Irremplazable

E

Hasta ahora tenemos a un Hinata determinado pero preocupado. Y a un Kageyama aterrado y triste. Sabía que había sido él quien puso los términos de parar con todo. Desde sus encuentros casuales hasta acabar con su amistad después de la explicación que le exigía el pelinaranja.

Pero Kageyama tenía razón. Las acciones de Hinata fueron lo que le indujeron a tomar ese camino. Regresemos un poco para algo de explicación.

El beso fue suave y agresivo a la vez. Abrieron los ojos levemente, buscando curiosos la expresión del otro ante el reciente beso que ya los tenía acalorados. Esto sucedía una semana antes del torneo nacional escolar de primavera. 

Hinata encima de las piernas de Kageyama, quien tenía sus manos en la cintura del menor. Ambos estaban en su límite, pero no podían ir más lejos pues ya habían sido reprendidos por Suga al salir tarde del gimnasio donde se supone estaban practicando hasta el final. Y a nadie le agradaba ver a Suga enfadado. Sin embargo, no pensaban en Suga, ni en la reprimenda a esas estancias. Tobio era consciente de que era difícil para el menor calmarse, además que tenía que ir en bicicleta, colina arriba para llegar hasta su casa. Con eso en cuenta, se esforzó por mantenerse en primera base, pero con Hinata gimiendo entre besos era imposible mantenerse calmo. Así fue como complació al menor, sin dejar de besarlo, tomando el miembro de este con sus manos. Habían tenido suficiente práctica en ese ámbito para saber cómo enloquecerlo así que comenzó lento, presionando con la yema de sus dedos la punta que estaba tan húmeda como sus bocas. 

En el aumento de velocidad, Hinata rompió el beso para gemir a gusto. A Kageyama le encantaba saber que era él quien provocaba esos gemiditos y suspiros. No era la voz de una chica, era la voz de Hinata y era perfecta. Siguió con su labor manual, arrimando parte de su propio miembro por sobre la ropa para que Shoyo lo sintiera. Así después de unos cuantos besos más intentando que el pelinaranja no gimiese tan fuerte, con su mano haciéndole ver lucecitas y con el deseo de sentir apropiadamente la carne baja de Kageyama, fue que el menor de esta pareja sexual se vino. 

Kageyama estaba preparado. Tenía pañuelos desechables al alcance que utilizó para limpiar al menor mientras este se abrazaba al pecho de Kageyama, casi que totalmente exhausto. Kageyama seguía con su problema y Hinata podía sentirlo. Pero cuando intentó hacer algo al respecto, Tobio se negó.

-Sabes que no pararemos pronto, y tienes que volver a casa. Se vuelve peligroso más tarde y no quiero que te pase nada... somos los únicos que podemos hacer el ataque rápido, por eso debes cuidarte Boke-. Decía mientras le pasaba la bolsa de cambio de ropa al su compañero. Hinata se hallaba feliz. Tal vez por que sus recibidas fueron mejor ese día, o porque se descargó con Kageyama. No le daba muchas vueltas al asunto. Solo sabía que era feliz.

Ya con su ropa alistada y limpios, ambos hicieron su recorrido habitual hasta la intersección donde se separaban sus caminos. Se despedían y hasta el día siguiente donde volverían a retarse en una carrera. Era lo normal para ambos. No obstante, se sentía tan distinto para Kageyama.

Había escuchado a sus compañeras de clase hablar sobre una situación donde la chica era de lo más feliz con su novio, quien le complacía desde los caprichos materiales hasta los carnales, y que siempre era atenta con ella y demás cosas que si Kageyama no se hubiera imaginado junto a Hinata, no le hubiera interesado.

Fue el primer día en que se pregunto realmente, qué rayos hacía con Hinata en sus encuentros especiales. Estuvo desconcentrado pensando en ello, tanto que incluso dormido en clases soñó con él. En una cita por el parque con los cerezos florecidos y Hinata con varios pétalos adornando su melena. Se despertó agitado, siendo reprendido por la maestra de inglés.

Quizá debería pensar más seriamente sobre si le gustaba Hinata, pero lo dejaría para luego. En ese momento era hora de descanso y tenía que ir a la práctica con quien acababa de soñar como un ángel. 

(Pensé dedicarle un par de capítulos a lo que pasaba en la mente de Kageyama por mientras, hasta poder hacer el enfrentamiento entre ambos más adelante. Gracias por el apoyo, realmente aprecio que les guste, créditos de la imagen a quien corresponda jeje)