Que la tormenta por la cual estés atravesando no te impida seguir, recuerda que todo pasa, el dolor, la tristeza, la depresión, la soledad, la desesperación, el dolor de una perdida, el dolor de un corazón roto, todo en cierto momento pasa.
Después de esas tormentas que vivimos, viene la calma, de cierta forma eso que vivimos nos hace más fuerte, cambia la perspectiva de nuestras vidas para bien.
No dejes que nadie ni nada dañe tu felicidad, más allá de lo que digan de tí, lo que piensen de tí, recuerda que eso no te define como persona, ni mucho menos define tu carácter ni personalidad.
Cada persona tiene su propio mundo a parte, cada quien tiene su lucha interna, se que muchos luchamos contra nuestros propios pensamientos ya que ellos son los que están ahí acusándonos tanto como para bien o para mal.
Es decir todos y cada uno de nosotros vemos el mundo según nuestra propia mochila personal, (experiencias, educación, entorno cultural y social). Se que en muchas ocasiones nos sentimos en una encrucijada sin salida, nos cuesta buscar una solución a lo que nos pasa.
Pero todo tiene una solución, la mente es tan poderosa, que solo debes de preparar y racionalizar. Cambiar ese pensamiento negativo por uno positivo, sacar y ver el lado bueno de las cosas. Obviamente es mucho más fácil decir que hacerlo y llevarlo a la práctica.
Pero cuando aprendamos a utilizar esos pensamientos acusatorios, que nos impidan avanzar más bien convertir eso como una escalera que nos ayuda a avanzar y a superar. Veremos con ojos diferente, nos impulsaremos con esas mismas piedras que hemos tropezado, para sacar a flote nuestras mejores cualidades.
Darnos cuenta que no es de débiles sentirse de esa forma, es más somos guerreros, porque a pesar de todo seguimos en la lucha, superandonos y ser mejores cada día más, ser la mejor versión de nosotros mismos.
La tormenta nunca se quedó por siempre, siempre saldrá el sol. Que nos ilumina y nos alumbra con su resplandor.
Los grandes cambios siempre vienen acompañados de una fuerte sacudida. No es el final del mundo, es el inicio de uno nuevo.