¹ 𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 ━ harry styles

027. egocentric

Habían pasado seis meses desde que Fine Line fue lanzado. Harry estaba durmiendo una siesta arriba, mientras yo vagaba por la casa buscando cosas que hacer. Al llegar a la sala y ver nuestro tocadiscos de vinilo, decidí que poner algo de música podría mejorar mi humor mientras pensaba con qué terminar mi aburrimiento. Puse el puntero sobre el plato y lo dejé caer. Cuando Fine Line empezó a sonar, comprendí que probablemente no me motivaría para hacer nada.

Harry y yo empezamos a salir cuando su álbum estaba casi terminado y a punto de publicarse. Quería esperar a que el álbum saliera a la venta para escucharlo, así que fue muy exhaustivo tratar de no estropearme la sorpresa con ningún fragmento que pudiera escuchar en alguna de mis visitas diarias al estudio.

Sabía que la relación anterior de Harry lo había dejaba devastado y con el corazón roto. Podía sentir que era cauteloso y que se protegía a sí mismo conmigo, y nunca lo juzgué por ello. Seguiría demostrándole mi amor tantas veces como él lo necesitara.

Siempre que estaba en el estudio con Harry, Mitch me contaba historias sobre él mientras tocaba la guitarra. Juntando todas esas historias en mi cabeza y construyendo una imagen de Styles a partir de ellas, comprendí que era más cariñoso, amable y amoroso de lo que se permitía mostrarme. Aunque nunca le dije lo insegura que me había vuelto por su cautela, estaba constantemente dudando de mí misma y de sus sentimientos hacia mí.

Cuando escuché el álbum por primera vez, agradecí al universo que Harry hubiera aceptado mi petición de que me dejara sola para escuchar el álbum completo y poder disfrutarlo detalladamente. Originalmente tenía la intención de dejar que la música fluyera a través de mí, pero después de haber escuchado once canciones del álbum, algunas de las cuales me causaron cierta angustia, sólo quería protegerme de las melodías y armonías que volaban en la habitación a mi alrededor.

Mientras los primeros segundos de la canción resonaban en la habitación, me vi envuelto en una atmósfera diferente. En la que mi estado mental no me dejaba estar sin llorar. Todas las inseguridades y dudas con las que me había cruzado antes, vinieron sobre mí y me arrastraron con ellas.

Me sentía indigna del amor de Harry porque resultó ser una persona muy afectuosa. Pero no para mí, y eso es lo que más me dolió. A pesar de que le di todo, cada gota de amor que tenía, él no podía amarme tanto como a ella. Harry escribió canciones tan hermosas sobre la persona que le rompió el corazón, mientras que a mí ni siquiera pudo decirme que me amaba.

Sentada en el sofá, traté de alejar los pensamientos negativos. Sin embargo, no importaba cuántas veces los alejara, seguían volviendo.

Harry no me amaba como a ella.

Trataba de mantenerme ocupaba para que mi mente no tuviera tiempo en estas cosas. ¿Pero para qué?

Harry no me quería como a ella.

El álbum estaba completamente lleno de adoración y tristeza. Parecía adorarla de verdad.

Harry nunca me había adorado.

¿Cuál adoración? Probablemente ni siquiera me amaba. ¿Cómo iba a saberlo, si él me estaba apartando todo el tiempo? Si yo fuera lo suficientemente buena, ya habría abierto su corazón a mí.

La canción continuó, y me perdí tanto en las emociones que sentía, que no noté cuando llegó a su fin. Me quedé sentada en silencio durante lo que pareció una eternidad. Mirando mis manos, no me di cuenta del paso del tiempo. Lo único que me mantuvo consciente de mi entorno y me permitió mantenerme en contacto con la realidad fue el tic-tac del reloj que Harry había colgado en la pared algunas semanas atrás.

Tampoco noté cuando el hombre de pelo rizado se asomó por el hueco de la puerta. Mi mirada se elevó de mi regazo hasta su cara de preocupación. No entendí el motivo de su expresión hasta que sentí las lágrimas que corrían por mis mejillas. Me apresuré a tratar de limpiarlas discretamente.