It Wasn't a Dream [KunYang] ³

2

Yangyang estaba aburrido, sus padres casi recién se fueron a la ciudad para comprar algo de alimentos, no podía escribirle a su novio por qué estaba ocupado y no quiere utilizar a sus otros amigos como distractor.

Hyunjin, Jeongin, Kun, esos tres son sus amigos pero, Kun tenía algo diferente.

Kun es compañero de clase de su novio, todo está normal pero.. su piel es pálida y no salía mucho al sol.
Supone que su gege al estar mucho tiempo al sol le daba alergias y Por esa razón su palidez.

Dejó de pensar en su gege cuando escucho que alguien golpeaba la puerta de su cabaña.
Negó con la cabeza, como podía pensar en Kun siendo que tiene novio.

Se levantó de su cama y fue a abrir la puerta, y ahí estaba su gege.
Se sorprendió mucho verlo ahí, ¿Cómo sabía la dirección de su cabaña?.

— Hola Yanggie — saludo el peliazul con una sonrisa.

Yangyang salió de sus pensamientos cuando Kun habló.
— Oh, uh, Hola Kun-ge pasa — se hizo a un lado para que pase.

Se dirigieron a la sala, el peliazul se sentó con confianza encima de este.

— ¿Cómo supiste que dónde quedaba la cabaña? — pregunto Yangyang por qué no era secreto  para sus amigos que las vacaciones pasaba en la cabaña de sus padres pero, no le había dicho la dirección.

— Le pregunté a alguien — mintió Kun, el sabía todo referente a Yangyang y además que su pueblo quedaba casi cerca de aquella cabaña.

Yangyang hizo una expresión de confusión para luego restarle importancia y se sentó a lado de Kun.

— Para qué has venido? — pregunto Yangyang, recostandóse por el sofá — Querías algo?.

— Estás solo? — pregunto Kun mirando alrededor, sabía que se encontraba sólo, solo quería evadir sus preguntas.

—Asi es, mis padres salieron un rato — respondió Yangyang.

Kun miró a Yangyang, el chico tiene un rostro tan lindo. La verdadera razón por la que estaba en ese lugar es por que quería hacer suyo a lindo novio de uno de sus 'amigos'.

— Por qué me miras así? — pregunto Yangyang nervioso.

Kun se acercó más a él para luego besarlo, lo agarró del rostro para que evitará separarse.
Yangyang hacia esfuerzos para separarse, aunque por dentro lo disfrutaba, sabía que de alguna manera eso estaba mal por qué estaba traicionando a su novio.

— Basta — dijo Yangyang y finalmente se separó — no vuelvas a hacer eso — pasó su mano por sus labios, quitándose el rastro del beso.

— Te gustó, admítelo — Kun sonrió y Yangyang le fulminó con la mirada.

Yangyang se levantó del sofá y se dirigió hasta la puerta de salida para luego abrirla — Vete — le dijo a Kun.

Kun se levantó, se dirigió en dónde Yangyang estaba y en un rápido movimiento cerró la puerta y acarraló a Yangyang por la pared.

Kun miraba a Yangyang con deseo haciendo al chico ponerse nervioso, el peliazul volvió a besarlo pero esta vez lleno de lujuria, rápidamente Yangyang le correspondió el beso y enredo sus piernas por la cadera y sus brazos sobre el cuello de Kun.

Kun sonrió en el beso y llevo a Yangyang en su habitación.
Recostó a Yangyang sobre la cama, sin detener el beso.

Cuando la falta de aire se hizo presente se separaron.
— ¿Cómo sabías mi habitación? — pregunto Yangyang agitado.

— ¿Eso importa ahora?, Yo creo que no — dijo para luego volver a besar a Yangyang.

Las ropas estaban tiradas por el piso, ambos se encontraban desnudos y a punto de llegar al orgasmo.

Kun daba cortos beso a Yangyang por su cuello, hasta que se detuvo en una parte.
Los colmillos de Kun salieron, Yangyang se encontraba con los ojos cerrados.

Yangyang gimió de dolor cuando los colmillos de Kun se impregnó por su piel abriéndola.

— Ahg Ku-Kun, de-detente — decía difícilmente Yangyang intentando separarlo, cosa que fue inválido ya que no tenía demasiada fuerza.

Ambos se corrieron al mismo tiempo y Yangyang se desmayó por la sobre estimulación y pérdida de sangre.
Después de que terminarse de succionar, dijo algunas palabras en un idioma desconocido, para que olvidará el momento que lo vió.

— Perdona lindo — susurró Kun al separarse de Yangyang — Es que eres tan delicioso.

Sonrió se relamió los labios y salió del interior de Yangyang.
Se vistió rápidamente y limpió levemente a Yangyang para ponerle nuevamente sus prendas.

Antes de salir de la habitación le dio una última mirada a Yangyang, vió que desapareció el rastro de sus colmillos de su cuello, para luego finalmente salir, no sin antes haber cerrado la puerta.