RECUERDA A JAGI || KaiSoo Fest 2021

CAPITULO 9

POV KYUNGSOO

Los días habían pasado como un borrón. Cuando menos esperábamos ya era navidad y Chen y yo tuvimos que pasarla con mis padres, Kai tuvo que irse con su familia.

Las celebraciones siempre eran buen momento para pasarla con la familia. Además los extrañaba. Extrañaba a mi padre y a mi madre quien siempre había sido la más comprensiva.

El restaurante había estado cerrado, todos habían descansado por igual y hasta entrando el mes de enero volveríamos.

Fue durante ese tiempo que tuve la oportunidad de poder pensar en todo lo que había pasado en mi vida los últimos tres meses. Eso y hablar con mi madre me ayudó. Decidí que seguiría a lado de Kai pero como siempre habíamos sido, amigos. No pensaba obligarlo a nada ni esperar más de lo que podía darme.

De vuelta a casa, me sentía mejor conmigo mismo y con la situación en la que nos encontrábamos. Pero eso no quería decir que no extrañara a Kai con horrores y que no quisiera que me abrazara y me besara. Esos deseos sin embargo tenía que enterrarlos muy en el fondo.

-¿Qué fue exactamente lo que le pasó a tu departamento? – Habló Chen detrás de mí y de mi amigo Chang min.

-Hay una fuga. Tardaran dos días en arreglarlo. Tu madre me dijo que tenían espacio aquí. Dodo estas de acuerdo ¿Verdad? – Me miró y rodé los ojos.

-Solo serán unos días, además cuando estábamos en la universidad fuimos roomies, no pasa nada. – Además de Baek, Chang min era un amigo muy cercano. Estaba trabajando en una grande empresa cerca de aquí. Así que se nos ocurrió que era buena idea que se quedara en lo que su departamento estuviera listo.

-¿Y dónde dormirá? – Sabía que Chen era celoso con su privacidad.

-Conmigo – Chang min me dio una sonrisa grande y asintió.

-Esta noche les comprare la cena – Le di una gran sonrisa.

Cuando los tres ingresamos en el departamento nos sorprendió que Kai ya se encontrara ahí. Estaba limpiando el pasillo con unos audífonos puestos. Fue cuando nos vio que saltó y dejó de limpiar.

-Chicos – Nos dio una sonrisa grande, de esas que yo adoraba. -¿Qué tal sus vacaciones?

-Estuvo bien, mi madre te manda saludos. Quería que te unieras – Asintió pero ahora veía a nuestro acompañante.

-A mis padres se les ocurrió que la familia tenía que reunirse en la casa de la montaña – Se acercó a Chang min - ¿Quién eres tú? – Mi amigo lo miro de arriba abajo, evaluándolo. Le conté a Chang min todo lo que había acontecido. Así que sabía quién era Kai.

-Soy Chang min, soy amigo de Dodo – Estiro su mano con una gran sonrisa en el rostro.

-¿Dodo? – Kai levantó una de sus cejas.

-Sí, de Soo. – Me miró ahora a mí.

-Chang min se quedará unos días aquí, su departamento tiene un problema. En un par de días estará bien – Kai asintió aun mirándonos.

-¿Dónde se quedara? – Chen puso los ojos en blanco.

-Dormirá con Soo – Chen cargó nuestra cosas hacia las recamaras, Kai seguía observándonos pero ahora su ceño estaba fruncido.

-¿Por qué se queda con Soo y no contigo?- ¿Eso era irritación?

-Porque Soo es su amigo y además a mí no me gusta dormir con nadie más.

--¿Por qué no duerme en el sofá? – Miré a Kai inspeccionándolo. Mi corazón me decía que parecía celoso pero mi cabeza se negaba a creerlo.

--No voy a dejar que duerma ahí, además ya hemos dormido juntos - ¿Por qué molesto se veía tan bien? ¿Porque tenía tantas ganas de abrazarlo? Pasamos por un lado de él rumbo a la recamara.

-Un gusto conocerte – Dijo mi buen amigo pero Kai no dijo nada, por el contrario parecía que boqueaba como un pez sin saber que decir.

-Él esta celoso – Me dejé caer en mi cama. Chang min me sonreía.

-Ya quisiera yo – Dije con negativa.

-Enserio él quería arrancarme los ojos justo ahí – Resoplé viéndolo.

-Kai no me recuerda Chang, no es como si de pronto estuviera celoso.

-Su cerebro puede no recordarte pero ¿Qué hay de su corazón? ¿Su cuerpo? – Reí con ironía y tristeza.

-El cuerpo hace lo que el cerebro le manda – Mi amigo tomó mi mano.

-Entonces ¿Ya te rendiste? – Bajé la mirada.

-No lo sé. No sé qué pueda pasar. Solo ahora no quiero hacerme ilusiones.

(-)

Esa misma noche mí amigo compró la cena que nos prometió, estaban todos viendo una película cuando me senté junto a ellos. Me gustaba la comida china, creo que era de mis favoritas. Así que disfrutaba comerla.

Cuando estuve sentado, Chang min me dio una sonrisa cómplice y le asentí. Siempre me había sentido bien a su alrededor. Lástima que no bateaba para este lado.

Salté en mi lugar con sorpresa cuando sentí una manta grande sobre mis hombros. Levanté la mirada y me topé con Kai mirándome. Me había puesto una manta. Además la estaba acomodando sobre mis piernas desnudas.

-No entiendo como con este clima sigues vistiendo así – Dijo entre dientes, solo yo pude escucharlo- Me quede solo mirándolo cuando fue y se sentó a mi lado. Después observó por un segundo a Chang min y de nuevo a mí. Mi hermano y Chang min lo observaban.

-¿Estas bien? – Preguntó mi hermano a Kai.

-Si – dijo este viendo a la película.

-Yo también tengo frio – Puchereo mi hermano y sonreí aun con el corazón latiendo como loco.

-Toma tus propias mantas.

-¿Por qué a Soo si le diste una? –Kai paso saliva, después se dignó a verme. Mi corazón dio un vuelco.

-Parecía que tenía frio y aproveche que fui por agua – Mis mejillas se colorearon, además ya no podía comer. Sentía mariposas en el estómago.

-Eres un egoísta – Chen dramatizo y después todos guardamos silencio de nuevo.

Si me preguntaran de qué se trataba la película justo ahora no sabría decirlo. Estaba más consiente de Kai ahí a solo un metro de mí, podía sentir que de vez en cuando me lanzaba una mirada y mi corazón no había dejado de latir. De hecho mi cuerpo lo resentía también. Me sentía caliente con las miradas que me lanzaba. La temperatura debía de estar fría pero con la manta y lo que sentía tenía mucho calor. Solo no me quite la manta porque me vería comprometido si se daban cuenta de mis pantaloncillos más apretados de lo normal.

Hubo un momento durante la noche que Chang min tenía la intención de acercarse a mí, sin embargo cuando sentí que Kai cerraba el espacio que había entre nosotros. Mi piel se erizo. ¿Qué estaba haciendo? ¿Porque hacia esto? Quería salir corriendo de ahí.

-Hueles a ducha – Ahora sí, la sensación del susurro, su aliento y las palabras de Kai llegaron hasta mis pantalones. ¿Estaba loco?