" Lauren... " Susurré lanzando el atuendo encima del sofá. Me acerqué rápidamente a donde ella se encontraba moviendo su silla y sentándome suavemente en sus piernas tratando de quitarle las manos de la cara. Ella me miró a los ojos con las mejillas sonrojadas.
" ¿Escuchaste eso? " Me preguntó totalmente preocupada y yo asentí.
" Lo escuché, claramente... " Le confesé y ella chasqueó la lengua volviendo a sollozar.
" Lo siento tanto, Dios mío no sé que mierda le pasa. " Se sostuvo la frente apenada y yo levanté su rostro con mis manos.
" Lauren tranquilizate por favor, nada de eso me importa, ¿okay? " Quité las lágrimas de su rostro con mis dedos y me acerqué para dar un suave beso en su frente " No llores por eso, esa mujer no te merece y mucho menos tus lágrimas. " Ella me miró a los ojos.
" De verdad, que pena contigo Camz... " Ella susurró pero yo negué.
" Sabes que no me importa. " Negué con la cabeza " Me importa que tú estés bien, ya no llores más te lo pido. " Ella me miró sin decir nada más durante unos segundos, entonces sentí sus brazos rodearme la cintura y entendí que ella quería un abrazo, así que me pegué mucho más arrimando su cabeza hacia mi pecho acariciando su abundante cabello.
Inevitablemente me odié otra vez tan solo de pensar que hace años fui yo quien le causó el mismo sentimiento.
" Soy una estúpida, ¿sabes? " Ella habló totalmente derrotada " No debí haber permitido que llegara tan lejos, ya estaba presentando actitudes así y por el amor que le tengo se las había dejado pasar hasta hoy. " Me confesó " Lo único que hice fue no dejarla más a solas con mi hijo, te escuché camz. " Ella me dijo y yo asentí acariciandole las mejillas " Pero es inútil, el no se siente cómodo a su al rededor. "
" Nunca quise meterme demasiado en esto Lauren, pero sinceramente me alegra que la apartes de tu hijo. Ya te pudiste dar cuenta de la persona que es en realidad y no tienes porque sentirte culpable por nada, creo que tomaste una buena decisión. " Le contesté y ella me miró un tanto insegura.
" ¿Tú crees? " Me preguntó y yo le sonreí.
" Lo sé. Te conozco Lauren, siempre sabes que es lo mejor. " Le recordé y ella asintió.
" Gracias... " Me dijo antes de bajarme un poco la cara.
Aún se sentía apenada y no tenía razones por qué.
" Levanta la cara. " Le pedí antes de acercarme para darle un suave beso en la mejilla. Ella lo hizo mirándome fijamente a los ojos. "Así es. " La felicité, me dio una sonrisa que revelaba su timidez por el rojo intenso de sus mejillas " No tienes idea de cómo odio que te hagan llorar cuando tú todo lo que haces es hacer feliz a todos antes que a ti misma. "
" Todas las cosas que me pasan son mi propia responsabilidad, Camz. " Ella trató de quitarle la importancia al asunto, pero yo negué con la cabeza.
" Nadie, escúchame, nadie " resalté " tiene el derecho de hablarte de la forma en la que lo hizo ella. Sea tú novia o sea quien sea. Y sé que esto no es mi problema, que no debo meterme y que quizás me gane un problema, pero la próxima vez que ella u otra persona se atreva a hablarte así te lo juro por Dios que le voy a volar los dientes, Lauren. "
" Camz... " Lauren me habló en tono de advertencia pero yo negué.
" No Lauren, Camila nada. " Le hablé haciéndola suspirar " No tienes idea de todo lo que me contuve para no entrar por esa puerta y soltarle un guantazo a esa mujer. " le dije " La próxima vez lo voy a hacer. "
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Hojas de Otoño (camren)
RomanceLauren Jauregui había vivido toda su vida en cuna de oro como modelo oficial de los diseños de su madre Clara Jauregui, la diseñadora más aclamada del momento, creadora de la marca Morgado and J. A los cinco años, Lauren comenzó a practicar equitaci...