Entre la vida y la muerte;; Hoseok

Capítulo 7

—Felix:
—Date prisa Chan, tenemos que pasar por Jane a su trabajo a las 5 pm.

—Ya voy, espérame. —gritó Chan—

—Pero antes vamos a comer algo tengo mucha hambre Felix.
Dicen qué hay un Caffe muy cerca de aquí, y que todo lo que venden ahí es muy bueno.

—¿seguro? Esta bien vamos entonces.
—Salimos de casa y nos dirigimos al lugar que mi amigo me había dicho—

—Llegamos— No está tan mal este lugar.
—Sonreí y entramos para tomar asiento—

—Jin:
—¿Que van q ordenar jóvenes? —Extendí la carta—

—Quiero un frappé de moca y galletas de oreo para acompañar. —dijo Felix—

—Claro ¿y usted joven? —Mire al chico de cabello rubio—

—Quiero un café, pastel y galletas por favor.

—En un momento llegará su orden ¿A nombre de quien?

—Felix, Lee Felix.

—Fui con Hoseok, le entregue la nota y me aleje para seguir atendiendo—

—Revise la nota, hasta que leí el nombre, tenía una sensación de que ya había oído ese nombre, pero no recordaba donde, hasta qué lo recordé, volví a sentir aquel dolor en mi pecho, el mismo dolor que sentí cuando oí de su propia boca del chico decir que era su novio, apreté mi corazón, me agaché un poco para ver mejor por la ventanilla quería saber si Jane también se encontraba allí con el. Sentí un gran alivio, ella no estaba, pero eso no quitaba el echo de que me doliera al verlo aquí, en mi propia tienda.

—Toque la campanilla 🛎 la orden ya estaba lista y jin se acercó— Aquí está la orden jin.

—No te raro a Hoseok, no entendí por qué, hace unos momentos el estaba sonriendo y ahora ya no. No me atreví a preguntar no era el momento adecuando ni mucho menos la hora.

—Está bien. —Tome la orden y la lleve hasta los chicos.

—Aquí tienen su orden, que lo disfruten. Si necesitan algo más, solo levanten la mano.
—Di una pequeña sonrisa y me di la vuelta—

—Esto está riquísimo —Dijo Chan—

—Quiero saber si lo que dices es verdad —Probé el frappé y realmente estaba muy rico—

—Tienes razón, todo está rico.

—Chan, sonríe.. —tome una fotografía—

—Cheque mi reloj, faltaban 25 para las 5 pm si no llegaba a la hora que Jane me había dicho, denlo por seguro que me mata.

—Chan, tenemos que irnos, Jane esta apunto de salir de su trabajo. —Hablé al chico pagamos y salimos del lugar—

~2 horas después~

—Mi celular sonó, era jungkook, así que conteste—

—hey hermano ¿qué pasó?

—H-hoseok.. ayúdame, ayúdame por favor.
Me quiero morir, ya no quiero seguir viviendo, t-todo lo que hago me sale mal, no puedo decirle que me gusta desde hace 5 malditos años, y cuando me decidí hacerlo, ahí estaba con su pareja abrazados y besándose, sentí que quería morir en ese momento cuando nos presento el uno al otro.
Hoseok ya no puedo mas, nunca me verá de la misma manera que yo lo he estado haciendo desde hace mucho tiempo. Ya no puedo amigo.

—Deje caer mi móvil y me tire al sofá mis lágrimas no dejan de salir—

—JungKook? Respóndeme.. JungKook..

—¿Que pasa con kooki? —Pregunto jin—

—Ah, este idiota estuvo bebiendo, está demasiado ebrio, dijo cosas feas, vayamos con el, cerremos de una vez, y vayamos con el no quiero que haga alguna locura.

—Ah, bastardo idiota. —dije enojado y a la vez preocupado—

—Listo, vamos ya Hoseok.

—Salimos del caffe y nos dirigimos con el, al llegar a su casa ahí estaba mi amigo, en el sofá llorando desconsoladamente, me acerqué a él para abrazarlo y que supiera que no estaba solo, puedo comprenderlo los dos estamos pasando por lo mismo.

—Kooki tranquilo todo estará bien, buscaremos una solución a todo esto. Pero ya no llores.
Mañana con más calma me platicas que fue lo qué pasó, por ahora te ayudaré a que te bañes, te tomarás una pastilla y te dormirás ¿ok?

—Este asintió, se metió a bañar, le di un analgésico para que lograra dormir, y lo ayude a que acostara en la cama—

—Descansa, estaremos abajo, no nos iremos.

—Hoseok... no te vayas.. duerme conmigo.

—Está bien, bien, lo haré solo por qué no te encuentras bien.

—Jin:
—Subi a la habitación, Hoseok ya se había tardado mucho, me ganó tanto la curiosidad así que entre, y ahí está Hoseok, durmiendo con kooki, se veían tan tierno, más kooki ya que el es menor que nosotros.

—Mocosos, ahora yo tengo que cuidarlos a usted. —Sonreí y le tome una fotografía—

—Era demasiado gracioso verlos así, kooki estaba aferrado a hoseok, abrazándolo para que no intentara escapar de él, solo que quien debería estar tapado era él y no Hoseok.

—Los tape a ambos y baje a la sala para dormir—

El amor, el amor es muy complicado jin.
Me convertiría en un idiota, si alguien me llegase a gustar, no quiero verme en ese dilema.

—No te enamores idiota o terminaras como aquellos dos, sufriendo y llorando todo el maldito tiempo— Pensé una y otra vez.