LA POCION QUE INICIO TODO

Capítulo 4

3 semanas habían pasado desde que Juvia se había unido al equipo de Natsu, y para alegría de Laxus los costos de destrucción del "Team Natsu" habían bajado un 50%, pero por sobre todo, en ese tiempo la peliazul pudo, por primera vez, darse cuenta de la abismal diferencia de personalidades entre el Dragón Slayer y el mago de hielo.

Gray era frio, siempre tratando de ser maduro y sereno, pero por sobre todo muy reacio a mostrar muestra de afecto alguna.

El pelirosa por el contrario era alguien cálido, no temía el aceptar y mostrar su lado más infantil y alocado, ni tampoco temía el hacer contacto físico afectivo con otras personas.

Tanto que pondría incomodo a cualquier persona. A cualquiera menos a Juvia.

Ya que lamentablemente desde su infancia la maga de agua nunca experimento grandes muestras de afecto por muchas personas, hace mucho nació en ella el deseo de tener a su lado a alguien que sea capaz de proveerle aquello que nunca tuvo y siempre había deseado, afecto y .... amor.

No podía negar el hecho que todas las veces que Natsu se lanzaba hacia ella para felicitarla abrazándola le hacían sentir ligeramente avergonzada, pero tampoco podía negar ni culpar a la pócima por el hecho de que le encantaba que una persona la tratase con tanto cariño, y en más de una vez lo había mostrado respondiendo al abrazo del pelirosa con el suyo propio.

Lo cual ponía a Juvia en la situación más incómoda que en su vida había enfrentado, o mejor dicho imaginado enfrentar, por un lado estaba Gray, el hombre por el que estuvo enamorada por tantos años y por el cual hizo todo lo que pudo sin obtener resultados, o Natsu, aquella persona de corazón cálido que le daba aquel cariño incondicional que ella siempre anhelo, aunque claro, "Love Deluxe" ayudo "un poco" a que ambos se acercaran mucho más.

Viendo la situación actual de la peliazul y las personalidades y magia de ambos magos, se podía resumir que en pocas palabras Juvia se encontraba entre una espada de fuego y un muro de hielo.

Es por eso que la maga de agua decidió hacer unas pequeñas "pruebas de fuego" al Dragon Slayer.

- 'Aunque Juvia cree que es un poco irónico llamarlas "pruebas de fuego" tomando en cuenta que Natsu-san es inmune al fuego' –

Magnolia (11:45 pm)

(Prueba N°1: Acos… Acercamiento)

Juvia, comenzó a seguir al pelirosa por la ciudad, haciendo alarde de sus grandes capacidades para seguir a las personas sin que estas se dieran cuenta. En cierta calle, Natsu doblo hacia un estrecho camino que iba en dirección contraria a la del gremio, llamando enormemente la atención de la peliazul, quien sin perder tiempo fue a revisar el angosto callejón, pero no había una sola alma en esa calle.

- ¿Dónde se metió? – se preguntó en voz baja.

- ¿Quién? – pregunto suavemente una voz detrás de ella.

- Pues… - Juvia se detuvo, esa voz la reconoció al instante, se giró lentamente para ver la radiante sonrisa del mago de fuego.

- Hey Juvia! ¿Por qué me seguías? – pregunto de inmediato el pelirosa, sin quitar su sonrisa.

La maga de agua se asombró de que Natsu fuese capaz de descubrirla, cosa que nunca le había pasado, pero claro, nunca antes siguió a alguien con los sentidos tan agudos como un animal salvaje.