¿Por qué a mi?

Capítulo I

El aire estaba cargado de tensión y expectación. En la arena del Torneo del Poder, los espectadores observaban cómo la energía de dos guerreras comenzaba a fundirse en una. Caulifla y Kale, las saiyajins del Universo 6, sonreían con confianza mientras se preparaban para dar el siguiente paso. El Pothala en sus orejas destelló, y en un instante, sus cuerpos se fusionaron, liberando una explosión de poder que sacudió el campo de batalla.

Frente a Goku, la nueva figura emergió con una sonrisa llena de arrogancia: Kefla había nacido. En su forma base, con el cabello negro y una postura desenfadada, ya irradiaba un poder inmenso. Sus ojos brillaban con la promesa de una batalla legendaria.

"¡Goku! ¡Gracias por empujarme hasta aquí!" gritó Kefla con entusiasmo, estirando su brazo y flexionando sus dedos, probando la nueva fuerza que recorría su cuerpo. "Nunca me había sentido tan increíble. Esta fusión... es el principio de algo grandioso. ¡Prepárate!"

Goku, todavía recuperándose de su desgaste, sonrió, una sonrisa que reflejaba la emoción que sentía al ver a un oponente tan fuerte. Aún en su forma base, el aura de Kefla era palpable, densa, como si cada respiración que tomara cargara el aire a su alrededor de pura energía saiyajin. "Vaya, Kefla. Esto se va a poner muy interesante."

No solo el centro su atención en la chica, los dos saiyajins que se encontraban todavía en la arena se fijaron en el increíble poder que desprendía, sin duda alguna era un espectáculo que no se querían perder, ni Vegeta despagaba su vista, esta acción por parte de los chicos llamo la atención del namekiano del universo 7.

Sin decir más, Kefla cargó hacia él, sus puños ardiendo con una fuerza que ni siquiera necesitaba estar transformada para mostrar. Goku esquivaba y bloqueaba sus ataques con movimientos precisos, estudiando cada golpe y cada patrón de su estilo.

"¡Vamos, Goku! ¿Es esto todo lo que tienes?" gritó Kefla mientras lanzaba una patada lateral que Goku bloqueó con su antebrazo. A pesar de su confianza, Goku se daba cuenta de que ella apenas estaba empezando a liberar su verdadero potencial.

"¿Quieres ver más?" Goku respondió, su tono ligero, mientras retrocedía con una sonrisa. "Vamos a calentar las cosas, entonces."

Con un grito que hizo vibrar el espacio, Goku se transformó en Super Saiyajin Dios. Su cabello se tornó de un rojo vibrante, y su aura divina estalló a su alrededor, calmada y cálida pero inmensamente poderosa. Su cuerpo brillaba con una energía controlada, lejos del impulso explosivo del Super Saiyajin normal.

Kefla, por su parte, lo observó con una expresión de puro deleite. "Uffff, eso sin duda es caliente, cariño. Así que has decidido entrar en serio. Pero yo tampoco me voy a quedar atrás." Cerró los ojos por un momento, concentrando su ki, y su cuerpo comenzó a brillar con un leve destello dorado, preparándose para su siguiente fase.

Con un grito, Kefla ascendió al Super Saiyajin. Su cabello se tornó dorado y sus ojos brillaron con una ferocidad renovada. Su aura chisporroteaba a su alrededor como relámpagos, destellando con energía eléctrica verde que hacía eco de la inmensa fuerza contenida en su cuerpo.

Ambos guerreros se miraron durante un segundo, sabiendo que lo que venía a continuación sería una prueba de pura resistencia y técnica. Sin más advertencia, sus cuerpos desaparecieron en el aire, moviéndose a velocidades tan rápidas que los ojos comunes no podían seguir.

"¡Es impresionante lo fuerte que es!" comentó Gohan, con su mirada fija en la batalla."

"¿Por qué tan interesado en esta pelea?" inquirió Piccolo, sin apartar su atención del enfrentamiento.

"Ummm, no sé, es como si mi cuerpo no quisiera despegarse de esta sensación de poder" respondió.

"Jojojo, yo tengo la respuesta para eso" interrumpió Whis, captando la atención de todos los universos presentes, salvo de los dos saiyajins que seguían luchando.