¿Holmes...? [Spencer Reid × reader]

The dinner

Narra Spencer:

Estábamos en la casa de Rossi cuando llegaron unos invitados.

-Deben ser los Holmes y el doctor Watson- murmuró para si mismo.

¿Los Holmes y Watson? ¿Que hacían ellos aquí?

Fueron entrando en este orden:

Primero Mycroft Holmes, con un traje ridículamente formal acompañado de su paraguas.

Sherlock Holmes, caminando con seguridad y misterio, seguido por un Doctor Watson en una faceta de Galán que no había visto.

Y por último ___...

Cuando entró se sintió como si fuera cámara lenta. Ella entró como si fuera la reina del lugar con un porte de modelo, caminando como si flotara, moviendo sus anchas caderas de lado a lado. Su largo cabello castaño se deslizaba suavemente por sus hombros, su pálida piel contrastaba con su vestido negro, el cual, se ajustaba perfectamente a su cuerpo y el corte en la falta dejaba ver parte de sus muslos gruesos. 

Sentí un fuerte sonrojo subir a mis mejillas mientras mi respiración se entrecortaba ¿como era posible que tal diosa griega existiera? ¿Como se sentiría ella al ser tan perfecta?

Un golpe en las costillas me devolvió a la realidad.

-Trata de respirar, niño genio- me sorprendió que la persona que me sacó de mis pensamientos en realidad fué Penélope García en lugar de Morgan.

-Lo tomaré en cuenta...- traté de disimular el sonrojo que aún estaba presente en mi rostro. Dios, ¿que me pasa?

-¡Parece que nuestro pequeño Reid está creciendo y sus hormonas se alborotan!- dijo una estusiasmada García con una adorable sonrisa.

-No no no, ella solo me atrae porque es muy atractiva, más allá de eso no pasa nada- le respondí rápidamente disimulando mi nerviosismo

-Mientes, Reid.- me observó con una mirada acusadora -Yo te ayudaré a que ambos terminen en una linda relación, se casen y tengan mini genios-

-¡No! Digo, entre nosotros no hay nada, solo amistad- comencé a entrar en pánico, ya que los Holmes casi me escuchan.

La colorida mujer iba a insistir pero la reina de Roma nos interrumpió, salvandome de dos horas de "consejos de citas".

-Doctor Reid, Agente García- dijo a modo de saludo -Una alegría verlos de nuevo, ¿Cómo han estado?- siguió en un tono formal.

-Buenas noches agente Holmes, y por favor, sin tantas formalidades, dígame Penélope o García- le respondió con un muy buen humor la colorida mujer.

La atractiva joven río levemente en respuesta