Capítulo 6

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NICOLÁS

Esperé unos cuantos minutos a ver si se dignaba a salir del baño pero al ver que no lo hizo, aproveché la oportunidad, me puse a pensar de qué manera podría fastidiarla pero decidí que se lo dejaba a la suerte, giré suavemente la manija y al ingresar la vi acostada dentro de la bañera con los audífonos puestos y cantaba una canción que yo no reconocía ni la había escuchado antes.

Su voz siempre fue algo que me dejaba perplejo pero no dejé que eso me impidiera hacer lo que tenía en mente, trate de verle la cara de una manera sigilosa y tenía los ojos cerrados, era algo que ya sabía pero quería asegurarme. Dios, hablaba como si la conociera mejor que a mi mismo... di un pequeño vistazo a los alrededores, aprovechando que no me veía <<Ella haciéndome mucho más fácil las cosas>> busque por algún lado la manguera que todo bañera se supone que tiene pero este no la tenía, ahora piensa rápido.

Mi mente ideó otro plan, encontré un talco a la mano e hice lo que la mayoría hace con esto, y no era echarlo en los zapatos, precisamente, sino que aterrizó sobre su cabeza haciendo que ella se callara de inmediato y girará su cuerpo hacia mí para luego mencionar algo que me hizo querer no haberlo hecho.

—¡Me cayó en los ojos, idiota! —gritaba ella mientras se levantaba de manera fugaz hacia el lavamanos y trataba de sacarse el talco de los ojos

Yo la miraba con una sonrisa pero al ver que seguía luchando por poder abrir los ojos empecé a sentirme culpable, me acerqué a ella poniendo una mano sobre su hombro, con clara intención de querer ayudarla.

—Déjame quitártelo —pero su respuesta ni siquiera es una que hubiese esperado

Esparció sus manos sobre mi cara y estas tenían jabón, el cual sí me entró en los ojos y hasta en la boca.

—La venganza es de quien ríe último, campanita —dijo ella mientras quitaba los residuos del jabón de sus manos

—Eres una tonta

—Querrás decir "inteligente" por lo que hice, soy una gran actriz —me guiño un ojo y volvió a meterse en la bañera, aún algo blanca por el talco .—Ahora te pediré que después de tu fallida revancha te retires y me dejes dormir para que esta noche acabe rápido.

—Pues que crees, eso no se podrá cariño...

—No vuelvas a decirme así, no tienes derecho ni permiso para hacerlo

—Escuchas lo mismo cuando estas con diferentes chicos cada noche ¿En qué te afecta que lo diga yo? —no se bien que fue lo que atravesó sobre su rostro pero la emoción que se había quedado no era buena

—Al menos he estado con chicos que si me han hecho sentir como una mujer en todo sentido y nunca fingieron quererme

<<Golpe al orgullo... espera ¿fingir quererla? No podría a ningún costo hacer eso>>, no sabía que decir para aquella confesión ¿Tan mal la hice sentir...? Espera, ni siquiera habíamos llegado a esa parte en nuestra relación, siempre la respete en ese ámbito. ¿Por qué usó tantos "espera"?

—¿Qué pasó, campeón? ¿Te quedaste sin que decir? pensé que esto era un ataque con lo mejor que tengas —me miraba con una de sus cejas alzadas

—Cuando me desquite contigo, espero no verte llorar por las consecuencias como cuando rompí contigo

—¿Sabes Nick? Eres como esas canciones en español que no tienen sentido, tal vez ritmo pero su letra no tiene concordancia ni se sincroniza con el mensaje que plantean dar —apoyó su mentón sobre la palma de su mano y me observó desde su altura

—Y tú eres de esos poemas que son bonitos cuando los lees pero cuando logras entenderlos y saber lo que transmite cada curva de cada sílaba, quedas perplejo al ver el horrible interior de esas palabras —me odié porque hasta yo sentí lo amargo de aquella respuesta pero ver que a ella si le había afectado, no me sentí mucha satisfacción por ello

Lo Que Pudo Ser -1- (Completa) EN EDICIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora