Mi compañero de cuarto (kakairu)

Capitulo 2

Al día siguiente Iruka despierta abrazado de un hombre delgado y sexy. Sí, era Genma; Anoche Iruka regresó borracho ya que quería ahogar sus penas sin embargo esto lo empeoró y lo hizo caer en una depresión terrible, siendo así su gran amigo durmió con el abrazándolo.

— Buenos días Iruka. ¿Cómo amaneciste?

— ¡Espera! ¿Qué hago aquí a tú lado?

— ¿No recuerdas? Te pusiste ebrio y estabas súper triste, me diste pesar así que decidí dormir contigo al lado.

— Oh, G-Gracias Genma, creo que lo necesitaba sin saberlo. — Dijo Iruka con una risa un poco incómoda.

— Se que te molestan este tipo de cosas pero es momento de que estés un poco acompañado. ¿No lo crees?

— Bueno, sí pero yo naci para estar solo y eso lo sabes.

— No digas tonterías, Iruka.

Genma un poco decepcionado de la respuesta se levanta y va a despertar a su sobrina.

— Que día tan pesado el de ayer. Solo quiero llorar, no se por qué siento otra vez ese vacío. ¿Será que soy débil? — Dice con tristeza y melancolía — En 2 semanas voy a mudarme a la panadería con ese desconocido, espero no sea una persona desagradable, siendo así creo que huiré rápido. Además hoy tengo que ir a la academia, que pereza...

Iruka comienza a bañarse para estar limpio como siempre, se va a desayunar pero ve que el desayuno es comida de afuera.

— ¿Y eso, Genma?

— No pues, no había nada para cocinar así que mientras te bañabas fui a ver un puesto, vendían sopa de miso y pescado a la parrilla así pensé que sería un buen desayuno.

— Pues bueno, nada mal para ser mi primer día de clases.

— Jaja, Bobo.

Iruka termino su desayuno y se fue directo a la academia, al llegar su pesado alumno le comienza a hablar.

— ¡Hola Iruka Sensei!

— Hola, Naruto. ¿Cómo va tu día?

— Genial Sensei, por cierto pronto seré el mejor alumno y verá que superare a Sasuke.

— ¡Claro que si! — dijo Iruka con una gran sonrisa.

— Bueno Naruto me tengo que ir, esfuérzate.

Iruka tan solo ríe, adora a Naruto pero es muy intenso. Después de calificar exámenes
Iruka sintió un fuerte dolor de estómago, se va al baño corriendo y comienza a vomitar.

— Al parecer el desayuno no me vino bien. — Dice mareado. — ¡Bluagh! Mierda he vomitado mucho, me siento muy mal. Debo de pedirle permiso a Hiruzen para ir al médico.

«Ya casi llegó a la oficina, tu puedes Iruka...»

Al abrir la puerta de la oficina de Hiruzen, Iruka se desmayó del dolor. Al caer en el piso los que se encontraban en la oficina trataron de ayudarlo, sobre todo un chico alto con pelo platino oscuro que lo alzo y lo llevo al hospital eso parecía toda una escena dramática.

Iruka minutos después despierta en una camilla de un hospital grande, la habitación era muy blanca y tenía bastantes botiquines, tenía un sofá negro en la esquina y ahí estaba sentado el chico con el que se había chocado la vez pasada.

— ¿Q-Qué hago aq-? Uugh.

— Si quieres vomitar aquí tienes una bolsa.—Dijo Kakashi entregándole la bolsa.

Kakashi se llamaba esa tal persona que ayudó a Iruka a traerlo al hospital.

— G-Gracias. Me pareces conocido, ¿Quién eres?

— Mi nombre es Kakashi Hatake y sí, nos conocemos. El jueves pasado mientras corrías te chocaste conmigo ¿Recuerdas?

— ¡Si! Bluagh — Iruka vomita de nuevo. — De verdad Lo siento.

— Jaja, no te preocupes. Al parecer te intoxicaste con algo, por eso estás así de mal. ¿Sabes qué comiste?

— Sí, sopa de miso con pescado a la parrilla pero de los puestos de la calle, fue lo único que comí.

— Al parecer fue eso, por cierto ¿Cómo te llamas?

— ¡Iruka Umino!

— Bueno Iruka, soy enfermero de aquí. Así que hoy quedas hospitalizado por un día, cualquier cosa que necesites me llamas, además... ¿No tienes familiares?

— No, pero tengo un amigo.

— Llámalo si quieres, por cierto pagué por ti el servicio hospitalario.

— ¡C-Cierto cuándo te devuelvo el dinero! Que pena contigo yo aquí tranquilo hablando bobadas  y sin acordarme de todo, de verdad mil disculpas soy muy despistado.

— Tonterías, es un regalo de mi parte Iruka. Tómalo como cortesía — dijo Kakashi giñando el ojo.

— Apenas nos conocemos como es posible. — Dijo sin lograr alcanzar la calma.

— ¿Sabes qué en dos semanas comienzas a vivir conmigo cierto? Cómo no voy a ser amable con esta persona tan indefensa y agradable.

Iruka bastante sorprendido tan solo lo mira fijamente, Kakashi le sonríe con la mirada ya que tenia un tapabocas. Ambos comenzaron a hablar para conocer mejor sus intereses ya que iban a vivir juntos después de todo.

Al día siguiente Kakashi levanta a Iruka con un niño al lado, sí. Era Naruto, lo vino a visitar al enterarse que su maestro se encontraba emfermo. Ambos tenían un buen lazo así que era de esperar.

Kakashi al parecer conocía a Naruto, este le dio clases de pimpón un tiempo mientras estaba en vacaciones.

— Hola Iruka Sensei ¿Cómo se encuentra?

— Bien Naruto y gracias.

— Hoy te acompañare con Kakashi para ir a tu casa. — dijo Naruto emocionado.

— ¿Enserio? No es necesario.

— Claro que lo es. — dijo Kakashi agarrándolo de la mano.

Kakashi, Naruto y Iruka se van hacia la casa de Genma, en ese entonces Naruto y Kakashi no sabían. Al llegar tocan la puerta abre Genma pero Kakashi se sorprende.

— No sabia que estabas casado Iruka.

— ¡Que! N-No estoy Casado, es mi amigo.

— No mientas.

Kakashi lo dice intencionalmente para burlarse un rato de Iruka, ya que era obvio que no estaba casado ya que pronto viviría con el.

— Lo siento señor pero este despistado vive conmigo ahora porque se le acabo el arriendo y no sabía, así que no alcanzo a alquilar un lote.-dijo Genma muy serio y a la vez a punto de reír.

— Jaja, no sabia que eras así, Iruka Sensei.

— ¿Por qué me dices sensei?

— No lo se dime tú, ~Sensei.

Iruka muy sonrojado por la pena de las bromas de el enfermero, tan solo entra en esa pequeña cabaña y se despide, luego de esto se va a dormir a esperar que mañana sea un mejor día.