Touchdown (Cuando Ella Era)

Touchdown dos: "Si hacemos una Review lo gana Aidan"

2.

RACHEL

California

—¿Podemos intentarlo?— parecía desesperada, de hecho lo estaba, lo suficiente para humillarme a mí misma frente a Cole

—Rachel... créeme, aunque lo deseo no puedo hacerlo, entiende, por favor— ¿yo? ¿Por qué tengo que ser yo la que lo entienda? ¿No puede ser esta vez él la persona que lo entienda?

Me había quedado sin nada. Estaba en mi límite, no soportaría más porque deseaba desesperadamente ahogarme para así tal vez respirar. Han pasado noventa y seis días desde que ella me dejó. Todas nuestras promesas y palnes quedaron en la nada ¿lo peor? Anne ni siquiera está muerta. Su hijo murió sin abrir una sola vez sus inocentes ojos, no era justo, no se lo merecía, ella es buena, es la clase de chica que merece su final feliz ¡nunca debí dejarla sola! ¡es mi culpa!

Ni siquiera tengo cara para pedirle perdón a la lápida en el cementerio con el nombre "Landon C. Collier", no lo merezco, no puede protegerlo, ni a él o a su madre

—¿Por qué tengo que ser yo la que entienda? Eres tan egoísta, Cole. Tu hermano me quitó lo más bueno que he tenido en mi vida y tú ni siquiera puedes compensarme por lo que hizo— esta vez lo miré con todo el odio el mundo. No lo odiaba, de hecho la única persona que se merecía que le miraran así era yo misma pero una parte de mí desesperantemente pedía a gritos que alguien pagara por mis propios pecados

—No voy a ganarme tu desprecio por decidir no retirarme, Rache. Estás ebria y mañana cuando te despiertes y me veas vas a odiarme— negué repetidas veces obligándolo a mirarme

Estábamos muy cerca. Cole se había arrepentido luego de sentarme en su escritorio, abrir mis piernas y meterse entre ellas ¿por qué no solo terminó? ¿es que no soy lo suficientemente atractiva?

—No voy a hacerlo porque quiero hacerlo, Cole— estaba ebria, eso seguro pero incluso así podía leer a la perfección cómo se debatía entre seguir o detenerse

Ya ni siquiera yo sabía si era lo corecto. Sí, su rechazo me parecía doloroso pero... no lo suficiente porque yo no estaba enamorada del Cárter mayor, yo en definitiva no lo amaba. Estaba dispuesta a entregarme a él teniendo la satisfacción de saber que yo lo elegí así y también estaba dispuesta a dejarlo entrar en mi corazón así esta manera no fuera la corecta

—Aún así esto no es correcto, no es el orden de las cosas, lo sabes— se separó y me obligó a bajar —. Voy a llevarte a casa ¿bien?— me molestó que no me tomara enserio así que simplemente lo dejé ir

Si no soy lo suficiente para Cole quería creer que lo sería para alguien más. Después iría por mi cuenta, al menos sé que lo intenté pero no funcionó. Lo nuestro nunca funcionaría

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Ayer no había sido uno de mis mejores días, pero al compararlo con cómo me sentía en estos momentos creo que preferiría repetir mi borrachera. Joder. Nunca había estado tan borracha en mi vida, o siquiera borracha. La temible resaca era lo peor del mundo. Sin embargo no entendía muy bien el por qué todo mi cuerpo pesaba como nunca y me dolía como si en la madrugada me hubiera atropellado un camión gigante

Me retorcí en la cama buscando mi almohada para abrazarla, pero me detuve en seco y mi respiración se cortó cuando lo que toqué no fue algo blando como esperaba, más bien todo lo contrario, lo que estaba tocando eran abdominales, abdominales duros. Me aterroricé completamente abriendo los ojos de par en par saltando de mi posición para sentarme en la cama. Mis ojos cayeron primero en mi vestimenta: ¡una camiseta de hombre! Después volaron hasta el individuo con el que me había acostado