso? - Caroline se escuchaba decepcionada.

-Hubo un cambio de planes, yo... yo estaba embarazada de Stefan- dijo Valerie fue todo lo que pude escuchar ya que Salí a velocidad vampírica hacia la puerta.

-Pensé que te llevarías a la rubia- dijo Enzo mirándome.

-Apuesto que se va a ganar su salida ahorita mismo- dije seria.

- ¿Paso algo? - pregunto poniéndose frente a mí. Ignore su pregunta y fui hacia el Grill, pasaron unas cuantas horas para que un Stefan un poco apagado se sentara a mi lado.

- ¿Estas bien? - me pregunto, yo asentí mirando mi vaso- Estas demasiado muy seria.

-El día ha estado lleno de sorpresas, grandes sorpresas llamadas Valerie- dije suspirando, el me mira con culpa.

-Mira, yo era solo un niño cuando la conocí. Solo un niño con problemas de luto por su madre muerta. Era joven y humano- dijo tomando mi mano por arriba de la mesa.

-Yo era joven y humana cuando tú y yo nos conocimos, y recuerdo el momento exacto en que te conocí- dije mirando nuestras manos. - ¿Tu recuerdas la primera vez que me viste? - el hace una mueca.

-Lo siento. Eso fue totalmente injusto. Solo por favor, olvida que lo pregunté. Quiero decir, incluso estabas sentada junto a Elena, así que, por supuesto, solo tenías ojos para ella- dije separando mi mano de la suya.

-Maia, siempre te vi. Ahora las cosas han cambiado. Diferentes circunstancias, diferentes resultados- dijo suspirando, negué con la cabeza.

-Aquí hay una circunstancia diferente: Valerie está fuera del mundo de la prisión. ¿Eso cambia las cosas para ti? - pregunte mirándolo por primera vez.

-Por supuesto que no- me contesta sin pensarlo.

- ¿No te preguntas qué hubiera pasado si Valerie hubiera aparecido para conocerte? - pregunte mirando a la entrada del Grill.

-Ya no me lo pregunto. No me importa el pasado. Todo lo que me importa es que estés aquí. Que estés conmigo- dijo buscando mi mirada. Sentí una presencia en el Grill y miré a mi amiga rubia entrar al local.

- ¿Caroline? - pregunte sonriéndole.

-Enzo me dijo que fuiste por mí, pero luego te fuiste. Estoy molesta por eso- mire rápidamente a Stefan y ella entendió- Lo siento...- Stefan me miro confundido.

- ¿Aun tienes toda esa verbena en tu piel? - pregunte tocándola, pero reafirme- Ven mañana a casa, buscare en el grimorio algo para ayudar- dije levantándome y saliendo del Grill para ir a descansar.

-Entonces, quiero suponer que tú eres Maia- dijo una voz femenina detrás de mí, voltee a ver a la mujer rubia y delgada frente a mí.

-La misma- dije con media sonrisa- ¿Valerie?

-La misma- me imito con una falsa sonrisa, Stefan salió, lo miré y devolví mi mirada al lugar vacío de Valerie.

-Maia- dijo acercándose a mí. 

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WENAS NOSHEEEES, ESPERO QUE LES HAYAN GUSTADO E

Maia Gilbert VII: LonelyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora