Embarazado de un idiota [Mewgulf]

Cap 9

Narra Mew

Al ver como el cuerpo de mi contrario se desvanecía lentamente delante de mis ojos una sensación de dolor se colocó en mi pecho "Tenía miedo, miedo de perderlo a él y a nuestro bebé" por lo que sin pensarlo dos veces coloque a Gulf sobre mi espalda sintiendo lo delgado que se encontraba.

-Gulf juró que si algo malo llega a pasarte yo...- traté de decir sintiendo como mi voz comenzaba a quebrarse con cada palabra que pronunciaba, pues sabía que tenía que ayudarlo, pero no sabía cómo hacerlo.

Había dejado mi auto en el estacionamiento de la biblioteca y en este también se encontraba mi billetera en donde tenía casi todo mi dinero, pues lo que traía en los bolsillos a duras penas cubriría para pagar el taxi, por lo que sintiéndome culpable y miserable comencé a llorar provocando que mis ojos se cristalizasen prohibiendo que pudiera ver con claridad mi andar.

Di un par de pasos hacia adelante saliendo como podía de aquel callejón en el que nos habíamos ocultado y al encontrarnos ya en la avenida los gritos conocidos de un muchacho llegaron a mis oídos provocando que sintiera un poco de alivio.

Aun con la voz quebrada traté de gritar, llamando toda su atención -Maike- dije de manera desesperada no pudiendo creer que pediría de su ayuda.

Este al verme y al notar que tenía un cuerpo sobre mi espalda se acercó hasta mí de manera rápida - ¿Qué es lo que pasó? – preguntó moviendo un poco el cuerpo de Gulf y al notar que era el abrió los ojos de par en par- ¿Qué fue lo que le hiciste? – reclamó como si en ese preciso momento pudiéramos discutir con tranquilidad.

-Gulf se desmayó de la nada, el... el esta embarazado por favor ayúdame a llevarlo al hospital- supliqué y este al escucharme se quedó atónito.

- ¿Em... embarazado? - preguntó.

-No hay tiempo de explicar lo que sucedió, debemos llevarlo de una vez- grité.

-Yo no puedo irme... - murmuró - Pero, Mew tu auto ¿Dónde está? – preguntó mirando a todas las direcciones posibles.

-Lo dejé en la biblioteca ahí está todo mi dinero y mis tarjetas, no tengo nada- hablé y este al escucharme soltó un suspiro de frustración.

-Está bien, toma- dijo entregándome las llaves de su auto – Hay dinero en él, puedes usarlo – habló y después de aquello ambos nos dirigimos hasta aquel auto logrando subir en los asientos traseros con cuidado el cuerpo de Gulf que seguía inconsciente.

-Ni bien las cosas se calmen pagaré por todo- hablé dirigiéndome al asiento del conductor.

-Luego hablamos de eso, por ahora lleva a Gulf con cuidado y dile que hablaré con el jefe para que no se meta en problemas- comentó haciéndose a un lado para que yo pudiera conducir – Iré cuando salga del trabajo- terminó diciendo.

Luego de aquella breve charla conduje de manera rápida hacia el área de emergencia que tenía el hospital y al llegar a este giré mi cuerpo unos centímetros volteando a ver a la persona que se encontraba detrás mío.

-Prometo que todo saldrá bien, solo espera unos segundos más- murmuré bajando del auto de manera rápida para luego acercarme hasta la ventanilla donde un par de enfermeras se encontraban.

De manera desesperada comencé a pedir ayuda explicando que Gulf se encontraba inconsciente y débil por todo el esfuerzo sobrehumano que había cargado sobre sus hombros, es por ello que al escuchar mis palabras varios paramédicos se acercaron hasta mí, trayendo consigo una de las camillas que había por todo el lugar.