1. Emperador Consorte (SheevWan) [Traducción] <Hal>

Capítulo 24: Identidad.

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🔞Contenido adulto y algo delicado🔞

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- ¿Pasa algo, mi amor?

Obi-Wan saltó de su lugar levemente, levantando la vista de su plato que no había tocado en unos minutos. El Emperador, frente a él, lo miró con intensidad y preocupación mezclada con desconfianza. Inconscientemente, puso su mano sobre su collar. Collar que se había vuelto a poner para no despertar las sospechas de Sidious, aunque había manipulado la abertura para permitirle quitárselo en cuanto estuviera solo.

- Tu silencio se está volviendo irritante - dijo su marido con más frialdad.

El consorte tragó saliva, conociendo ese tono.

- Lo siento, estoy... un poco cansado.

Sidious frunció el ceño, terminó su copa de vino antes de limpiarse la boca con una servilleta, que tiró casualmente sobre la mesa.

- Odio que me mientan, Obi-Wan.

El joven se estremeció y miró hacia abajo, incapaz de soportar los ojos oscuros y dorados de los Sith. Abrió la boca para tratar de explicar pero no salió nada. Solo le vinieron a la mente sus pensamientos sobre la posibilidad de que su propio marido pudiera ser la causa de su pérdida de memoria. Desde que se dio cuenta de esto, no estaba tan sereno como antes. Tan pronto como volvió a ponerse el inhibidor, le faltó la Fuerza y ​​se alejó esperando que el abrazo y el regreso de su marido lo apaciguaran. Pero fue todo lo contrario. Le temía. Dudó. Lo cuestionó todo.

¿Son realmente los Jedi los que provocaron la caída de la República? ¿Son realmente ellos los que le hicieron sufrir? Extrañaba terriblemente la voz de su antiguo maestro, le hubiera gustado charlar un poco más con él...

- Obi Wan - Sidious dijo mientras se levantaba para caminar hacia él, agarrándolo por la barbilla y obligándolo a mirarlo directamente a los ojos. El corazón de Obi-Wan de repente latió más fuerte y se estremeció ante el agarre del Sith -. ¿Qué me estás escondiendo? - continuó el Emperador con el mismo tono de voz gélido.

El consorte contuvo la respiración, no podía mentir, no podía ocultar este secreto de que lo estaba torturando. Había pensado que podría aguantar, pero fue un esfuerzo en vano. Qui-Gon había intentado advertirle que tendría que enfrentar este dilema, enfrentar elecciones que podrían llevarlo por caminos oscuros. Su collar de repente se sintió más pesado de usar.

Fuerza, quería quitárselo ahora e intentar luchar contra ese poder ahora. Poder que vino de su esposo. Estaba seguro.

- Yo-yo… deseo recuperar mi memoria - tartamudeó, su voz temblaba.

No estaba mal, Sidious no vería una mentira en esa oración, además, solo frunció el ceño, luego sus rasgos se relajaron.

- No lo encontrarás, querido, ya hemos hablado de eso - dijo, soltándolo y dando un paso atrás.

- Eres un Sith... poderoso en la Fuerza, ¿por qué no puedes hacer nada por mí? - Obi-Wan preguntó, poniéndose de pie.

- No puedo devolverte lo que los Jedi te robaron...

- ¿De verdad fueron los Jedi o… tú quien es la causa de esto? - Obi-Wan respondió bruscamente.

Esperaba que su marido reaccionara a esto y no estaba equivocado. Este último se tensó, mirándolo con su mirada fría.