Préstame tu vida

Capítulo 3

Maldita sea la puerta y la persona que este tocando a ella. 

El sonido de la puerta interrumpió mi valioso y preciado momento de saborear la magnífica pizza que había encargado para comer. Mire el reloj y me di cuenta que no había pasado ni siquiera 30m desde que había llegado a mi casa, así que empecé a preguntarme quien podría ser. Lú está en su casa con sus maravillosos padres, así que, a pesar de que esta tarde habíamos quedado, no puede ser ella. James, mi padre, le había surgido una reunión de última hora, así que, él tampoco podía ser debido a que se había marchado prácticamente hace poco para ser una reunión de negocios. Entonces... ¿Quién era? 

Levante mi perezoso trasero sin ganas del sofá para poder asomarme a la mirilla de la puerta; una vez allí al posar mi ojo en ella lo primero que pude observar fue el rostro de Dylan pasando sus dedos sobre su cabello desordenado. Era tan hermoso como estúpido. Al verle plantado frente a mi casa, a pesar de no entender porque debía de estar allí, decidí abrirle la puerta. Me separe de la mirilla con intención de hacerme la dura frente a él, agarré el pomo de la puerta, inspire tanto aire como pude y le abrí la puerta bruscamente.

- ¿Qué haces aquí?- Dije cruzándome de brazos y apoyándome en uno de los umbrales de la puerta. Vi la mirada de Dylan plasmada en mí, esos ojos color miel brillaban con el sol. Porque debía de ser tan sexy?. Viendo que no reaccionaba a mi pregunta empecé a chasquear los dedos frente a él intentando hacerle volver en sí y volví a reincorporarme en la conversación. - Dylan. No tengo todo el día, ¿qué quieres?.

- ¿Pu...pue...puedo pasar? - Pareció volver en si después de 2 minutos. Pero... Espera! ¿Dylan Looper temblando y tartamudeando? Oh no, eso sí que no. 

Mire hacia adentro del salón y lo primero en lo que mis ojos se posaron fue en la pizza que poco a poco se iba enfriando, y puedo decir con mucha seguridad, que si la pizza pudiera hablar, en ese instante estaría pidiendo un microondas a gritos o pidiendo que se la comieran. Volví a posar mi mirada en Dylan y no queriendo entretenerme más decidí no dejarle pasar.

- Lo siento Dylan, estoy ocupada, no puedes entrar. Pero podrías decirme que quieres....

- Espera! ¿Ocupada? ¿Hay alguien ahí dentro? - Hizo un desesperado intento de entrar en el salón que yo no le permití, cerré la puerta y me puse en frente para no darle acceso al salón. Y me volví a encontrar con la magnífica mirada de color miel de Dylan. El poso su dos brazos a los laterales de mis mejillas, cesando el espació entre él y yo. Esto se estaba volviendo incomodo... Y a pesar de mantener ciertas distancias entre nosotros y que el sobrepasara mi altura, sentía como su aliento golpeaba mi rostro. - Hanna... - Trague saliva tan bruscamente, que probablemente hasta Lú lo podría haber escuchado. Cada vez se acercaba más, cerró los ojos y lentamente se iba acercando a....

** 

- Podrías dejar de reírte, sí, le cerré la puerta cuando intentó besarme Lú, pero deja de reírte o acabaras por orinarte encima.

Había transcurrido aproximadamente unas horas desde lo sucedido con Dylan, por fin me había terminado mi pizza, y Lú ya había llegado a mi casa para hacer el trabajo. Pero como mejor amiga que es, me hizo un interrogatorio cuando le comente que Dylan había llegado a mi casa. Así que, aquí estaba yo, explicándoselo todo a mi mejor amiga, mientras ella, se reía descontroladamente por mi reacción al ver las intenciones de Dylan.

- Vale, vale... - dijo cogiendo aire para intentar parar de reír- Me pondré seria.- Hubieron dos segundos de silencio completo, antes de que empezara a reírse de nuevo. Increíble, tengo una mejor amiga que se ríe de mis desgracias. Que afortunada soy... *noten la ironía*. - Vale, ahora sí, me pondré sería. 

- Gracias- dije poniéndole mala cara a mi mejor amiga por hacerme perder tanto tiempo.

- Pero Hanna- empezó explicándose- Tu crees, ¿que podrías darle otra oportunidad?

Empecé a chasquear los dedos frente la cara de la persona a la que llamaba mejor amiga- Lú, acaso no recuerdas lo de la fiesta? Desde aquel beso, nada es lo mismo.

Lú agacho la cabeza al recordar lo ocurrido en la fiesta de Brú y seguidamente empecemos a centrarnos en nuestro trabajo. 

Un sábado como muchos otros, Brú, también conocido como Bruno Evans, hijo de una de las familias más conocidas e importantes de la ciudad, organizo una fiesta. Sus padres eran grandes empresarios, con lo cual, siempre estaban de viajes; por lo dicho, Nil, el hijo menor de los Evans, Susan y Bruno se quedaban solos. 

Bruno estaba en la universidad, prácticamente no le conocía, ni siquiera recuerdo quien nos dio la idea para ir allí, debido a que nunca había tenido contacto con él, pero allí me encontraba yo. Acababa de entrar por la puerta del jardín de aquel chale, con un vestido azul eléctrico sencillo, que me llegaba prácticamente hasta las rodillas o podría decir, que menos, Una vez te encontrabas dentro, tu mirada se desvía a los cientos de adolescentes en el suelo borrachos, en la piscina repleta de gente en ropa interior, o la gente decente que aún seguía bailando tanto dentro, como fuera de casa. 

Brú se acercó a saludarme, e invitarme a entrar y enseñarme la casa, Para no conocerme, tenía que admitir que fue muy amable. La fiesta transcurría con normalidad, hasta que envié un mensaje a Dylan.

Para: Dylan <3

Mensaje: Ya estoy en casa de Brú, ¿Dónde estás? 

Al instante recibí respuesta.

De: Dylan <3

Mensaje: También estoy en casa de Brú, ahora nos vemos. 

Una sonrisa se formó en mi rostro, al pensar que en escasos segundos nos veríamos. Decidí empezar a andar hacía el jardín, donde se encontraba la mayor parte de la gente. Y como no, allí estaba Dylan. 

Mis ojos en milésimas de segundo empezaron a llorar lentamente y silenciosamente, al ver el rostro de Lily, una de las amigas de Brú, besar a Dylan. Mi cara se paralizo en el acto, tanto como mis piernas. Dylan intento explicarse, se acercó rápido a mí, pero tan solo fui capaz de darle una bofetada por todo lo que había visto.

Con el tiempo, me explico todo lo ocurrido, pero desde entonces nada fue igual, así que este sábado termine con todo. 

Hola lectores/as, espero que os esté gustando a todos esta pequeña historia. Siento haber tardado en subir, pero el fallecimiento de un ser querido ha impedido que tuviera tiempo y ganas para subir capitulo. También quería decir que, cada persona se puede imaginar a los personajes como quiera, pero creo que Liam Payne de joven caracteriza físicamente a Dylan, por sí os queréis guiar sobre lo que me baso yo.  

Aquí os dejo un multimedia de Liam Payne de joven.

¡Un abrazo enorme a todos!