¿Deberíamos? ~ Do Kyungsoo

Capítulo 28

Ese día era la boda de Dan y Yonhye estaba realmente emocionada.

Había ido de compras con Haneul y habían conseguido unos vestuarios muy hermosos.

En ese momento estaban esperando a que Junmyeon pasará a recoger a ambas.

– No creo poder soportar toda la noche en esto - Se quejo Haneul. - Solo tengo malos recuerdos de cada vez que utilice tacones.

– Si quieres podemos intercambiar. Tu utiliza mis zapatillas y yo utilizo esos.

–¿Estás segura?

–Si, si. No hay problema.

– Gracias - Agradeció con una sonrisa mientras le entregaba aquellos zapatos.

Eran unos tacones realmente bonitos...

Como si fuera obra del destino, en el momento en que Haneul se terminó de poner aquellos zapatos el timbre de su teléfono sonó, era Junmyeon.

Fue tan tierno ver como los ojos del chico se iluminaron al ver a su amiga.

Si Haneul no fuera tan joven seguramente la boda a la que irían sería la de ellos.

Tras un largo recorrido llegaron al lugar.

Era un lindo salón a las afueras de Seúl, parecía salido de una película de fantasía.

Aún maravillada por el lugar se dirigió a ver a los novios.

–Yonhye, hola. - Saludo alegremente Dan.

–Woah, te ves realmente bien en ese smoking. - Comentó asombrada.

– Gracias. Ella es Seoyee, mi futura esposa. Seoyee ella es Yonhye, es la estilista de Kyungsoo.

– Mucho gusto - Saludo alegremente la chica al lado de Dan.

– Eres muy hermosa, mucho gusto Seoyee.

Era como si las bodas hicieran lucir a todos cien veces mejor.

–¿Ya viste a Kyungsoo? - Preguntó él hombre.

–No ¿Aún no ha venido?

–No, pero supongo que vendrá pronto.

–Bueno, creo que es hora de irme. Les deseo lo mejor.

Finalmente la chica se retiró de aquella habitación.

¿Cómo se habrá vestido Kyungsoo?

Ya había visto al pelinegro vestido formalmente para otros muchos eventos, pero como ya había dicho: Las bodas hacen lucir a todos cien veces mejor.

Pudo divisar en una esquina de aquel salón a Minseok hablando con otros invitados. También vio a Junmyeon riéndose con Haneul y a Jongin chateando en una mesa. Pero, aún no habia ni la más mínima pista del pelinegro.

Estoy aburrida...

Pero ¿Qué más podía hacer?
No iba a meterse en la mitad de la dulce pareja para hablar con su única amiga.

Ay, realmente no soporto los silencios.

Ya comenzaba a ponerse nerviosa, no tenía ni la menor idea del porque odiaba tanto estar sola.

¿Qué hago?¿Con quién hablo?

Yonhye repaso con su mirada aquel salón una vez más.
No, ni una sola pista de él.

De pronto en su mente una idea fugaz se hizo presente ¿Qué tal si esta era una situación que le tenía planeada el destino? Una señal divina para que conociera mas personas, para que se abriera más y diera un paso adelante.
Un símbolo del universo con el fin de que ella aprendiera a socializar más...

–Hola.

¿Qué?

Yonhye podría jurar que ella no se había dado cuenta en qué momento sus pies se habían movido solos y se había dirigido hacia el único miembro solitario para dedicarle un saludo.

Kim Jongin, quien ahora la miraba de forma interrogante con su teléfono aún encendido.

Ay no..¿Acaso a mí no me enseñaron a pensar y luego actuar?
¡Que vergüenza!

Yonhye a duras penas había intercambiado unas cuantas palabras de cortesía con el en todo este tiempo.

–Hola - Respondió extrañado.

– ¿Cómo te llamas?

¿¡Qué como se llama!?

Por amor a Dios, Yonhye. Hasta un niño de dos años lo reconoceria, además que para colmo tu trabajas con él.

–Perdon, perdón. Si se cómo te llamas, solo que...Olvídalo - Pidio frustrada.

–¿Estás acosando a una pobre chica?

Yonhye se volteo sorprendida ante aquella intervención.

¿Byun Baekhyun?

– No te había visto ¿Hace cuánto llegaste? -Preguntó el chico que estaba sentado.

–Acabe de llegar, estaba algo ocupado - Aclaró -  Tu eres la maquillista de Kyungsoo ¿Cierto? ¿Cómo era tu nombre?

–Soy Yonhye.

¿Cómo había terminado en esa situación?

La verdad era que ella estaba tan ocupada con las actividades en solitario del pelinegro que en todo este tiempo casi no había interactuado con algunos miembros.

–¿De qué hablan?

¿¡Otro más!?

– Le estaba preguntando el nombre - Le aclaró Baekhyun a Jongdae.

– ¿No sabías su nombre? Baekhyun, lleva trabajando con nosotros hace mucho.

–Soy malo con los nombres - Se disculpó Baekhyun con una sonrisa - Si no viviaramos juntos seguramente ya habría olvidado el tuyo.

–¿Hablas en serio?

–Solo bromeó. Si sabía su nombre, solo quería que me lo dijera.

–Kim Jongin, deberías interactuar con el mundo y separarte un poco de tu celular. - Se burló Jongdae.

– No crees que ya soy un poco viejo como para que me regañes por esto - Se burló - Solo estoy respondiendo unos cuantos mensajes.

Si me voy silenciosamente no lo notarán.

Yonhye comenzo a dar pasos lentamente hacia atrás en busca de su huida.

Lamentablemente, su plan se frusto al chocar con alguien.

–¿A dónde vas?

Al fin una voz que reconocía.
La chica se volteo emocionada, solo para ver al pelinegro.

Estaba simplemente atónita, se veia tan bien. Lucia un traje azul oscuro (El cuál ella no había visto antes), con unos zapatos negros y una corbata.
Solo se había peinado ligeramente y llevaba gafas.
Era sencillo, pero a los ojos de ella se veía asombroso.

–Al fin llegaste, te estaba esperando.

–¿Me esperabas?

–Si. Estaba muy aburrida y fui a hablarle a Jongin sin darme cuenta y luego todos aparecieron y yo estaba muy incómoda e intenté escapar y aquí estás.

– ¿Estás bien?

Yonhye simplemente le dedicó una sonrisa como respuesta.
Una sonrisa que en este punto era capaz de derretir completamente el corazón del pelinegro.

¿Cuándo había pasado?
¿En qué momento es chica había comenzado a provocar aquellos latidos frenéticos?

Realmente no lo sabía.