capítulo 2

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Esto de tener a Darwin como vecino no me estaría gustando nada. No cuando al salir de mi departamento para ir al trabajo, me lo cruzo en el pasillo cuando sale del ascensor todo sudado y con la ropa deportiva pegada a su musculoso cuerpo. Siento mis piernas temblar. Se saca los auriculares y me dedica un saludo con la cabeza.

—Buenos días, señorita Stuart, ¿durmió bien?

Trago saliva cuando se seca el sudor de la frente con su remera y en consecuencia se le ve algo de piel y su abdomen marcado.

—Si, excelente. —me muerdo el labio, sintiendo mis mejillas teñirse de escarlata— ¿Salió a correr temprano, señor?

Él se ríe, y yo me quedo hipnotizada con el sonido.

—Creo que es algo obvio, pero sí. —saca las llaves de su bolsillo— Mejor la dejo ir a trabajar, asi no llega tarde de nuevo.

Lo último sonaba a reproche, y hace que el rubor de mis mejillas se note hasta en tres galaxias diferentes. Asiento y me despido de él, subiendo al ascensor. Una vez dentro suelto el aire retenido. Demasiada tentación para comenzar la mañana.

Cuando llego al trabajo saludo al personal que me cruzo, y voy hasta mi oficina. Ethan se encuentra sentado en mi silla, con Cole frente a él.

—¿Qué hacen tan temprano molestando?

—Venimos a traerte el desayuno. —responde Cole, mientras teclea algo en su celular. Levanta la cabeza y me sonríe— Buenos días.

—Buenos días chicos. —sonrío, dejando mi bolso en el escritorio— ¿Qué trajeron?

—Café y donas. —me entrega el mio, para después agarrar los de él y darle a Cole los suyos— ¿Escuchaste que hoy darían un anuncio nuevo?

Niego con la cabeza, mientras le doy un sorbo a mi café.

—También hubo dos despidos ayer. —musita Cole— Asi que el nuevo jefe anda cumpliendo su palabra, pensé que se arrepentiría cuando sepa que tiene a toda la empresa en contra.

—¿Están en contra de Henderson? —pregunto con asombro.

—Escuché a algunas personas decir que en vez de salvar la empresa la arruinará y con los despidos solo los hizo enfurecerse más. —responde mi amigo— Lo creen un inútil.

—Yo creo que los despidos no era la mejor opción en esta situación, más cuando estamos en un momento crítico. —interviene Ethan, comiendo de su dona— Habrá muchos de ellos quejándose hoy.

Hago una mueca. Debo cuidar mi puesto, porque con lo distraída que he estado últimamente he descuidado un monton mi trabajo.

—Mejor comamos rápido y vayan a trabajar, porque hoy es un día largo. —replico.

—Te veo más animada hoy y mas linda. —cuestiona Cole, sonriéndome.

—Me levanté con buenas vistas esta mañana. —contesto, pero ellos no comprenden a que me refiero, y es mejor asi.

Me he levantado con un nuevo pensamiento este día, en no amargarme por lo que sucedió con mi madre. Si puedo seguir con mi duelo y procesar mi pérdida, pero sin ahogarme en el sufrimiento y la tristeza. No puedo alejar a las personas que amo, ni dejar de lado mi vida por ello. Ella no lo querría asi.

—Nos vemos más tarde, preciosa, iremos a almorzar juntos, ¿no? —pregunta Ethan, a la vez que se levanta y camina hasta la puerta, mientras se pone su chaqueta.

—Si, los veré allí.

Mi celular suena, alertando una notificación. Me despido de mis amigos y agarro mi teléfono para ver quien es. El nombre de mi hermana Helena reluce en la pantalla. Ruedo los ojos.

te odio hasta el punto de amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora