Capítulo 9 - ¿Celos?

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*Cinco minutos antes*

-YAMAGUCHI: Supongo que puedo ser tu pareja para los botes.

-YACHI: ¡Bien!

Yachi tenía una sonrisa de oreja a oreja que embrujaba a todos los que la miraran. Lo malo es que, debido a su timidez, casi nunca dejaba ver su lado divertido a los demás.

Casi como un zombie, Kuroo se arrastró hasta ellos buscando a alguien con quien subirse a la atracción para no ir sólo.

-KUROO: ¿Vais a montar? ¡Genial! ¿Puedo ir con vosotros?
Yachi se puso muy nerviosa. No estaba acostumbrada a hablar con gente tan imponente como Tetsuro. Yamaguchi miró a Hitoka buscando su aprobación e inmediatamente, Yachi asintió evitando mantener contacto visual con el capitán del Nekoma.

-YAMAGUCHI: Está bien, sube.

-KUROO: ¡Gracias chicos!

Estaban a punto de poner un pie en la barca y no tardaron ni un segundo en darse cuenta de que había un pequeño problema... Era una atracción diseñada para dos personas, o en algunas ocasiones para dos adultos y un niño. En este caso, se podría decir que Yamaguchi era el niño. Hubiese sido más conveniente que Yachi ocupara el sitio del medio, pero Yams entendía que su timidez no le iba a permitir estar cómoda tan cerca de Kuroo, así que tomó su lugar.

Muy bien. Tenía que hacerlo. Todo el equipo contaba con ella.

-YACHI: Tadashi

-YAMAGUCHI: ¿Sí?

-YACHI: T-Tsukki. ¿Te gusta?

¿Qué? ¿A qué venía esto? Yamaguchi se quedó completamente mudo, sin contestar.

-YACHI: Pensé que podría preguntártelo ahora que Kei y tú no estabais juntos...

La balsa empezó a moverse sin previo aviso y Kuroo parecía estar bastante interesado en aquella conversación, aunque decidió no intervenir.

-YAMAGUCHI: Y-Yo... No sé qué decir...

Yamaguchi miró de reojo a Kuroo, que seguía prestando atención. Normalmente, Yamaguchi hubiese contestado lo primero que se le viniese a la cabeza. Era Yachi, podía confiar en ella. Pero... ¿Y en Kuroo?

-KUROO: ¿Por qué no admites de una vez que Tsukki te vuelve loco? Es obvio que tú a él también.

¿Cómo? Pero si ni siquiera había respondido a la pregunta.

-YAMAGUCHI: No me gusta. Solo somos muy buenos amigos.

-YACHI: ¿Estás seguro?

No. Claro que no. Habían expuesto aquello que trataba de ocultar con todas sus fuerzas en apenas un minuto. Simplemente pensó que lo mejor sería negarlo todo.

-KUROO: Oye.. Sé que no eres sincero porque estoy aquí, pero te prometo que todo lo que hablemos ahora se queda aquí.

Kuroo parecía hablar en serio mientras señalaba las paredes que empezaban a cerrarse a medida que entraban en el túnel.

-YAMAGUCHI: Tienes razón... No estaba siendo sincero. En realidad sí me gusta. Es decir... ¿Cómo no me iba a gustar? Es perfecto.

Yams hablaba casi sin darse cuenta, así que tuvo que taparse la boca con las manos antes de que dejase salir todo lo que llevaba reteniendo durante años.

Yachi y Kuroo se miraron con cara de "qué-adorable" y empezaron a reírse casi a la vez.

Yamaguchi parecía no entender lo que estaba sucediendo. ¿Había hecho algún chiste sin darse cuenta? No sabía qué les hacía tanta gracia, pero al parecer sus carcajadas le contagiaron, porque, mientras las luces y las estatuas de aquel lugar se movían, los tres no dejaron de reír inocentemente.

A tu lado - TsukkiyamaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora