Del sarcasmo al amor

Capítulo 6

Esto mejora por momentos. Estoy al lado de Sarah, esperando a que venga Sean, porque nos ha ido a comprar palomitas. Sí, palomitas, lo sé, infantil. ¿Y qué? Están riquísimas.

Hace rato que no veo a Max, cosa que me preocupa, porque si Sean ha venido con Sarah en la moto, yo no tengo con quien volver.

-Hola, pequeña. - Me giré para saber de quien provenía esa voz y me encontré de frente con Cameron, mi ex-novio. Sinceramente, no es que acabáramos del todo bien, ya que él me obligó a subir en una moto para las carreras, con los ojos vendados, y casi nos matamos porque se estrelló contra una de las esquinas próximas al precipicio.

-Hola, Fofo. - Le llamaba así desde que vino a mi casa, tiró al suelo mi peluche favorito, Fluffo, y yo grité: ¡NOOOO; MI FLUFFOOO! Y el dijo: ¿Fofo? ¿Quién le pone Fofo a un peluche?

-Aún te acuerdas, little Fluffo. Y, ¿qué tal te va todo? - Preguntó rascándose la nuca.

-Bien, supongo. ¿Y a ti? ¿Con cuántas te has líado desde que te dejé, mujeriego en potencia? - pregunté con un tono sarcástico que dejaba claro lo mucho que me molestaba la situación.

-Pues con ninguna, sinceramente. - dijo mirándome fijamente, de una manera que más que ternura provovaba en mi una sensación de miedo, que me invadía por completo, como si ya no conociera al que fue mi novio.

-Eh, ¿Hola? ¿Interrumpo algo? - dijo apareciendo Max de la nada.

-No-no, no interrumpes nada, Max. Es más, ya me iba. Ha sido... em... bueno, supongo, volver a verte, Cam. Adiós. 

Agarré a Max de la mano, y le indiqué que ahora le explicaría todo. Lo llevé hasta la moto y se lo expliqué todo. Me di cuenta de que estaba muy tenso. ¿A qué se debería? Yo no soy celosa, y no sé detectar los celos en otra persona a menos que lleve un cartel donde ponga con letras en neon que está celoso.

(...)

Narra Max

¿Por qué cojones tuve que ir a ver a Lilian? Mi jodida putita, la que se me insinua cada vez. Si no hubiera ido, hubiera parado al ex-novio de Summer, y ahora no tendríamos este silencio tan rara.

-Samm, ¿Vas a participar en la carrera? - pregunto

-Seh, ¿Tú?- me dice alzando una ceja, mirándome con esos preciosos ojos azules que tiene, una mirada cargada de diversión, para demostrarme que no cree que pueda hacerlo.

-No lo dudes, bebé. - le contesto guiñándole un ojo. Pone los ojos en blanco, y la veo hacer algo de lo que la creía incapaz. Se quita la chupa de cuero negro, también la camiseta, y se vuelve a puner la chupa, de forma que quedan cubiertos sus fuertes brazos, y se le ve su plana tripa, y lo único que la cubre es un hermoso sujetador de encaje color amarillo fosforito, que brilla en la oscuridad. Se pone una gafas del mismo color que el sujetador, que también brillas, y se cambia las botas militares que llevaba por unas Conver´s exactamente iguales de color que el resto de sus prendas, y además, como no, brillan en la oscuridad. ¿Qué tiene esta chica con el amarillo fosforescente?

Pienso mil de comentarios pervertidos, y cuando le voy a soltar alguno, me fijo que ya se ha subido encima de la mto del organizador y está haciendo un caballito, para que todos se fijen en ella.

Bajo la mirada a sus pantalones, veo que se le están bajando, y se pueden apreciar sus ¿Bragas de color amarillo fosforescente? No, joder, porqué me tiene que gustar la chica obsesionada con un puto color? Pero lo cierto es que le queda de puta madre...

Lucy y Candy :

LO SENTIMOS MUCHO, MUCHO, MUCHO. ESTAMOS EN PLENOS EXÁMENES, PERO INTENTAREMOS NO VOLVERLES A FALTAR EL RESPETO DE ESTA MANERA SIN SUBIR CAP.

¡OS AMAMOS!