Capítulo 4 |

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La habitación se estaba llenando de leves gemidos, para él, el acto que estaba haciendo era imprudente y desagradable pero no le quedaba de otra para saciar su necesidad, era la primera vez que hacia algo como eso y le resultaba vergonzoso recordar la razón por lo que lo hacia. Simplemente se le paro por el supremo (jajaja XD) por escuchar su voz, solo por eso estaba así, tenía que distraerse de alguna manera, extrañamente su mente empezó a recordar la primera vez que lo vio.

-Me alegra que hayan llegado a tiempo-dijo el antepasado rō, a la misma ves haciendo una reverencia con su cabeza-quiero presentarles a Shin, el será el supremo kaio-sama por el momento-anuncio.-

La primera vez que lo vio, para el era un kaio-shin común y corriente, no había nada relevante en el que le pudiera llamar la atención ¿Pero como logro hacerlo? La mirada de Shin estaba tan fija en el que este por un momento se había perdido en esos ojos negros, lo suficiente como para no escuchar lo que decía .

-Estará por un periodo medio, asta que encontremos a alguien más apto que pueda tomar el cargo-termino para después dar un largo suspiro-por cierto el carece de ciertas facultades, siendo una el no poder oírlos y...otra el no poder hablar, así que tendrá que comunicarse entré lenguaje de señas para entablar cualquier asunto importante o relevante.-

El no puede hablar pero entonces...

"Lo siento"

Por que mencionaría eso el supremo , ¿Por qué lo ocultaría?.

-No lo entiendo ¿por qué el supremo, estaría usando el lenguajes de señas, si él puede hablar?.-

Declaro whis, con intriga pero fue más una pregunta para el mismo que para kibito.

-Además de que la voz, del supremo es completamente agradable de oír.-

-!Eh¡, ¿señor whis, usted a escuchado su voz?....-

-Si. Aunque fue en un susurro, ¿Él puede hablar? ¿Verdad?.-

-.......-Kibito, se quedó en silencio por un segundos, pero luego mostró una sonrisa-!valla¡ usted le debe agradar bastante-admitió con un tono de voz alegre-realmente la última vez que logré escuchar su voz, fue ase algunos días y solo fue para agradecerme algo-dijo para lugo reírse-...el muy rara vez suele hablar.-

-¿Y a qué se debería eso?-pregunto-

-...Es solo que le resulta extraño el simple echó de no poder oír su propia voz-le habia declarado kibito, como si alguien más se lo halla dicho, mientras aún seguía en el templo-verás, Shin no nació...sordo. Me han dicho que el solo tuvo un "accidente"....-

Accidente, accidente, accidente...

Esa palabra hacia eco en su mente, no sabía en qué momento los gemidos que este emitía se hicieron mas fuertes y los movimientos más rápidos, muy pronto pudo sentir como un líquido salió y se esparció por su mano, aquella cosa era viscosa y pegajosa Ademas que desprendía un olor peculiar uno que el jamás había olido.

Whis miro su mano por un momento, su respiración estaba un poco agitada, esa cosa le parecía asquerosa sabía que no podría simplemente lavarse las manos he irse como si nada, realmente su olor era fuerte así que no le quedó de otra más que bañarse de inmediato.

No sabía cuánto tiempo había pasado desde que se sumergió en el agua, su cuerpo se sentía raro, de alguna forma el agua lo ayudaba a calmarse, su mirada estaba puesta en la nada, en un punto que ni el sabía cuál, uno imperceptible para su ojo. No tardó mucho para sumergir su cabeza completa en el agua provocando que su peculiar cabello cayera asta sus hombros (realmente era largo) la mirada de el ángel era una serena como alguien que medita o piensa.

Al salir se dirigió al comedor del templo, para su sorpresa su dios estaba ahí, pero perecía meditando algo con una cara de prejuicio o shock, whis simplemente se acerco a éste con una sonrisa y tomando su habitual personalidad.

-Que sorpresa que sigua aquí señor bills-menciono-¿acaso desea que le haga algo de comer?.-

Bills no respondió, solo se alejó un poco de el con una expresión de sorpresa, whis repitió otra ves la acción pero cada vez que lo hacía este se alejaba rápidamente, como un niño que no quiere probar su jarabe o un gato que se niegan rotundamente a ser bañado (pero él no es de esos, gatos).

-Señor bills, ¿Por que se está alejando de mi?-pregunto un poco confundido, por el comportamiento de el dios, mientras se seguía acercando a este.-

-!Ya cállate, whis y aléjate¡-exclamo el dios, que ya estaba arrinconado contra la pared, whis sin mucho preámbulos abcedio a su petición y se alejó de este.-

-Señor bills, ¿Acaso usted no se encuentra bien?-pregunto-casi siempre me anda pidiendo que le haga algo delicioso para comer ¿Que mosca le picó ahora?.-

-No hace falta que lo hagas tú. Yo puedo hacerme solo de comer-se confirmo a si mismo bills, con voz firmé, algo que le hizo sacar una sonora carcajada al ángel.-

-Jojojo, usted señor bills, si usted casi no puede ni prender el horno de la cocina-declaro con gracia-y no es para hacerle enojar o ofender en lo absoluto pero si no fuera por mí usted jamás se despertaría para darse siquiera un baño.-

-Ahg...!Cállate whis, nadie pidió tu opinión¡.-

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