No eres como tus antepasados.(James Sirius Potter y tu)

Halloween sustos y más

Hoy por fin era Halloween, además viernes, por lo tanto al día siguiente no había clase y eso nos proporcionaba no tener hora para dormir, las chicas y yo ya lo teníamos todo listo, el maquillaje, los disfraces y el hechizo para las gominolas solo faltaba que llegara la noche, ahora estamos en clase de herbologia con el profesor Neville y estábamos aprendiendo a traspasar las mandrágoras de macetas y cuando nos quisimos dar cuenta ya era la hora de comer.

Estábamos Valeria, rose y yo comiendo cuando nos damos cuenta de que los merodeadores no estaban en la mesa y eso era raro ya que Frank no se salta ni una comida pero no le dimos importancia, al acabar de comer volvimos a las clases impacientes, cuando por fin es la hora de la cena salimos pitando y nos sentamos lo mas cerca de la puerta posible, nos quedamos observando los trucos que hacían los fantasmas en el aire, después de cenar pudimos empezar a comer dulces y Valeria cogió una bolsa y metió todo los dulces que podía y nosotras obviamente hicimos lo mismo cuando nos dijeron que podíamos subir a la sala común así lo hicimos y llegamos a nuestra habitación a la velocidad de Flash.

Una vez dentro nos pusimos los disfraces que yo había formado a partir de nuestra ropa y con el maquillaje que nos puso Rose nos convertimos en las hermanas pesadilla, es lo primero que se nos ocurrió y la verdad parecíamos payasos pero bueno es Halloween teníamos que disfrazarnos si o si, cuando comenzamos a comer y a contar historias de terror nuestra luz se apago de golpe, se nos debía de haber escuchado por todo Hogwarts, después de pegar ese grito, nos encontramos a oscuras y buscamos nuestras varitas , cuando las encontramos gritamos lumus y de las varitas se encendió la punta como si fuera una linterna muggle, -¿Que hacemos salimos?-Pregunto Rose mostrando algo de miedo -Si pues nos seré yo quien habrá la puerta- Le contesto Valeria y yo con todo el miedo del mundo abrí la puerta y... no paso nada entonces me arme de valor y con mi varita aun encendida y las chicas detrás mía bajamos a la sala común y la puerta estaba abierta y como no decidimos salir.

Cuando cruzamos la puerta había un rastro de ¿sangre? que salía de la sala común y continuaba por el gran pasillo oscuro, di un gran suspiro y continúe andando por el pasillo siguiendo el rastro hasta el bosque prohibido, cuando nos adentramos más en el bosque se escucha un ruido proveniente de los arboles que teníamos a dos metros de nosotras, me gire para ver si alguna se prestaba voluntaria para mirar detrás de esos arboles con ruidos extraños, pero ellas estaban abrazas y con la mano ambas me hicieron un gesto de que vaya, suspire y me acerque temblando por todo mi cuerpo y cuando iba a mirar detrás del árbol... -¡¡¡¡¡BUUUUUUUU!!!!!- gritaron cuatro merodeadores y Scorpius vestidos de negro -¡¡¡AAAAAA!!!- gritamos nosotras acto seguido, y ellos se empezaron a reír a carcajadas mientras nosotras les gritábamos cuando de repente apareció una sombra y me acerque más y cuando la mire se convirtió en James gritándome insultos que de verdad me dolían y lagrimas recorrieron mis mejillas y de repente escuche a alguien gritar -Riddikulus- era James que cuando me vio vino a abrazarme -Tranquila ya se ha ido, eso nunca pasara- me decía mientras yo me aferraba a su abrazo -¿Que era eso?- le pregunte entre lagrimas -Un boggart muestra tu peor miedo- me contesto abrazándome más fuerte.

Estuvimos así un rato hasta que pare de llorar y lo mire a los ojos, esos maravillosos ojos azul mar que cada vez que los veía me perdía en ellos y me pareció ver algo de preocupación en sus ojos , cuando volví en mi le sonreí, sonrisa que el también me devolvió, nos separamos y fuimos con los demás que no se como convencieron a las chicas de unirse a la mini fiesta que teníamos en la habitación.

Mientras nos íbamos vi que James iba borrando el rastro de lo que nos dijeron que era pintura y no sangre, aproveche que los merodeadores hablaban entre ellos y que Valeria, Rose y Scorpius charlaban alegremente y me acerque a James que caminaba de espaldas a nosotros borrando el camino -Hola- entable conversación -Hola- me contesto el limpiando el caminito -No te he dado las gracias por lo del boggart así que te las doy ahora- -No a sido nada mi padre me enseño varios hechizos de defensa- -¿Tú me enseñarías algunos hechizos de esos?- -Claro que si- -¡Bien!- Le dije con algo de emoción lo que hizo que se le escapara una risa -¿T/n?- -¿Sí?- -El boggart mostro tu mayor miedo ¿Crees que soy capaz de decirte esas cosas?- Me pregunto mirándome a los ojos, hay... esos ojos azules, algo cristalizados -No, por supuesto que no, pero... tengo miedo que algún día, quieras dejar de ser mi amigo y eso... me destruye por dentro- le respondí con voz quebrada, ahora mis ojos también estaban cristalizados, me miro y me abrazo pero este abrazo era diferente a los otros este abrazo me transmitía un sentimiento que no podía descifrar.

Cuando llegamos a la sala común James ya había terminado de limpiar el rastro de pintura, entramos ya que la dama gorda aun dormía y no habíamos cerrado la puerta, cuando pasamos todos hasta Scorpius cerramos la puerta y nos sujetamos de las manos para llegar todos a nuestra habitación y que las escaleras no se transformen en un tobogán ya que no eran chicas, al entrar en la habitación nos soltamos las manos y montamos sacos de dormir en el suelo para los chicos y nos cambiamos con el hechizo ''Newlockbé'' que nos puso el pijama al instante.

Una vez cambiados nos pusimos cada uno en el lugar donde iba a dormir y casualmente James estaba en el suelo con el saco al lado de mi cama, nos pusimos a contar historias hasta que todo el mundo se durmió menos yo, me quede viendo a James que dormía plácidamente en su saco, arropado, con los ojos cerrados cara a mi y con el pelo más alborotado que de costumbre y con esa imagen de James caí en los brazos de Morfeo.