Capitulo 38. Parte I

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Descubriendo verdades.

Luciana

La semana paso volando, quizá por los nervios de los que nos depara el destino. La hora de la coronación de la alta monarca esta por comenzar. Los miembros del imperio estamos en el balcón del palacio real. La cuidad entera esta presente en este evento, las multitudes gritan alabando a Fiorella con carteles con su foto y nombre. Aun no entiendo como es que logro posesionarse de ese cargo tan rápido.

Los hombres de mi familia lucen como príncipes con traje especialmente diseñado para este evento, y las mujeres lucimos vestidos blancos y tiaras con diferentes modelos. De izquierda a derecha, En primer asiento, mi padre quien a su lado tiene a mamá, seguida de Valencia, Marco, Gabriella, quien tiene en el coche a mi pequeña sobrina totalmente cubierta, seguimos Zev y yo. Mi  zio lucian esta a mi lado, acompañado de Antonella, Alessia y James junto a Liana y Andrew, por ultimo Lio, Antoni y su "esposa" Anastasia. 

Los aplausos y los gritos aumentan cuando La reina camina hasta  podio a paso fime y con la barbilla en alto, luciendo un vestido blanco con diamantes. Esta mujer es realmente imponente y tiene enamorada a toda la gente de la cuidad.

Una vez llega a este, el silenio se hace presente. La atención de todos se centra en ella y solo ella, nuestra nueva reina y esta vez la palabra le queda literal «La reina». 

—Buon pomeriggio —"Buenas tardes" —Hoy es un honor para mi estar frente a ustedes. Como muchos saben, tanto yo como mi imperio somos Italianos. —Sonríe dándonos un visto rápido, vuelve la mirada al frente, al pueblo. —Pero he vivido lo suficiente en Londres como para considerarlo mi hogar. Amo tanto Londres como Italia.

Los aplausos llegan de nuevo. tanto de las diez familias mas prestigiosas de la cuidad, quienes están sentados en primera fila frente a la reina, tanto como de las personas del resto de la cuidad quienes están alrededor de la cerca de seguridad que adaptaron los guardias de la familia para mantener una distancia prudente de la élite londinense.

—La monarquía, es algo que añore por años, no por mi, sino por el hecho de que esto traerá beneficios para todos por igual. Estoy orgullosa de ser su reina, de poder guiarlos y darles progreso, les aseguro que conmigo al mandato, todo sera una maravilla. 

—¡¡Que viva la reina!! —Grita un hombre de la multitud.

—Desde siempre he estado lista para esto —Sonríe— Asi que no esperemos mas. 

Mira a la persona encargada de la coronación. Un hombre se acerca trayendo la corona llena de joyas preciosas ante nosotros. Una mujer desconocida mas o menos de la edad de Fiorella supongo, se acerca al podio y toma el micrófono.

—Buenas tardes Londres. Hoy  su país esta en un momento de cambio de crecimiento, debéis valorarlo y saber agradecer que esta magnifica mujer, su reina sera su mandataria. A continuación se les leerá unos de los cuantos argumentos que llegaran de la mano con su nueva monarca. —La mujer con el marcado notorio español, mira a mi nonna y sonríe— Mi reina estoy orgullosa de ser tu amiga, desde España siempre apoyándote.

Ambas mujeres se besan las mejillas y la mujer regresa a su asiento a primera fila, en medio de su esposo y Emiliano, hay comprendo que son los padres del doctor mas conocido de la cuidad.  Los tres me miran fijamente y hablan entre ellos, sus miradas realmente me incomodan, Zev toma mi mano y besa el dorso, le doy una sonrisa. 

—A continuación me dispongo a leer algunas clausulas de las cuales vendrá conformado nuestro nuevo mandato.— Habla un hombre, una vez la reina se sienta, el hombre comienza la lectura.

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